Redeia, operador global de infraestructuras esenciales, ha realizado una emisión de bonos verdes de 500 millones de euros a un plazo de 10 años con un tipo del 3,07%, según el comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Es la cuarta ocasión en la que la compañía apuesta por este instrumento de financiación verde, un ámbito en el que es referente desde 2017.
Gran interés de los inversores
Los fondos obtenidos en esta operación -que se desarrolla en un contexto de condiciones de mercado favorables- permitirán a Redeia seguir avanzando en su plan estratégico y, en concreto, materializar las inversiones previstas para hacer posible la transición ecológica en España a través del desarrollo de la red de transporte. En este sentido, Red Eléctrica -filial y TSO español – avanza a buen ritmo en la ejecución de la Planificación eléctrica vigente, con puestas en servicio estratégicas en 2023 como la del enlace entre Ibiza y Formentera, seis meses antes de lo previsto.
Al igual que en anteriores emisiones, se ha registrado una alta demanda que refleja el gran interés de los inversores, superando 1.700 millones de euros. Para Emilio Cerezo, Director Corporativo Económico-Financiero de Redeia, esta buena acogida “demuestra que la comunidad inversora está plenamente comprometida con el proceso de descarbonización de la economía y está asumiendo su rol clave en el desarrollo sostenible”.
En esta operación, en la que se ha contado como inversor con el apoyo destacado del Banco Europeo de Inversiones, han participado Barclays, BBVA, BNP Paribas, CaixaBank, Citi, ING, Mediobanca y Santander.
Financiación sostenible
La compañía es un referente en financiación sostenible desde hace años. En 2017, se convirtió en la primera empresa del sector de las utilities en transformar su crédito sindicado de 800 millones de euros en una financiación sostenible al añadir al tipo de interés criterios ambientales, sociales y de buen gobierno (Environmental, Social and Governance – ESG). Desde ese momento, la compañía ha ido incorporado dichos criterios ESG a financiaciones en todas sus líneas de negocio.
En octubre de 2019, presentó su Marco Verde para alinear su financiación con su estrategia de sostenibilidad. Posteriormente, la compañía ha adaptado este marco verde a la Taxonomía de la Unión Europea, según la cual el 79,2% de la actividad de Redeia es sostenible medioambientalmente.
En enero de 2020, Redeia realizó su primera emisión de bonos verdes por un importe de 700 millones de euros para financiar proyectos elegibles en este Marco Verde, con una gran acogida en el mercado. La corporación prosiguió su estrategia en 2021, con la emisión de un nuevo bono verde – por 600 millones de euros – con el que logró el margen crediticio más bajo de la última década. En 2023, Redeia dio un paso más, optando por primera vez por bonos híbridos verdes de 500 millones de euros de carácter perpetuo y con un cupón del 4,625%.
A futuro, Redeia se ha fijado el objetivo de que el 100% de su financiación esté contratada con criterios ESG en 2030, contando con una meta volante del 60% en 2025 marcada en su Plan de Sostenibilidad 23-25. Según los últimos datos publicados a 30 de septiembre de 2023, esta cifra era del 59% superando holgadamente el 60% tras esta operación.