Francisco, ¿puedes hablarnos acerca de Bosquia?
Bosquia es un servicio de reforestación colectiva donde con tu aportación ayudas a reforestar el planeta. Además, con el apadrinamiento de un árbol, recibes un certificado personalizado con la geolocalización de tus árboles. Con nosotros puedes hasta “regalar” un árbol, apadrinándolo en nombre de otra persona, con el valor emocional y educativo que esto puede tener.
También trabajamos con empresas comprometidas con el medio ambiente que desde su RSE quieren invertir en una causa social medioambiental. Concretamente, diseñamos y desarrollamos bosques a medida mediante los cuales las empresas pueden compensar su huella de carbono. A través de la creación de nuevos bosques patrocinados por entidades, materializamos la voluntad de las empresas por romper con el statu quo establecido y sumarse a la lista de empresas innovadoras que impactan sobre la ciudadanía. Tenemos clientes muy variados que van desde La Caixa hasta Worten. También grandes farmacéuticas y universidades.
¿Cómo surge la idea?
Estudié Ingeniería Marina y dejé mi trabajo para viajar por el mundo con una mochila al hombro. Al volver a España tuve claro que quería emprender algo que tuviera que ver con el medioambiente. Mi idea era hacer una consultoría medioambiental, que calculase la huella de carbono de las empresas, pero había 5.000 en España. Entonces me di cuenta que no había muchas empresas que además de calcular la huella de carbono ayudarán a compensarla, además de una forma tan creativa y participativa como hacemos en Bosquia.
¿Podrías compartirnos alguna iniciativa o proyecto que hayáis llevado a cabo en Bosquia?
Es dificil destacarte un solo proyecto, porque a todos les tienes mucho cariño, y todos son muy especiales sean de la envergadura que sean.
Dicho esto, se me ocurren estos proyectos como buenos ejemplos:
En primer lugar, con Worten hemos llevado a cabo un proyecto muy especial que es reforestar en Málaga la Sierra de Cártama y en el mes de noviembre hemos plantado 400 árboles autóctonos.
Por otro lado, con VidaCaixa, la aseguradora de la Caixa, iniciamos un proyecto para plantar en Barcelona 450 árboles autóctonos, para así crear un corredor forestal a orillas del rio Fox.
También tenemos proyectos en Huelva, en la Sierra de Gata, en País Vasco.
Finalmente, dos proyectos a los que tenemos especial cariño son con un grupo de música de Málaga, llamado Second, muy concienciados con el medioambiente. Acaban de lanzar un nuevo disco que se llama “Anillos y raíces”, y estamos haciendo reforestaciones con ellos: una en La Manga y otra en Huelva, cerca de Doñana.
Por supuesto, continuamente vamos sumando nuevos proyectos, cada vez más creativos, en los que las empresas y las personas se involucran emocionalmente porque le ven un gran sentido a la vez que es muy sencillo y transparente.