Lo primero que nos viene a la mente cuando hablamos de sostenibilidad es la preservación del medio ambiente. La palabra innovación, por su parte, nos remite a avances tecnológicos, digitalización o creatividad. Así, cuando hablamos de innovación sostenible, lo más probable es que pensemos en un avance tecnológico que cuida del medio ambiente. ¿O no?
La sostenibilidad, en su sentido más amplio, es el resultado de una estrategia que nos posibilita llevar a cabo nuestra labor en el presente y nos permitirá seguir haciéndolo en el futuro. Incluye tanto el ámbito medioambiental, como el social y el económico, porque la sostenibilidad debe ser, ante todo, sostenible en el tiempo. Bajo esta premisa, no puede haber sostenibilidad sin innovación.
En Alstom, la innovación es un proceso que surge desde toda la organización, con diferentes herramientas, canales y estructuras que invitan a todos los empleados a proponer ideas, impulsar iniciativas y aplicar nuevas tecnologías.
Además, desde hace 16 años el grupo celebra y reconoce las mejores ideas con un concurso interno de innovación, I Nove You, en el que se premian las iniciativas y proyectos más exitosos. Uno de los últimos “oros” de este concurso, donde cada año se presentan cerca de 1.000 propuestas de todo el mundo, recayó sobre los equipos españoles de nuestra fábrica de Barcelona, por su apuesta por la robotización y digitalización de las líneas de producción.
La innovación es uno de los pilares sobre los que se desarrolla nuestro plan estratégico, Alstom in Motion, que indica también cómo ésta debe enfocarse hacia las tres dimensiones de la sostenibilidad: social, económica y medioambiental.
Cuando hablamos del ámbito social estamos poniendo el foco en los pasajeros: ¿Están nuestros trenes adaptados a las necesidades de todos los usuarios? ¿Son inclusivos y accesibles? ¿Son seguros? ¿Respetan la salud y el confort de las personas?
Con la innovación, buscamos desarrollar soluciones de movilidad que todas las personas puedan disfrutar. Tenemos un compromiso de “Diseño Universal” y para ello, trabajamos también con colaboradores externos, como la Fundación ONCE, que nos ayudan en el proceso de desarrollo de nuestros trenes. Este es el caso, por ejemplo, de los nuevos trenes para el Metro de Barcelona o los de cercanías que estamos desarrollando para Renfe.
Igualmente importante es impulsar una movilidad sencilla y eficiente en la operación, para que sea rentable y atractiva desde el punto de vista económico. La digitalización abre un sinfín de posibilidades para aumentar la fiabilidad y eficiencia de los operadores con iniciativas, como la que estamos desarrollando en Alstom España, para aplicar tecnologías big data y gemelos digitales en las tareas de mantenimiento, incrementando, significativamente, la disponibilidad y confort de las diferentes flotas.
La automatización de las operaciones, para aumentar la frecuencia entre trenes, o la formación de maquinistas a través de sistemas de realidad virtual, son otras de las iniciativas que llevamos años implementado para conseguir una movilidad cada vez más inteligente.
Inteligentes y sostenibles. Estos son los atributos que identifican a las soluciones desarrolladas por Alstom.
Porque si bien el tren es el sistema de transporte colectivo más sostenible, aún podemos seguir avanzando en su compromiso medioambiental, con soluciones libre de emisiones (como las baterías o el hidrógeno) para líneas sin electrificar (y que, por lo tanto, siguen utilizando trenes con propulsión diésel), mejoras en la eficiencia energética o la implementación de una estrategia de ecodiseño en todos nuestros trenes.
Pero la innovación sostenible no se limita a la tecnología de nuestros productos. También se trata de cómo diseñamos y fabricamos esos productos. La innovación sostenible también está presente nuestras fábricas (Innovation to deliver) y centros de trabajo, aplicando nuevos materiales en nuestros productos, incorporando cobots que mejoren la ergonomía de los puestos de trabajos, utilizando la fabricación aditiva en piezas y utillajes, o proponiendo sistemas de eficiencia energética en todos nuestros procesos.
Como afirmó el físico estadounidense William Pollard: “La arrogancia del éxito es pensar que lo que hiciste ayer será suficiente mañana”. Innovar, de forma sostenible, nos permite responder a los desafíos ambientales y cuidar de las personas, impulsar el crecimiento económico, mejorar nuestra competitividad y aportar valor a la sociedad. Innovar, por lo tanto, va más allá de la estrategia: Es nuestra razón de ser.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Innovación Sostenible.