Apostar por el talento diverso supone una ventaja competitiva para las empresas, no solo porque la diversidad es una de las principales fuentes de innovación, sino también porque es una forma de asegurar su sostenibilidad. Por ello, en Cepsa asumimos la Diversidad e Inclusión como un verdadero y esencial factor de crecimiento y no como una imposición de los tiempos que corren.
Pero para aprovechar todas las ventajas que aporta el talento diverso es necesario fomentar una cultura inclusiva que valore las diferencias y que fomente entornos donde todas las voces sean respetadas y escuchadas. Aquellas empresas que evidencian una sólida convicción en la diversidad son las que tienen más oportunidades de mejorar sus aprendizajes y enriquecer su cultura organizacional. En Cepsa creemos que la mejor manera de crear cultura es a través de los líderes y por eso hemos construimos un modelo de liderazgo inclusivo que respalde y haga realidad la participación y el desarrollo de nuestros profesionales, independientemente de su condición personal, física o social.
Aunque esta filosofía siempre ha sido compartida en nuestra compañía, ha sido en los últimos años cuando hemos desarrollado un mayor número de iniciativas dirigidas a construir un entorno de trabajo diverso e inclusivo. Entre estas medidas cabe destacar la creación de un Modelo de Gobierno estructurado a través de una serie de Comités que se encargan de definir, supervisar y medir el progreso de nuestro programa de D&I. Los miembros de estos comités son representantes y promotores de la diversidad, y como máximos líderes de la compañía actúan como ejemplo del comportamiento inclusivo que se quiere promover en Cepsa.
Para lograr un verdadero cambio en la organización es imprescindible establecer retos concretos y ambiciosos y por nuestra parte nos hemos marcado la meta de alcanzar en 2025 un 30% de mujeres en posiciones de liderazgo y conseguir un 3% de profesionales con discapacidad. Por supuesto, para lograr estos objetivos y conseguir una inclusión real y efectiva…
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