Rafael Fernández-Álava, Director de Comunicación y Relaciones Externas de Costa Cruceros para España y Portugal, ha compartido con Corresponsables los compromisos y avances de la compañía en materia de sostenibilidad y responsabilidad social, así como el papel pionero de Costa Cruceros en la promoción de prácticas más ecológicas dentro del sector turístico.
¿Cuáles son los pilares de sus políticas ESG?
Voy a hablar tanto de Costa como de Carnival Corporation, que es la compañía a la que pertenecemos, la mayor compañía de cruceros del mundo. Tenemos 98 barcos, cotizamos en Londres y en Nueva York. Y engloba nueve marcas, una de ellas es Costa.
Uno de los pilares de nuestras políticas ESG es la acción por el clima. Nos enfocamos en reducir emisiones, alineándonos con los ODS 7 y 13. Estamos probando combustibles alternativos y mejorando la eficiencia energética. Tenemos un departamento de descarbonización global y colaboramos con universidades y socios tecnológicos para avanzar en esta área.
El segundo pilar es el turismo sostenible. Aplicamos el ODS 11, ayudando a preservar la cultura, historia y recursos naturales de las comunidades donde operamos. El tercer área es el de diversidad, igualdad e inclusión con los ODS 10 y 5 para crear un ambiente laboral inclusivo y equitativo, un espacio de trabajo que sea alentador con las personas, e inclusivo para alcanzar la igualdad de oportunidades en la trayectoria profesional.
Apoyamos la salud física y mental de nuestros 120.000 empleados, asegurando conectividad y equilibrio entre vida laboral y personal, especialmente para los más de 90.000 empleados a bordo, siguiendo el ODS 3. Por último, en cuanto a economía circular, que son los ODS 12, 14 y 15, trabajamos para convertir residuos en recursos, colaborando con proveedores.
¿Costa Cruceros fue la primera compañía de cruceros en implementar una agenda de sostenibilidad alineada con los ODS de la ONU, cómo evalúan los resultados alcanzados desde 2015 hasta ahora?
Hemos logrado avances significativos desde 2015. A la par con la publicación de la Agenda 2030, comenzamos la construcción del primer barco de gas natural del mundo, un gran reto tecnológico porque en esa época había gas natural como sistema de propulsión, estaba probado ya en coches, empezaba a serlo en autobuses o vehículos de un poco más de tamaño, pero no para barcos.
Hemos reducido un 10% las emisiones de gases de efecto invernadero desde 2011, a pesar de un incremento del 30% en capacidad en 2023. Adelantamos en 7 años nuestro objetivo de flota enchufable, aunque la infraestructura portuaria aún es limitada. Operamos 9 barcos de gas natural con 4 más en construcción y el 93% de nuestra flota tiene sistemas avanzados de calidad del aire. Estamos pilotando el uso de biocombustibles y nuestra meta es cero emisiones netas para 2050. El 64% de nuestra flota es enchufable, pero necesitamos más puertos con esta capacidad. Nuestro objetivo es el 100% para 2050.
Hemos eliminado 500 millones de unidades de plástico de un solo un solo uso. Hemos reducido un 38% el desperdicio alimentario por persona. La aspiración 2050 es enviar el 100% de cualquier residuo a especialistas y convertirlos en energía, y asegurar el 100% de reutilización de materiales de embalaje.
Avanzamos en prácticas de economía circular, con biodigestores y deshidratadoras para gestionar residuos. El 90% del agua potable en nuestros barcos se produce a bordo y hemos reducido el consumo de combustible en un 5% gracias a innovaciones como la lubricación por aire.
Tenemos 92.000 empleados a bordo de más de 150 nacionalidades distintas. Celebramos todas las festividades locales de nuestras tripulaciones, renovamos acuerdos con organizaciones inclusivas, como la International LGBTQ+ Travel Association, y lanzamos programas para apoyar la carrera de mujeres oficiales a bordo, a través de la Women Officer Network. Hemos sido reconocidos por Forbes como uno de los mejores empleadores del mundo y recibimos la máxima puntuación del Human Rights Council por nuestras prácticas de derechos humanos.
