¿Qué importancia tiene para vuestra organización formar parte de Andema?
Estar bajo el paraguas de una organización, junto a empresas de primer nivel, que buscan el fin común de la defensa del mayor bien intangible de cualquier compañía: su marca. Además del soporte que proporciona el permanente contacto de la Asociación con las administraciones públicas encargadas de la lucha contra la piratería.
¿De qué forma está vuestra empresa apostando por el desarrollo de acciones de marca que contribuyan a la consecución de los ODS? ¿Nos puedes explicar brevemente vuestra evolución hasta la actualidad?
El compromiso de Bosch con los ODS se basa en el apoyo a estos objetivos a través de sus productos y servicios, al ofrecer soluciones a los desafíos sociales y encontrar respuestas a las cuestiones ambientales y sociales. Regularmente se comparan las actividades de sostenibilidad del grupo con los ODS, concretamente nos enfocamos en 9 de los 17, que están recogidos en nuestro informe anual de sostenibilidad.
En Bosch, aceptamos nuestra responsabilidad y buscamos la sostenibilidad en todas las etapas del ciclo de vida del producto. Empezando por las compras: trabajamos en estrecha colaboración con nuestros proveedores y hemos definido requisitos claros. Estos cubren la protección del clima y el medio ambiente, la conservación de recursos, las condiciones laborales justas y el respeto a los derechos humanos.
Uno de nuestros puntos fuertes es garantizar a nuestros clientes productos seguros y de máxima calidad. Nuestra intención principal a largo plazo es así pasar a una forma de vida y hacer negocios que conserve los recursos y tenga un impacto positivo en la sociedad. Al mismo tiempo, nos vemos como un miembro activo de la sociedad y nos involucramos a través de una amplia gama de actividades. Bosch dona más de 20 millones de euros a causas benéficas en todo el mundo.
Además, nuestro compromiso con la RSE comienza ya en nuestros orígenes. El Grupo Bosch tiene una estructura societaria muy específica: El 94 por ciento de la sociedad pertenece a la fundación de utilidad pública Robert Bosch Stiftung, fundada en 1964, según el legado del fundador de la empresa Robert Bosch. La fundación está dedicada a temas de salud, educación y asuntos globales. Durante el año 2020 la fundación aprobó más de 100 proyectos en todo el mundo, con un presupuesto de unos 80 millones de euros.
¿Puedes especificarnos algunas buenas prácticas y/o iniciativas concretas que estáis llevando a cabo en esta materia y qué objetivos persiguen?
Desde 2020, el Grupo Bosch es climáticamente neutro. Las más de 400 localizaciones en todo el mundo ya no dejan huella de CO2 con sus actividades. Durante los últimos dos años, alrededor de 2.000 proyectos en todo el mundo y un equipo virtual de más de 1.000 empleados han ayudado a dar forma a nuestro enfoque estratégico, gracias a una acción climática efectiva, a través de cuatro pilares.
Uno de ellos ha sido el aumento de la eficiencia energética, con la que hemos conseguido ahorrar, desde 2019, más de 0,38 teravatios-hora (TWh) de energía, gracias a medidas de eficiencia en unas 400 localizaciones de Bosch en todo el mundo, una cifra cuyo aumento en 2030 será de 1,7 TWh. Otro de los pilares sigue siendo el uso de energías renovables. Para 2030, Bosch tiene la intención de generar alrededor de 400 GWh de energía de fuentes renovables, principalmente de energía fotovoltaica (PV).
La expansión de la compra de electricidad verde, otro de nuestros pilares estratégicos, nos ha permitido alcanzar la neutralidad de carbono lo más rápido posible, Bosch ha aumentado principalmente la proporción de energía verde utilizada. En Alemania, la empresa ha estado comprando exclusivamente electricidad verde, con las correspondientes garantías de origen, desde 2019. En todo el grupo, la proporción de electricidad verde ya era de alrededor del 83 por ciento a finales de 2020.
Por último, el compensar las inevitables emisiones de CO₂ con créditos de carbono, ha constituido también un pilar de apoyo fundamental en nuestros objetivos climáticos. El espectro de actividades que abarca esta compensación es muy amplio, solo por poner algunos ejemplos, desde la reforestación de las selvas tropicales en América del Sur, hasta la distribución de cocinas a las personas necesitadas en África, Asia y Sudamérica.
¿Cuál es la situación actual de la RSE en vuestro sector y sus principales barreras y obstáculos?
Desde Bosch, buscamos un equilibro entre los objetivos medioambientales, sociales y económicos en todos los ámbitos, teniendo en cuenta nuestra responsabilidad con la sociedad y con nuestros empleados. La incertidumbre frente a factores inesperados como la pandemia y la actual situación geopolítica son desafíos muy importantes, barreras y obstáculos que debemos salvar con una gestión eficaz.
¿Cuáles son los otros grandes retos y desafíos de tu empresa en materia de RSE?
Para 2030 el Grupo Bosch se ha marcado un nuevo objetivo: el 15 por ciento de las emisiones indirectas se van a reducir, lo que corresponde a más de 60 millones de toneladas métricas de CO2. Estas son emisiones que ocurren fuera de la esfera de influencia directa de Bosch, por ejemplo, en los proveedores, en logística, viajes de negocios o durante el uso del producto.
Los expertos se refieren a esto como alcance 3. Los objetivos de acción climática han sido confirmados externamente por el Iniciative Science Based Targets (SBTi), que proporciona una evaluación independiente de los objetivos de las empresas para reducir emisiones, basada en evidencias científicas. Bosch es el primer proveedor de automoción en sumarse a la iniciativa con un objetivo concreto.
En logística, la atención se centra en optimizar las adquisiciones, la puesta en común de envíos y, por último, pero no menos importante, evitar el transporte aéreo. Gran parte de las entregas destinadas a Bosch serán enviadas por mar en el futuro.
Al mismo tiempo, los activistas climáticos internos esperan importantes efectos en relación a un impuesto interno al carbono en viajes de negocios, así como hacer que la flota de vehículos internos de Bosch sea respetuosa con el medio ambiente, lo que pronto también provocará cambios visibles. Sin embargo, el mayor potencial para reducir las emisiones de CO2 está en la fase de uso del producto. Esto por sí solo representa alrededor del 90 por ciento de emisiones de scope 3.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Marcas y Responsabilidad Social, elaborado en colaboración con Andema.