Josefina Fernández, directora de Operaciones y consejera de Altia, ha charlado con Corresponsables sobre las políticas ESG de su compañía, su contribución a los ODS y la Agenda 2030, y la ayuda que la tecnología presta a la sostenibilidad de las organizaciones.
¿Qué labor desarrollan en Altia?
Altia es una empresa de servicios en el ámbito de las TIC, servicios avanzados de base tecnológica, consultoría, transformación digital, y desarrollo y mantenimiento de soluciones tecnológicas. Podríamos describirnos como una pieza intermedia entre los fabricantes de tecnología y la implantación de tecnología en las organizaciones.
Tratamos de buscar las mejores soluciones tecnológicas, implementarlas, adaptarlas o desarrollarlas, en el caso de que no existan, para resolver problemas o necesidades concretas de las distintas organizaciones. Prestamos servicios tanto en el sector público como en el sector privado. Tenemos un enfoque de principio a fin, nuestros servicios pueden ir desde la conceptualización de un proyecto, el diseño y desarrollo de este, la implantación, o el mantenimiento. Una vez que ya está implantado, podemos entrar en cualquiera de estas fases. Nuestra actividad abarca todo lo que tiene que ver con el desarrollo de software en distintas plataformas gestión de infraestructuras con el cloud, ciberseguridad, inteligencia artificial, analítica de datos… Prácticamente cubrimos todo el entorno posible de servicios dentro del ámbito de las TIC.
Empezamos esta singladura en el año 94, hace ya 29 años, cuando no había ni páginas web, ni correo electrónico, ni teléfonos móviles. Y digo empezamos porque yo me enamoré del proyecto Altia un 14 de febrero del año 94 y aquí seguimos, arrancamos cuatro personas y actualmente somos un equipo de más de 3200 profesionales en más de 20 localizaciones distintas de siete países diferentes. Contamos en nuestro portfolio con más de 900 clientes, tanto en el sector público como del sector privado. En ambos casos abarcamos prácticamente todos los ámbitos sanidad, educación, justicia en el sector público, retail, automoción, banca, seguros, turismo, industria en el sector privado. Por destacar un hecho relevante en la trayectoria de Altia, desde el año 2010 cotizamos en el BME Growth, lo que se llamaba antes el Mercado Alternativo Bursátil, que es el mercado para las empresas en expansión. Fuimos la primera empresa gallega en empezar a cotizar en este mercado, y la primera empresa también del MAB en repartir dividendos.
Nuestro modelo de negocio se basa en la proximidad y en el compromiso con nuestros clientes. Tenemos dos eslóganes de cabecera, que acuñamos desde nuestros inicios y son: “la buena compañía”, y “la innovación es el camino”. Y es que entendemos la innovación, junto con la orientación al cliente, como el centro de nuestra estrategia. Una buena empresa desde el punto de vista técnico, un buen lugar para trabajar, una empresa seria y, sobre todo, como nos gusta decir, una empresa con valores, una buena compañía.
¿Cuáles son las bases de sus políticas de RSE?
La cultura empresarial de Altia se caracteriza por mantener una comunicación abierta con todos nuestros grupos de interés. La total integración de las actividades de la compañía con las de nuestros clientes y respeto a la calidad, al medio ambiente, a la seguridad, y salud laboral de nuestros profesionales y colaboradores.
Trabajamos por la excelencia en materia de responsabilidad social corporativa, con especial atención en las personas y en las condiciones de trabajo. Es nuestro activo para la prestación de nuestros servicios. En Altia siempre hemos tenido una visión a largo plazo y nos mueve un propósito muy bien definido de crecer haciendo crecer. Y, además, tratamos de hacerlo de una forma sostenible y duradera, aportando en cada caso un valor corporativo y social para asegurar nuestro crecimiento a largo plazo. Esta visión es algo que venimos manteniendo desde el año 94, y esperamos seguir manteniendo 30 años más por lo menos.
Nuestra vocación de permanencia hace que busquemos un crecimiento sostenible de la compañía, respaldado por una solidez técnica y financiera. Son dos de nuestras premisas principales: apoyarnos en esa parte de respuesta técnica efectiva a nuestros clientes, y en ese respaldo financiero que nos permita seguir adelante con nuestros compromisos. Desde el año 94 hemos crecido y sumado al proyecto muchas personas, hemos incorporado nuevas inquietudes, nuevas necesidades, nuevos enfoques y perspectivas, y hemos variado el universo en el que impactamos de forma positiva con nuestra actividad. Pero el compromiso de nuestro modelo de crecimiento sostenible y los valores siguen siendo los mismos, aunque adaptados evidentemente a la realidad que nos toca vivir en este momento.