Su compañía ha implementado innovaciones tecnológicas pioneras para reducir emisiones y optimizar el consumo de energía ¿Cuáles son las más relevantes?
Una de nuestras innovaciones más destacadas es el sistema de lubricación por aire, donde se instalan inyectores bajo el casco del crucero que liberan burbujas de aire a presión. Esto permite que el barco “ruede” sobre estas burbujas en lugar de forzar su paso a través del agua, logrando una reducción del 5% en el consumo de combustible, lo cual es significativo considerando nuestra flota de 98 barcos. Actualmente, este sistema está instalado en 9 barcos, con otros 3 en proceso. Además, la inteligencia artificial juega un papel crucial al analizar Big Data para interpretar fenómenos meteorológicos, variaciones y otros datos históricos, optimizando así el consumo energético. También empleamos el sistema LR One Ocean, que nos proporciona información en tiempo real sobre cualquier cambio en la regulación medioambiental, permitiéndonos adaptarnos de inmediato a nuevas leyes, como las que afectan la velocidad de navegación en estrechos específicos, lo cual es esencial para nuestra sostenibilidad.
Colaboran con ONGs locales en proyectos para la protección de la biodiversidad ¿Cuáles son los más destacados?
A gran escala, participamos en Ocean 100 Dialogues, una iniciativa respaldada por el Foro Económico Mundial, enfocada exclusivamente en el cambio climático y la observación de la biodiversidad. Aquí, junto a líderes de la economía azul y organizaciones que implementan estas iniciativas, compartimos conocimientos y desarrollamos proyectos basados en la ciencia para un uso más sostenible y equitativo de los océanos. Entre las grandes multinacionales involucradas están Ørsted, TotalEnergies, Carnival Corporation y Neptune Energy.
En términos más locales, por ejemplo, en Barcelona, hemos sido patrocinadores durante cinco años de un concurso de startups de economía azul, donde cada año se apoyan varios proyectos que contribuyen a la preservación de la biodiversidad. En Italia, desde 2017, llevamos adelante el proyecto “Guardiani della Costa” en colaboración con ONGs locales y el Ministerio del Medio Ambiente. Este proyecto convierte a estudiantes y profesores de escuelas e institutos en “centinelas del medio ambiente”. Cada institución adopta un kilómetro de costa, donde se encargan de su mantenimiento y vigilancia. Utilizando tecnología como iPads o móviles, registran el estado de su área, documentando especies, contaminación y cambios a lo largo del tiempo. Este monitoreo visual y práctico motiva a los participantes al ver cómo sus esfuerzos mejoran el ecosistema costero año tras año.
¿Cómo seleccionan estos proyectos y qué beneficios específicos han observado en las comunidades y ecosistemas locales?
Seleccionamos proyectos basándonos en su capacidad para alcanzar al mayor número de personas posible. Por ejemplo, con “Guardiani de la Costa“, necesitamos ONGs fuertes que actúen como nuestros representantes en la comunidad educativa, el apoyo de ministerios o entidades regionales para que el impacto sea significativo. En el caso de “Guardiani de la Costa”, hemos involucrado a 3.097 escuelas, 88.000 estudiantes y 6.182 profesores, adoptando casi 3.000 kilómetros de litoral.
Otro criterio es la preservación de tradiciones, como con “Tradiciones del Futuro”. Este proyecto busca mantener en vida oficios artesanales a riesgo de desaparecer, ya sea por falta de interés generacional o por baja demanda. En cinco ciudades de España – Barcelona, Valencia, Ibiza, Menorca y Málaga – hemos identificado jóvenes interesados en estas artes, formándolos durante seis meses, con un énfasis en el comercio electrónico para asegurar la viabilidad de estos oficios en la era digital.
Un proyecto que destaca por su innovación es el apoyo a Ángel León, “el chef del mar”, quien trabaja en el cultivo a escala industrial de zostera marina, una alga que podría ser una solución sostenible para problemas de alimentación en comunidades costeras. Esta iniciativa no requiere fertilizantes ni irrigación, solo suelo marino poco profundo y agua salada, ofreciendo una fuente de proteína sostenible y accesible.
