En la encrucijada entre la crisis climática y el surgimiento de un nuevo orden digital con el potencial para expandir el conocimiento a través de la tecnología, ‘Ecos del océano’ presenta un conjunto de instalaciones en las que conviven y se entrelazan el arte experiencial, la ecología marina y las fronteras de la bioacústica para proponer una experiencia en torno a la sostenibilidad de los ecosistemas marinos y destacar la mportancia vital que tiene el sonido para los habitantes del mar. El espacio expositivo se convierte en un enorme dispositivo de escucha que nos invita a establecer una conexión con otros habitantes del planeta a través de la emoción y la empatía.
La exposición Ecos del océano, comisariada por José Luis de Vicente, establece un diálogo creativo entre el colectivo artístico Marshmallow Laser Feast, y científicos, investigadores y expertos de diferentes campos, como el Laboratorio de Aplicaciones Bioacústicas de la Universitat Politècnica de Catalunya, el escritor y cineasta de historia natural Tom Mustill, artesanos del vidrio y especialistas en acústica.
Ecología acústica
Hoy sabemos que el sonido cumple un papel fundamental en las relaciones entre las distintas formas de vida marina. En los últimos 20 años, la ecología acústica está viviendo una revolución gracias a la irrupción de herramientas digitales, de los drones y la fotografía por satélite a las redes de micrófonos submarinos y la inteligencia artificial. Como resultado de estas investigaciones, hoy somos conscientes de la amenaza que la actuación humana supone para estas especies generando grandes cantidades de ruido que interfieren en su vida.
La primera de las instalaciones sonoras de Marshmallow Laser Feast Meditation Room es la antesala que prepara al visitante para la experiencia multisensorial en la que se sumergirá a lo largo de la muestra. Guiados por los sonidos y las vibraciones de delfines mulares, ballenas jorobadas, cachalotes y ballenas grises, los espectadores son conducidos por una suerte de meditación que les invita a sintonizar su conciencia y su respiración con los ritmos de estos seres oceánicos, para dejar crecer una sensación de existencia compartida.
Después de esta inmersión inicial, el visitante se adentra en la pieza central de la muestra Seeing Echoes in the Mind of the Whale (Viendo ecos en la mente de la ballena), una instalación audiovisual envolvente formada por doce pantallas en coproducción con el Museu del Disseny de Barcelona. Creada por Marshmallow Laser Feast, la pieza explora la manera en la que las especies marinas perciben la realidad a través de sus sentidos. La instalación coral muestra el movimiento progresivo de los cetáceos desde la superficie hasta las profundidades del océano y, para ello, integra imágenes generadas por inteligencia artificial y grabaciones sonoras reales de especies marinas recogidas en distintos puntos del planeta. Algunos de estos sonidos proceden de las grabaciones del Laboratorio de Aplicaciones Bioacústicas de la Universitat Politècnica de Catalunya, liderado desde hace 20 años por el biólogo marino Michel André, una entidad que estudia la contaminación acústica de los océanos y el impacto sobre las especies que los habitan, entre ellas, ballenas, cachalotes y otros cetáceos. En la pieza también han colaborado otros científicos e investigadores, entre ellos, el escritor y cineasta de historia natural Tom Mustill.
La tercera obra de nueva creación de Marshmallow Laser Feast, Templo de plancton, complementa sensorialmente las dos piezas anteriores. Esta instalación escultórica, sonora y lumínica recrea la migración vertical de la infinidad de diminutos organismos que componen el plancton. Doscientas piezas de vidrio soplado que evocan sus rítmicos viajes desde las profundidades a la superficie del océano, sustentando la vida marina y generando la mitad del oxígeno de la atmósfera terrestre.
La experiencia inmersiva de estas tres instalaciones se completa con dos salas en las que se muestran una selección de materiales procedentes de las investigaciones científicas en torno al estudio de estas especies marinas. En la primera de ellas, La ciencia de escuchar, el visitante conocerá las herramientas que usa el Laboratorio de Aplicaciones Bioacústicas de la Universitat Politècnica de Catalunya para captar los sonidos que se generan bajo el agua. Junto a dos boyas-hidrófono, grandes micrófonos submarinos distribuidos por los océanos de todo el planeta diseñados para escuchar y analizar los sonidos submarinos, se presentan seis estaciones donde el visitante podrá acceder a grabaciones reales de focas barbudas, ballenas jorobadas, delfines y cachalotes.
A modo de epílogo, la última sala de la exposición, Historias del sonido profundo, recopila el conocimiento y la historia de la bioacústica. Los intereses militares geoestratégicos de la Guerra Fría marcan el inicio de las grabaciones bajo el agua, que enseguida se topan con las interferencias de las voces de los cetáceos, y que permiten descubrir un mundo de sonidos cuyos datos se abren pronto a oceanógrafos y científicos. Desde entonces, la tecnología ha jugado un papel crucial en el estudio del paisaje sonoro marino.
Proteger y preservar todas las especies
En el siglo XXI, los satélites, los drones y la inteligencia artificial, permiten observar los movimientos de las ballenas desde el espacio, registrar sus cantos bajo el agua, y trazar nuevas estrategias para proteger a estos cetáceos en un océano cada vez más ruidoso y contaminado. Todos estos descubrimientos y avances en torno al paisaje sonoro marino han tenido lugar en el preciso momento en que la acción humana ha empezado a degradarlo y amenazarlo a causa del ruido que arrojamos al océano y que afecta enormemente a la vida de los cetáceos. Los océanos son el soporte vital de nuestro planeta, constituyen el mayor ecosistema del mundo, albergan casi un millón de especies conocidas y presentan un enorme potencial científico por explorar.
Una cuestión que nos lleva a repensar nuestra responsabilidad con el medio ambiente y nos insta a proteger y preservar el equilibrio entre el ser humano y el resto de las especies que conviven en el planeta. Solo a través de la empatía y la coexistencia armónica con el entorno natural podremos asegurar un futuro sostenible para las generaciones venideras.
Actividades paralelas
La exposición Ecos del océano se completa con un programa de actividades paralelas para público escolar, familiar y general. Para información sobre visitas comentadas gratuitas consultar la web. Además, todas las exposiciones de Espacio Fundación Telefónica cuentan con una serie de recursos de apoyo a la visita: la guía de la exposición, que cuenta con una versión en lectura fácil, ambas disponibles para su descarga en la propia sala de exposiciones y aquí, así como la audioguía de la exposición, en español e inglés, accesible desde cualquier dispositivo móvil con conexión a internet.
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