¿Qué acciones están llevando a cabo en materia de igualdad e inclusión?
Hemos aprobado este año nuestro segundo Plan de Igualdad, centrado en el apoyo a la igualdad de oportunidades y a la no discriminación. Nuestro compromiso con las personas se rige siempre por la premisa de que el talento y la preparación es lo único que se tiene en cuenta a la hora de marcar los criterios de selección y de promoción en la compañía.
Los tres objetivos fundamentales del Plan de Igualdad son: la igualdad de trato y oportunidades en todos los ámbitos, formando parte de nuestro modelo de gestión. La garantía de no discriminación, tanto directa como indirectamente, por razón de sexo en situaciones especiales como maternidad, paternidad, obligaciones familiares y condiciones laborales. Y la eliminación de cualquier manifestación de discriminación en todos los ámbitos, y en particular en los procesos de promoción interna y selección de talento, con el fin de garantizar una representación equilibrada de hombres y mujeres en la medida de lo posible. Porque en nuestro sector, el sector TIC, el número de mujeres sigue siendo mucho menor que el de hombres. Pero bueno, con esa restricción en la que también estamos trabajando para tratar de reducir esa esa deficiencia de talento femenino para incorporar.
Como medidas concretas, contamos con una bolsa de 40 horas de tiempo no recuperable para padres y madres con hijos de hasta 16 meses de edad. Horario continuado para padres y madres en situación de guarda legal. Horario flexible de entrada y salida para facilitar la conciliación. Medidas y permisos específicos para personas víctimas de violencia de género, en el caso que se detectara alguna situación de este tipo. Y programas de formación y sensibilización para responsables y mandos sobre igualdad, sesgos de género y prevención y tratamiento de situaciones de acoso que puedan producirse en la compañía.
¿Cómo colaboran con la difusión de los ODS y la Agenda 2030?
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son un compromiso de nuestra estrategia empresarial. Desde el año 2013 publicamos nuestras memorias de sostenibilidad, en las que compartimos los aspectos más relevantes en términos de sostenibilidad, nuestro compromiso con los clientes, y con la sociedad en general, presentando los datos y métricas para evidenciar nuestro compromiso con el cumplimiento de los ODS y la Agenda 2030.
En Altia creemos que las alianzas y colaboraciones pueden ampliar el impacto. Colaboramos con otras empresas, con el sector público y la sociedad civil, para trabajar juntos en proyectos y programas que traten de impulsar los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Estas alianzas nos permiten aprender de otros, compartir mejores prácticas, y maximizar nuestra influencia colectiva en el cumplimiento de estos objetivos. Creemos también que el poder de la innovación puede generar un impacto positivo enorme en la sociedad y en el medio ambiente y, por eso apoyamos la innovación como herramienta fundamental para abordar desafíos sostenibles y contribuir a la consecución de los ODS.
¿Cómo puede la tecnología ayudar en las políticas de sostenibilidad de las organizaciones?
La tecnología desempeña un papel crucial en las políticas de sostenibilidad de las organizaciones, ya que les permite encontrar soluciones inteligentes y eficientes para abordar los desafíos actuales y futuros. Además, está desempeñando un papel muy importante en la consecución de los de los ODS. Las nuevas tendencias tecnológicas están impulsando el progreso en áreas clave como la salud, la educación, la igualdad, la inclusión, la eficiencia energética, ciberseguridad o la protección de datos. En este sentido, creemos que son fundamentales las tecnologías innovadoras como la impresión 3D y 4D, el Internet de las cosas, el Big Data, los drones, la inteligencia artificial, el Blockchain, o la robótica, que permiten a las empresas aplicar estas tecnologías en las distintas áreas y contribuir a la sostenibilidad empresarial.
Además, el impulso de la investigación y la innovación tecnológica también generan beneficios económicos para las empresas, que es importante para que ese círculo se pueda seguir manteniendo. Evidentemente, la empresa necesita ser sostenible económicamente para que pueda contribuir, en mayor medida, a los ODS. Por eso, creemos que la tecnología proporciona herramientas y enfoques avanzados para abordar desafíos económicos, sociales y ambientales, y ayuda a las organizaciones a alcanzar sus objetivos de sostenibilidad.
¿Qué compromisos e iniciativas tienen en marcha dentro de su acción social?
Buscamos siempre generar un impacto positivo y sostenible en la sociedad, trabajando de la mano con diversas partes interesadas para abordar distintos desafíos sociales y contribuir al bienestar de las comunidades en las que operamos con nuestro trabajo.
