La Fundación A LA PAR, que este año se encuentra inmersa en la celebración de su 75 aniversario, acaba de poner en marcha un proyecto totalmente pionero en España. Se trata de ‘Madres Capaces’, un programa destinado a madres con discapacidad intelectual e hijos menores a su cargo en riesgo de exclusión social. Entre otras iniciativas A LA PAR ha habilitado para ellas una amplia vivienda comunitaria en el norte de la región, con más de 200 m2 y espacios colectivos, pero también individuales, que permitirá a las usuarias vivir con comodidad y dignidad.
Pero, más allá de resolver sus necesidades habitacionales, “Madres Capaces·” es, sobre todo, un programa en el que, durante un máximo de dos años, se trabajará de manera integral con esas mujeres en la crianza de sus hijos a la vez que les brindará apoyo psicológico y se les ayudará en la búsqueda de empleo, ya que la mayoría tiene un complejo historial personal, con episodios de violencia de género en ciertos casos. El objetivo es que no tengan problemas para ejercer una maternidad responsable y que puedan tener una vida plena e independiente. En cualquier caso, una vez que abandonen el programa, A LA PAR continuará ofreciéndoles apoyo en las áreas que necesiten.
Grupo especialmente vulnerable
‘Madres Capaces’, que lidera el departamento de Vida Independiente de la Fundación, ha surgido como una respuesta a situaciones que A LA PAR se ha ido encontrando en su día a día. Como explica Myriam Becerril, Directora del Área de Apoyo Psicosocial, «llevábamos años atendiendo a personas con discapacidad intelectual que vivían de manera independiente. Nosotros nos vamos adaptando a las realidades que nos encontramos y vimos un grupo especialmente vulnerable, que son las madres con discapacidad. Comenzamos yendo a sus casas, organizábamos talleres y dábamos apoyo en la crianza de sus hijos. Pero nos hemos ido enfrentando a casos muy duros, de madres absolutamente solas, con mochilas muy pesadas, y en los que el riesgo de que se les arrebatase a sus hijos era inminente, principalmente por la falta de apoyos y recursos. No podíamos quedarnos de brazos cruzados, así que, después de mucho trabajo, hemos podido arrancar esta iniciativa insólita y maravillosa».
Madres Capaces está sostenido casi en exclusiva por A LA PAR –solo una pequeña parte se financia con los fondos Next Generation EU. Actualmente, el proyecto atiende, de manera global, a doce madres y quince niños, todos menores de 8 años, aunque solo cuatro madres y cinco pequeños viven en este hogar. A su lado, brindándoles constante apoyo, hay una coordinadora, una psicóloga —las usuarias arrastran años de maltrato y dificultades—, una educadora —que cada tarde, durante cuatro horas, trabaja intensamente con estas familias— y una preparadora laboral, que dotará a estas mujeres de todos los recursos para que puedan conseguir un empleo que les ofrezca independencia y estabilidad. La Fundación cuenta con una impresionante experiencia en este ámbito, pero “Madres Capaces” también funciona como una red que establece lazos con todos los agentes implicados.
Como explica Becerril, «Queremos construir lazos con la comunidad y con aquellos que nos rodean, porque la sociedad debe trabajar en conjunto para que estas mujeres y sus niños salgan adelante. Trabajamos con casas de mujeres, servicios sociales y centros de atención a la infancia. La respuesta está siendo de diez y sabemos que el boca a boca va a ayudarnos mucho». Como el proyecto acaba de arrancar, los menores siguen escolarizados en sus respectivos centros. La idea es que en septiembre empiecen en un colegio cercano, algo que facilitará el día a día de los trabajadores y, sobre todo, de estas familias.
Almudena Martorell, Presidenta de Fundación A LA PAR, está particularmente orgullosa de esta iniciativa. «La maternidad y la paternidad de las personas con discapacidad intelectual es un tabú, pero también una realidad. Tienen derecho a tener familia, y son capaces de desempeñar este rol satisfactoriamente con los apoyos necesarios. En A LA PAR cambiamos vidas, y trabajar con estas mujeres y con sus hijos nos llena de esperanza. La maternidad va más allá de lo cognitivo: el amor y el afecto son la clave. En el resto de aspectos, estaremos ahí para tenderles la mano. Y ahora, con “Madres Capaces”, podemos llegar a un colectivo que carece de la red cotidiana».
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