Limitar el impacto ambiental de su actividad e integrar la sostenibilidad de manera trasversal y efectiva es sus estrategias de negocio es, desde hace años, una de las prioridades de las empresas españolas. En este sentido, gran parte de ellas contribuyen de manera significativa con este propósito tomando como base los principios de la economía circular y, en concreto, poniendo el foco en el ecodiseño de los envases. Además, el ecodiseño cobra aún más importancia dentro del marco legislativo nacional y europeo como vía para conseguir los nuevos objetivos de reducción, de incorporación de plástico reciclado y aumentar la reciclabilidad y circularidad de todos los envases.
Más de 4.000 medidas que implantaron más de 2.000 empresas
Así, con la aplicación de distintas medidas de ecodiseño, las empresas pueden minimizar el impacto ambiental de los envases que comercializan. Esta es una de las principales conclusiones que se extraen del VIII Plan Empresarial de Prevención (2021-2023) de Ecoembes -la organización ambiental sin ánimo de lucro que coordina el reciclaje y el ecodiseño de los envases en España- pues, según indica, en 2021 se ahorraron más de 60.000 toneladas de materias primas gracias al ecodiseño de envases. Una cifra que se ha alcanzado gracias a las 4.632 medidas que en este ámbito implantaron 2.067 empresas que forman parte de Ecoembes con el objetivo de hacer más sostenibles sus envases.
Con respecto a la naturaleza de estas medidas, aunque las más habituales estaban encaminadas a reducir el peso de los envases (34%), también fueron frecuentes la reintroducción de material reciclado (15%), facilitar el reciclaje de los envases (13%) y la eliminación de elementos del envase (10%). Otras medidas de ecodiseño aplicadas han ido las enfocadas a la reducción del impacto ambiental (12,4%) y al fomento de la reutilización (3%), un concepto clave de la economía circular que cada vez cobra más protagonismo.
“Las empresas cada vez son más conscientes de la demanda ciudadana en torno a envases más sostenibles y con menor huella ecológica. En este sentido, están haciendo grandes esfuerzos para apostar cada vez más por medidas que contribuyan a avanzar hacia un modelo que fomenta la circularidad de los envases, haciendo que estos sean más sostenibles”, ha señalado Begoña de Benito, directora de Relaciones Externas de Ecoembes, que ha recalcado que “hacia 2030 y 2035, la normativa será cada vez más exigente con los requisitos de los envases que se pongan en el mercado. Por eso, desde Ecoembes, además de las distintas herramientas que ponemos a disposición de las empresas, también trabajamos en un nuevo enfoque de modulación de tarifas que se orientará a facilitar esa transición hacia envases más sostenibles sin que eso suponga perder la función que cumplen para los productos que contienen”.
De las 4.632 medidas, el 54% de ellas han sido aplicadas por PYMES. Por sectores, el 51% han sido desarrolladas por el sector de la alimentación, el 16% se ha llevado a cabo entre las compañías dedicadas al cuidado personal y del hogar, un 18% se ha centralizado en la industria de equipamiento del hogar, un 7% en las empresas de motor y ocio y, el 8% restante, en las empresas del sector textil y de la piel.
Gracias a todas estas medidas, durante este primer año del plan, además de la reducción de las 60.744 toneladas de materias primas utilizadas en la fabricación de envases, se han conseguido ahorrar 1.386.173 MWh de energía y de 22.136.783 m3 de agua, además de haber evitado la emisión de 163.146 toneladas de CO2.