Durante el año 2022 hemos liderado desde Altia más de 50 iniciativas relacionadas con el entorno social. Centramos nuestros compromisos y acciones en distintos ámbitos. En el ámbito de la sostenibilidad y medioambiente pusimos en marcha una iniciativa para dar una segunda vida a los equipos informáticos, que fueron sustituidos dentro del proceso de renovación tecnológica de los puestos de trabajo de Altia. La pandemia nos obligó a sustituir parte de los equipos de sobremesa por portátiles, para facilitar el teletrabajo de nuestra plantilla. Y surgió la iniciativa Punto-tech para la reutilización y la donación de este equipamiento informático, que no servía para desempeñar nuestro trabajo pero que eran equipos perfectamente utilizables. Logramos, por una parte, alargar la vida de los equipos informáticos y optimizar los recursos, abogando por la reutilización y sostenibilidad y, por otra, apoyar a distintas entidades sociales en los programas dirigidos a colectivos vulnerables para minimizar la brecha digital y acceso a la tecnología.
Cuando pusimos en marcha el proyecto Punto-tech quisimos llegar con esa donación a un mayor número de personas, pero esta iniciativa tiene no solamente un impacto social sino también ambiental, a través de la reducción de la generación de residuos y apoyo a la economía circular, reciclando y reutilizando los equipos que se desechan de nuestra actividad profesional. Hasta el momento hemos colaborado con la donación de más de 100 equipos, con 15 entidades de acción social de distintos de distintos ámbitos.
Otro de los ámbitos de acción de nuestras políticas sociales es el fomento de las vocaciones STEM y el uso de las de las TIC. Desde aquí organizamos distintas actividades y programas que buscan acercar las profesiones tecnológicas a los más jóvenes. Como he comentado, necesitamos más vocaciones digitales y más mujeres también que vengan con esas vocaciones digitales. En esta línea, además de contar con iniciativas propias, colaboramos con otros organismos públicos, con universidades y centros de formación profesional en distintas acciones dirigidas a eliminar la brecha digital, reforzando las competencias digitales de la juventud, impulsando las vocaciones y el talento tecnológico.
Uno de los programas destacados que hemos implantado es GenTech, un programa de sesiones digitales que busca fomentar el atractivo vocacional de las carreras STEM en las primeras etapas escolares. Está dirigido a los institutos y centros escolares, primero y segundo de bachillerato, incluso, en algunos casos, a alumnos de ESO. Es un espacio para la conversación en el que nuestros profesionales exponen en primera persona su experiencia desde una perspectiva real, práctica, e inspiradora, con el objetivo de despertar el gen tecnológico en esos jóvenes. Otra iniciativa importante que ya lleva muchos años implantada es un programa compuesto por una serie de workshops con los que queremos hacer llegar nuestros conocimientos de tecnologías avanzadas a futuros profesionales del sector, con el objetivo de potenciar el talento y completar su formación en tecnologías novedosas, con las que estamos trabajando en proyectos reales. Está dirigido a estudiantes universitarios, escuelas técnicas y centros de formación profesional para facilitar la incorporación de estos jóvenes al mercado laboral.
Otra iniciativa que destaca en esta línea es Altia Premia, un galardón enmarcado dentro de un convenio de colaboración con la Universidad de Santiago de Compostela que otorga un premio de 1.500 € a un trabajo fin de grado de la Escuela de Ingeniería Informática de la Universidad. Su objetivo es estimular la formación de los titulados, y recompensar el talento y el esfuerzo, para animarlos a que sigan contribuyendo en esa línea, y se vengan a trabajar al entorno profesional.
Una cuarta iniciativa es el FP Dual que tenemos implantado con un Centro de Formación Profesional, y al que este año vamos a incorporar un nuevo centro. Es una iniciativa que supone una aproximación importante del mundo de la empresa a la formación profesional para mejorar el talento tecnológico y formar a los profesionales en contenidos actualizados y ajustados a las necesidades reales de las empresas. Acelera la incorporación a los proyectos y la formación de los nuevos titulados. Los estudiantes compaginan su formación en el centro con estancias en la empresa.
También contamos con campañas de sensibilización para la eliminación de la desigualdad de género y fomento de vocaciones STEM entre las niñas y las jóvenes. Tratamos de dar visibilidad a nuestras profesionales, con el objetivo de acercar referentes y eliminar los sesgos de género que siguen estando presentes en la profesión y en el sector. Intentamos poner nuestro granito de arena con nuestras profesionales que, aunque no es un porcentaje muy elevado, porque no podemos incorporar más, tratamos de poner ese ese germen para establecer y acercar referentes, y eliminar esos sesgos del sector.
También fomentamos actividades en el ámbito social relacionadas con la promoción de la salud y el y el deporte, para fomentar la participación de nuestros empleados en actividades deportivas y hábitos saludables. Apoyando también, en la medida de lo posible, distintas causas sociales, como las carreras solidarias.