¿Qué ocurre con los neumáticos desgastados o que ya no se pueden utilizar? ¿Y con el aceite que se retira del vehículo? Todos ellos tienen una segunda vida. Desde Norauto, cadena de mantenimiento y equipamiento integral del automóvil, llevan a cabo una estricta y responsable gestión de residuos. Así, todos aquellos elementos que pueden ser reciclados son almacenados para su posterior tratamiento. La compañía ya ha conseguido que todos sus autocentros cuenten con la norma AENOR ISO 14001, certificando así que son socialmente responsables.
Norauto trabaja día a día para reducir y minimizar el impacto medioambiental. Por este motivo, la compañía da una segunda vida a miles de productos que se utilizan diariamente en sus autocentros y que, de lo contrario, terminarían contaminando el planeta.
Así, por ejemplo, el 100% de los neumáticos que ha generado Norauto durante el año 2020 se han reciclado. Concretamente, más de 5 mil toneladas de neumáticos han recibido tratamiento, lo que equivale a 20 piscinas olímpicas. Hay que tener en cuenta que los neumáticos pueden tardar hasta 1.000 años en descomponerse. Darles una segunda vida es vital para no contaminar el medio ambiente.
Los neumáticos se reciclan para realizar pavimentos, losetas de seguridad en parques de juegos y piscinas o como aislantes de sonido en la construcción. También se realizan mezclas de caucho para la creación de gomas que posteriormente se aprovechan para el asfalto o para las pastillas de freno de los camiones. Gracias a los neumáticos usados y reciclados por Norauto en un año se puede llegar a construir más de 437 km de asfalto o se pueden hacer 79 campos de fútbol con césped artificial.
Otro de los elementos que más se reciclan son las baterías. Norauto ha dado un segundo uso a más de 2 mil toneladas, lo que equivale a 98 veces la altura de la Torre Eiffel.
El ácido recuperado se emplea como materia prima en la fabricación de detergentes, disolventes y abonos agrícolas. Por otro lado, el polipropileno se reutiliza para la fabricación de nuevos monobloques para las baterías, al igual que el plomo de su interior, que también se recupera para volver a introducirlo en la fabricación de nuevas baterías.
Igualmente, la compañía ha reciclado más de 600 toneladas de aceite usado, lo que equivale 2.700 bañeras o 970 jacuzzis. Este aceite usado es utilizado para la fabricación de bases de lubricantes, aditivos, material para asfaltos o derivados, como materia prima o biocombustible. Se recupera un 98% del aceite usado y el 2% restante es destinado a valorización energética. Hay que tener en cuenta que es uno de los residuos más contaminantes. Un litro de aceite usado puede contaminar hasta un millón de litros de agua. Si se vierte en la tierra, puede llegar a las aguas subterráneas y puede emitir gases tóxicos y contaminantes si se quema de forma irregular. De ahí, la importancia de su correcto almacenamiento y reciclado.
A esto hay que añadir que todos los autocentros Norauto usa energía eléctrica de origen 100% renovable. Por supuesto, también se reciclan aquellos otros productos producidos en menor cantidad que representan un riesgo potencial para el medio ambiente, como por ejemplo, los envases contaminados.
Norauto España traslada su política de responsabilidad ambiental a empleados y clientes. La compañía ofrece información sobre los aspectos medioambientales de los productos y servicios que ofrecen y promueve conductas eco-responsables con la difusión de recomendaciones y consejos para contaminar menos al volante, así como se fomenta el uso de medios de transporte sostenibles.