Desde 2015, la agenda global está muy orientada a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), cuyo propósito transformador es en la actualidad una referencia para los gobiernos, instituciones y empresas de todo el mundo.
Desde la óptica empresarial, los ODS se han convertido en uno de los ejes de actuación de las estrategias de sostenibilidad de las empresas. En este sentido, las organizaciones están estableciendo objetivos, metas e iniciativas relacionadas con aquellos ODS sobre los que, de acuerdo con sus modelos de negocio y sectores de actividad, tienen una mayor capacidad de influencia. Además, dado que no son objetivos aislados, sino interrelacionados entre sí, el logro de uno afecta al éxito de los otros, por lo que tienen un efecto multiplicador.
En UHY Fay & Cointegra entendemos que los ODS y la Agenda 2030 adquieren su sentido más estratégico en el marco de las políticas de sostenibilidad, teniendo en cuenta que:
– Introducen nuevas temáticas en la agenda de las empresas en la medida que pueden representar riesgos y oportunidades para el negocio.
– Garantizan el alineamiento del negocio con las expectativas de los grupos de interés, dado que los ODS se centran en dar respuesta a los grandes retos económicos, sociales y ambientales a los que se enfrenta la sociedad en la actualidad.
– Abren un panorama más amplio para la comunicación y el reporte de las prácticas ESG. Iniciativas como el Global Reporting Initiative (GRI) o el Pacto Mundial son dos de los estándares más utilizados para visibilizar la contribución de las organizaciones a los ODS.
– Promueven un liderazgo con propósito. Unir el propósito a la mejora de algunos problemas actuales (construir sociedades inclusivas, disminuir las desigualdades sociales, consumir y producir sosteniblemente, promover el bienestar, combatir el cambio climático, etc.), otorga a la organización un sentido de transcendencia que impregna su manera de ser y actuar.
– Ayudan a poner en mayor valor la aportación de las empresas a la sociedad.
– Inciden positivamente en la reputación.
– Crean consciencia en las empresas de que sus actividades y proyectos tienen una dimensión y un impacto más global.
– Se encuentran cada vez más en la agenda de los inversores.
Por todo lo anteriormente expuesto, los ODS se han convertido en un acelerador global en la integración de la sostenibilidad y criterios ESG en las empresas. Asimismo, pueden servir como acicate para aquellas organizaciones que todavía no tienen incorporada la sostenibilidad en sus agendas.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: 7º aniversario de los ODS, junto a T-Systems y Villafañe&Asociados