Por último, en Aqaba, Jordania, hemos logrado cultivar 3 hectáreas de desierto usando agua desalinizada y energía solar, produciendo 147 toneladas de vegetales que benefician a la comunidad local, con 1.262 kilos ya embarcados en nuestros cruceros que hacen escala allí.
Los beneficios observados incluyen una mayor concienciación y participación comunitaria en la protección del medio ambiente, la preservación de la cultura y tradiciones locales, la innovación en prácticas sostenibles de alimentación y agricultura, y el impulso económico a comunidades mediante nuevas oportunidades laborales y de mercado.
Su programa de redistribución alimentaria ha beneficiado a comunidades en riesgo de exclusión en diferentes puertos ¿En qué consiste y cómo se aseguran de que estas iniciativas tengan un impacto duradero?
Nuestro programa se llama “For Good Food”, y parte de nuestra estrategia para reducir el desperdicio alimentario en un 38%. En esencia, educamos a nuestros pasajeros para que consuman de manera responsable, especialmente en los buffets, con el lema “Taste, don´t waste”; – “Prueba, pero no desperdicies”. Sin embargo, hay situaciones inevitables, como cuando 200 personas deciden no cenar, lo que resulta en excedentes, por ejemplo, 200 solomillos. Estos alimentos, una vez que se confirma que no serán consumidos, se envasan en contenedores especiales, se toman muestras para garantizar la seguridad alimentaria, se refrigera a 4 grados y se distribuyen al día siguiente a través de bancos de alimentos.
Este proyecto comenzó en Barcelona en 2018 y se ha extendido a otros 8 puertos en el Mediterráneo, Italia y Francia, así como en el Caribe en Guadalupe y Martinica. Desde mayo de 2024, también lo implementamos en Valencia y Palma de Mallorca, sumando 16 puertos en total, donde hemos distribuido más de 300.000 comidas.
Para asegurar un impacto duradero, seleccionamos puertos donde nuestros barcos tienen una frecuencia regular de visitas, lo que nos permite mantener una provisión constante de alimentos. Además, trabajamos con organizaciones como los bancos de alimentos que tienen la capacidad y organización para gestionar estos recursos eficientemente. Hablamos con líderes de estos bancos, como los de Barcelona y Palma de Mallorca, para entender sus necesidades y capacidades. Ellos nos han indicado que tienen la infraestructura para aumentar significativamente la distribución de alimentos, lo que nos lleva a un compromiso mayor con la colaboración intersectorial, animando a otras compañías y actores locales a participar.
El impacto duradero también está ligado a la creciente necesidad de las comunidades, donde no solo es cuestión de comida, sino también de otros recursos básicos como la electricidad, lo que refuerza la importancia de estos programas en el contexto actual de vulnerabilidad social.
¿Cuáles son los planes de futuro de Costa Cruceros en materia ESG?
En cuanto a las áreas de enfoque que he mencionado, tenemos objetivos anuales hasta el 2030 y aspiraciones para el 2050. En el caso de la acción climática, la meta de Costa y Carnival Corporation es alcanzar emisiones netas cero en el 100% de la flota y tener el 100% de la flota completamente enchufable. Para la economía circular, seguiremos trabajando para que en 2050 podamos reutilizar el 100% de los materiales de embalaje y enviar el 100% del residuo alimentario a compañías que lo conviertan en energía, siguiendo el principio de “waste to energy”, que es fundamental para la economía circular.
En turismo sostenible, nuestro objetivo es seguir siendo líderes en turismo global sostenible. Para la conservación de la biodiversidad, aspiramos a que el 100% de los programas de compra de pescado y marisco provengan de compañías sostenibles y a aumentar el suministro de proveedores locales.
En diversidad, equidad e inclusión, nuestro objetivo es que estas prácticas sean tan naturales que no necesiten medirse, pero hasta entonces, aspiramos a seguir siendo uno de los mejores empleadores del mundo, a mantener el 100% de puntuación del Human Rights Council y a continuar con iniciativas como “Women Officer Network” para apoyar la carrera de mujeres oficiales a bordo. Con todas estas buenas prácticas y retos por delante, quiero agradecer la oportunidad de compartir nuestra visión sobre la responsabilidad social, y también hacer un llamamiento para utilizar la capacidad extra de los Bancos de Alimentos Españoles.
