La EBC, modelo ideado por el austriaco Christian Felber, es una propuesta de nuevo modelo político, social y económico. Albert Einstein definió demencia como “esperar resultados diferentes mientras continuas haciendo lo mismo una y otra vez”. Según esta definición, podemos decir que nuestra sociedad sufre de demencia extrema. Intentamos salir de la crisis aplicando las teorías socio-económicas afines a sistemas que han demostrado ser incapaces de erradicar la pobreza o de construir un mundo mejor, una sociedad más igualitaria y justa. Capitalismo, comunismo y socialismo son sistemas de siglos pasados, es el momento de construir un nuevo modelo adaptado a nuestra realidad. Esa es la gran aportación de la EBC.
La EBC se fundamenta en dos principios fundamentales. El primero, colaborar en lugar de competir. El segundo, las organizaciones – ya sean empresas, ONGs o de otro tipo – deben de buscar el bien común por encima del beneficio económico. Los diferentes sistemas y modelos de RS y las organizaciones que los aplican no tienen porque seguir estos principios.
Además de aportar herramientas para transformar las empresas en organizaciones que trabajen por el bien común, la EBC también trabaja en el ámbito de lo que podemos denominar gobierno del bien común. En diversos países – entre ellos España – ya existen municipios y regiones que están empezando a aplicar los principios de la EBC, fomentando la aplicación de la EBC en las organizaciones de su territorio, difundiendo sus principios entre la ciudadanía y los consumidores, aplicándolos a la propia gestión municipal o regional y desarrollando normativa para favorecer a aquellas organizaciones que destaquen por su contribución al bien común.
Uno de los aspectos que más valoro de la EBC es que es un modelo en construcción. Si bien sus fundamentos los encontramos en el libro “La Economía del Bien Común” de Christian Felber, el propio Christian invita a todas las personas a participar y a aportar ideas para desarrollar y construir el nuevo modelo. Gracias a ello – y aplicando el principio de desarrollo “bottom-up” – la EBC se ha convertido en un movimiento social en el que actualmente participan activamente personas, organizaciones y administraciones públicas de más de veinte países.
A todas aquellas personas a las que la RS “se les ha quedado pequeña” por limitarse en muchos casos a ciertas acciones puntuales y no a la gestión integral y a la estrategia de las organizaciones las invito a acercarse, conocer y participar en la EBC. El encuentro ente empresa – personas empleadas – consumidores – administraciones – sociedad es una realidad dentro de la EBC y, desde esa realidad, es posible trabajar y soñar por un mundo mejor.
Si pretendemos transformar nuestra sociedad en un lugar mejor para todas las personas, en la EBC encontraremos los valores, el camino y las herramientas para transformar a las personas, las organizaciones y los gobiernos. ¿Utopía? Cuanta más personas y organizaciones se sigan sumando, antes será una realidad.
