El Día Internacional de las personas con discapacidad no solo promueve el bienestar de estas personas en todos los ámbitos de la sociedad, sino que también reconoce el trabajo de muchas organizaciones que las integran y su esfuerzo por crear entornos laborales que las incluyan plenamente y que garanticen la sostenibilidad de su incorporación a medio/largo plazo. Cuando hablamos de entornos inclusivo, nos referimos a aquellos que fomentan el sentimiento de pertenencia al equipo y que reconocen el valor de cada una de ellas, lo que los hace únicos.
Esta acción casi silenciosa es crucial en el camino hacia la normalización de la discapacidad, que llevan a cabo las empresas, centrándose en la diversidad. En la otra cara de la moneda, sin embargo, nos encontramos con una discriminación que sigue muy presente en nuestra sociedad y que supone la principal causa de exclusión de las personas con discapacidad en todos los ámbitos. En este sentido, la falta de comprensión, el desconocimiento y la desinformación generan miedos y falsos mitos acerca de las capacidades y competencias de las personas con discapacidad y se convierten en las principales causas de esa discriminación.
Ante esta situación, la sensibilización resulta una estrategia de transformación imprescindible para avanzar hacia una sociedad más inclusiva. Desde hace años es uno de los ejes clave en la labor de la Fundación Eurofirms. Acorde con ello, y con el Día Internacional de las personas con discapacidad como punto álgido, desde el 3 de noviembre impulsamos la campaña #IgualDeDiferentes. Con ella queremos dar voz a personas con discapacidad a través de trece situaciones reales con las que se encuentran en su día a día, invitando a desmontar mitos y a construir un mundo más inclusivo.
Hace 13 años, la Fundación Eurofirms empezó su labor hacia la normalización de la discapacidad. A lo largo de estos años hemos sido testigos del esfuerzo de la sociedad, el sector público y, sobre todo, el sector privado, por fomentar la inclusión de las personas con discapacidad. Sin embargo, a pesar de que estamos a diez años del cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, la discapacidad continúa siendo el grupo de personas más marginado del mundo (Foro de Davos, 2019). Es por ello por lo que necesitamos abordar su inclusión en todas las esferas, y especialmente en la laboral, que repercute en la consecución de diversos Objetivos del Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.
Todos estamos interconectados. Los problemas y los desafíos, ya se trate de la pobreza, el cambio climático, las migraciones o las crisis económicas, no se limitan nunca a un país o a una región. La desigualdad que viven las personas con discapacidad nos afecta a todos, independientemente de quiénes somos o de nuestro lugar de procedencia. De hecho, de acuerdo con las Naciones Unidas, la equidad y la inclusión son un principio fundamental de desarrollo, tanto es así que se han considerado elementos clave en los esfuerzos mundiales, y en su mandato de “no dejar a nadie atrás”. (Naciones Unidas, 2020)
¿Cómo conseguirlo? Mirando más allá de la diversidad, toda empresa puede ser diversa de alguna manera, pero lo que de verdad importa es que esa diversidad se sienta incluida. Así como lo expresa la mítica frase de Vernā Myers, uno de los más grandes referentes en diversidad e inclusión: “Diversidad es que te inviten a la fiesta, inclusión es que te saquen a bailar”. Solo cuando esto sucede, es cuando se genera un entorno inclusivo que garantiza el acceso equitativo a los recursos y las oportunidades para todos; permitiendo que las personas y los grupos se sientan seguros, respetados, comprometidos, motivados y valorados por quiénes son y por sus contribuciones a las metas de las organizaciones.
Aún queda mucho trabajo por hacer y muchas miradas que sensibilizar. De lo que no hay duda es que son los casos de éxito de empresas como las que nos acompañan en este dosier, los que servirán de inspiración para que muchas otras decidan apostar por la inclusión de las personas con discapacidad. A todas las organizaciones que ya estáis marcando el camino, muchas gracias.