¿Por qué la Fundación decidió enfocar su labor en las personas sin hogar y no en otros colectivos vulnerables?
Porque era el colectivo más vulnerable y visible según las personas que decidieron empezar Arrels. Otras personas y grupos se preocuparon por otras realidades pero para las personas que empezaron Arrels les inquietaba ver a tantas personas durmiendo en la calle y que no se hiciera nada para solucionarlo.
¿Cómo ayudáis a las personas sin hogar?
La experiencia y el contacto diario con las personas sin techo ha significado desde el principio nuestra manera de atender a las personas. Buscamos recuperar la confianza que han perdido acompañándoles en el proceso de mejorar la calidad de su vida según decidan.
Una de vuestras últimas iniciativas es ‘Homelessfonts’. ¿En qué consiste exactamente?
HomelessFonts consiste en ofrecer tipografías basadas en la caligrafía de personas que han vivido en la calle. Con este proyecto se demuestra que las personas que han pasado por la mala experiencia de vivir en la calle tienen mucho valor que aportar y en este caso lo hacen a través de su letra. Se visualiza que personas que han vivido en la calle se convierten en artistas.
Con esta iniciativa, la Fundación logra más recursos para ayudar a personas sin hogar pero… ¿Cómo repercute en las personas sin hogar el hecho de involucrarse en una iniciativa de este tipo?
Arrels tiene tres ámbitos de actuación: la atención a las personas, la sensibilización y la incidencia política. En este sentido, HomelessFonts es una herramienta de sensibilización muy potente. Esta sensibilización repercute en la entidad y, por tanto, también en las personas que están vinculadas y atendidas por Arrels.
Muchas personas que están atendidas por Arrels participan en muchos espacios de Arrels, por ejemplo, impartiendo charlas en escuelas, en tareas de mantenimiento, etc. Incluso dos personas forman parte del equipo directivo de la Fundación. En este sentido, HomelessFonts es una manera más de participar en la entidad.
‘Homelessfonts’ ha contado con la colaboración del FAD y de Mazda para darse a conocer dentro del ciclo Xarxes d’Opinió con Mazda Rebels. ¿Cómo es de importante que las empresas se involucren en acciones sociales?
Es fundamental. La entidades sociales solucionamos problemas concretos de la personas pero hace falta que todos los agentes participen y se relaciones con entidades que trabajan para erradicar la pobreza para que cada vez más colaboren para poner fin al origen de las desigualdades.
¿Cuál crees que es el papel de la RSC en la relación empresa y tercer sector?
El papel de la RSC debe ser orientado a dar pasos para poner fin a la pobreza y a las desigualdades. Para ello es necesario que el tercer sector explique que el principal problema es la vulneración de derechos y que las personas no tienen dificultades sociales porque quieren sino porque no han podido evitarlo. Es una obligación de todos solucionarlo.
¿Cómo debe ser la relación entre empresas y fundaciones, ong, etc?
Ha de ser una relación de tú a tú y, sobretodo, una relación orientada a sumar para avanzar en poner fin a las desigualdades. Hay quién cree que la RSC es una herramienta económica para hacer marketing pero la gran mayoría de veces no es así.
Una última pregunta… ¿cómo ha afectado la crisis a vuestra fundación? ¿Se ha incrementado el número de personas sin hogar que piden ayuda?
Des de un punto de vista económico el 2014 ha sido un año muy duro y no hemos podido dar solución a todas las personas que nos lo pedían. Este año podremos avanzar más.
Por otro lado, desde Arrels atendemos a las personas que llevan más tiempo en la calle y, por tanto, muchas de ellas hace 10 o más que viven en esta situación. Ya estaban en la calle antes de la crisis. Todo apunta a que hay más personas sin techo que antes pero uno de los problemas es la falta de información que hay en este sentido.