En un mundo donde la transición hacia una economía más sostenible es clave, como empresas, debemos concienciar y movilizar hacia una transición justa e inclusiva hacia las energías limpias, en pro de las personas y del planeta. Así, en línea con nuestro compromiso con la sostenibilidad, en Urbaser nos hemos convertido en un referente en el sector de la gestión de residuos, gracias a nuestra apuesta por la eficiencia energética y la innovación tecnológica.
La compañía ha implementado una serie de proyectos que optimizan el consumo de energía en sus instalaciones, contribuyendo así a mejorar la sostenibilidad operativa y a reducir su huella de carbono. Uno de los ejemplos más relevantes de nuestra apuesta por la eficiencia energética es la planta de tratamiento de residuos sólidos urbanos (RSU) de Algimia de Alfara, ubicada en la Comunidad Valenciana. Esta planta fue reconocida como la más eficiente de la región en 2023, gracias a la implementación de tecnologías avanzadas que permiten una optimización significativa del consumo energético. La instalación cuenta con sistemas de recuperación de energía y procesos automatizados que maximizan el aprovechamiento de los recursos, reduciendo así el consumo de electricidad y otros insumos energéticos.
Además, estamos desarrollando una estrategia integral de autosuficiencia energética en nuestras instalaciones mediante la incorporación de fuentes de energía renovables. Un ejemplo reciente de ello es el proyecto denominado Instalación Fotovoltaica de Autoconsumo de 1,6 MW y Eficiencia Energética en el Complejo Ambiental de Tenerife, subvencionado por el Gobierno de Canarias, cuyo objetivo es fomentar la descarbonización industrial y el uso de energía limpia en las plantas de tratamiento de residuos de la región. Esta iniciativa permitirá a Urbaser generar parte de la energía que consume, lo que no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también contribuye a la reducción de emisiones.
Innovación al servicio de la energía limpia
Otro de los pilares de la estrategia de Urbaser es la innovación. A través de la investigación y el desarrollo, la empresa ha logrado introducir tecnologías que permiten convertir residuos en energía limpia, fomentando la economía circular y disminuyendo la dependencia de los combustibles fósiles. Este enfoque contribuye a cerrar el ciclo de los residuos, transformando lo que antes era desecho en una fuente de energía renovable.
Entre las iniciativas más destacadas se encuentra el aprovechamiento del biogás generado en los vertederos controlados. En nuestras instalaciones hemos implementado sistemas de captación de biogás que permiten transformar los gases generados por la descomposición de los residuos en energía eléctrica. Este proceso no solo contribuye a reducir la emisión de gases, sino que también supone una fuente de energía renovable que se reintegra a la red, mejorando la sostenibilidad de las operaciones y evitando emisiones de gases de efecto invernadero
En concreto, las instalaciones de captación y tratamiento de biogás han sido clave para reducir el impacto ambiental de los vertederos. Gracias a estas tecnologías, se evita la liberación de metano, un gas con un efecto invernadero mucho más potente que el dióxido de carbono. El biogás captado se somete a un proceso de depuración y posteriormente se emplea para la generación de electricidad, logrando así un doble beneficio: reducir las emisiones y aprovechar energéticamente los residuos.
Se trata de un esfuerzo compartido. Nuestro compromiso con la eficiencia energética ha sido respaldado por diferentes administraciones públicas. Recientemente, el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITERD) ha concedido a la compañía una ayuda de 1,79 millones de euros para impulsar la economía circular en nuestra planta de tratamiento de residuos de Alfaro (La Rioja). Este apoyo financiero nos permite implementar nuevas tecnologías orientadas a mejorar la eficiencia energética, reducir las emisiones y a optimizar el aprovechamiento de los recursos.
Estas ayudas no solo facilitan la incorporación de tecnologías más eficientes, sino que también fomentan la creación de empleo verde y el desarrollo de un tejido industrial sostenible.
Hacia una gestión energética sostenible
La estrategia de la compañía para mejorar la eficiencia energética y fomentar la autosuficiencia en nuestras plantas de tratamiento de residuos es un claro ejemplo de cómo la industria puede contribuir a la transición energética global. A través de la innovación y el aprovechamiento de los recursos, no solo reducimos nuestro impacto ambiental, sino que también generamos valor añadido al transformar los residuos en nuevas fuentes de energía contribuyendo a la descarbonización del planeta.
Con proyectos pioneros como los mencionados y el impulso recibido de administraciones públicas, desde Urbaser continuamos avanzando hacia un modelo de gestión más eficiente y sostenible. La compañía demuestra así, hoy, Día Internacional de la Energía Limpia, y siempre, que la colaboración entre el sector público y privado es clave para afrontar los retos energéticos del futuro y que la innovación puede ser el motor que impulse una economía circular real y efectiva.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Internacional de la Energía Limpia