Por esta razón, nuestras empresas se han preocupado por mantener una publicidad responsable en beneficio del consumidor; apegándose enteramente a los lineamientos legales establecidos y cumpliendo con principios éticos para promocionar sus productos.
No exagero cuando digo que el consumidor es primero y por ello se deben satisfacer sus necesidades con productos de calidad y acciones comprometidas por parte de las compañías y las autoridades, que a su vez favorezcan el desarrollo de la economía.
Este planteamiento de mejores prácticas publicitarias ha llevado a las 62 empresas de la CANIPEC a reforzar el compromiso para el manejo de mensajes transparentes y veraces en los medios. De ahí que desde hace tres años implementamos nuestro “Código de autorregulación y ética publicitaria de productos cosméticos”.
El Código COSMEP fue creado con el objetivo de desarrollar una actividad publicitaria basada en principios éticos para favorecer el alcance, la comprensión y usos correctos de los productos cosméticos, de manera que el público cuente con la certeza que lo que adquiere es seguro y que la publicidad dirigida a ello, es leal, veraz, comprobable y certera.
En el ámbito de la publicidad responsable, los afiliados de la Cámara siempre han colaborado con las autoridades, como Cofepris y Profeco, mediante el intercambio de información y apoyo en la parte técnica; para generar una competencia leal, ética y apegada a las leyes vigentes del país.
La clave para concebir una mejor práctica publicitaria está en la combinación entre las normas establecidas por las autoridades y la autorregulación adecuada, que contribuyan a su vez con la competitividad de la industria, por supuesto, en beneficio del consumidor.