Vivimos en una época donde permanentemente escuchamos la importancia que tienen los procesos digitales y tecnológicos en el éxito de una empresa. Y es cierto. Una compañía actual está obligada a contar con las últimas innovaciones con el fin de automatizar procesos y ser más eficiente. Sin embargo, nos equivocaríamos si, fruto de la importancia que le damos a la máquina, dejásemos de lado a las personas.
Es innegable. Vivimos inmersos en una revolución digital que todos conocemos y a la que todos intentamos seguir el ritmo, pero el verdadero hito que marcará el éxito de las compañías en el futuro cercano es la revolución de las personas. El talento es, y seguirá siendo, el activo más preciado para una empresa y ésta debe saber seleccionarlo, potenciarlo y, sobre todo, mantenerlo. Solo así podrá diferenciarse en un mundo en permanente conexión donde los nuevos procesos y avances tecnológicos de otras compañías son cada vez más fáciles de identificar e implementar en tu propia empresa.
La labor de las empresas hace tiempo que dejó de ser simplemente ofrecer un puesto de trabajo y buscar un crecimiento económico. Las compañías tienen el deber, si no la obligación, de asegurar la satisfacción y el crecimiento de sus empleados, de ser ejemplo de cohesión social y catalizadora del progreso. Solo así, creando un ambiente favorable y horizontal donde el trabajador tenga las herramientas para proponer ideas y mejorar procesos, es posible un crecimiento regular y sostenido.
En Leroy Merlin somos conscientes de la diferencia que marcan nuestros colaboradores y, por tanto, de lo vital que resulta para nuestro progreso su bienestar y motivación. A principios de este año anunciamos el reparto de una prima extraordinaria de bienestar de 500€ a 16.000 colaboradores de la compañía. Acciones como esta prima buscan, junto a muchas otras que ponemos en marcha cada día, no solo recompensar el esfuerzo y los desafíos a los que nos hemos enfrentado en los últimos años, sino seguir apostando por un modelo en el que nuestros colaboradores están en el centro y se sienten parte vital de nuestra compañía.
Abogamos por que las personas tengan un papel protagonista y sean nuestro pilar para diferenciarnos de otras empresas. La participación de nuestros colaboradores en los beneficios de la compañía es algo que llevamos haciendo desde 1998, pero solo representa un factor más de nuestra estrategia de recursos humanos. Un modelo diferencial y de éxito, que incentiva la autonomía y la iniciativa de los colaboradores, que fomenta planes de desarrollo y potencia el bienestar de todo nuestro equipo. Pero que, sobre todo, apuesta por las personas como lo que son, el valor más importante que tiene Leroy Merlin para seguir creciendo de manera exitosa.
