El compromiso con la sostenibilidad se ha convertido en una prioridad para las empresas, y son muchas las que han alineado sus acciones y políticas a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Según un estudio realizado por el Pacto Mundial de Naciones Unidas en colaboración con el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, 9 de cada 10 empresas contribuyen a alcanzar estos ODS.
Transformar la cadena de valor para integrar una estrategia de compras sostenibles es, sin duda, un reto que las empresas deben afrontar a corto plazo. Según la norma ISO 20400, el nuevo estándar y certificación de compras sostenibles o compras verdes, la adquisición sostenible consiste en tomar decisiones de compra que satisfagan las necesidades de bienes y servicios de una organización de tal manera que beneficien no solo a la compañía, sino a la sociedad en su conjunto, a la vez que minimiza su impacto en el ambiente.
Desde TÜV SÜD, como líderes a nivel internacional en el desarrollo e implantación de soluciones de alta calidad, sostenibilidad y seguridad, hemos identificado cinco claves que ayudan a determinar si un proveedor es responsable con criterios ambientales, sociales y de Buen Gobierno (ESG por sus siglas en inglés).
En primer lugar, el proveedor debe cumplir con la normativa vigente que afecta legalmente a su cliente y, además, ofrecer productos y servicios que cumplan con la normativa de aplicación (calificaciones técnicas, requisitos normativos, garantías…).
En el caso de prestación de servicios en los centros de trabajo del cliente, el proveedor debe tener capacidad para desarrollar su actividad de acuerdo con la normativa aplicable de PRL (Prevención de Riesgos Laborales).
Asimismo, el proveedor debe cumplir la normativa ambiental (licencias, permisos, autorizaciones, gestión de residuos, etc.) y laboral, con sus trabajadores. Además, es conveniente que sus políticas estén alineadas con los objetivos de calidad, medioambiente, seguridad, salud y compliance del cliente.
Otra demostración del cumplimiento de la normativa ambiental es contar con la certificación ISO 14001 o la superación de otro tipo de auditoría realizada por alguna entidad de reconocido prestigio.
Por último, aquellas empresas que tengan capacidad de influir en sus proveedores tienen la obligación moral de promover políticas de sostenibilidad en su cadena de suministro. En este sentido, es cada vez más habitual que las empresas involucren a sus proveedores en el proceso de descarbonización de la economía, reduciendo las emisiones de CO2 derivadas de la producción de los productos y servicios que ofrecen.
Bajo nuestro punto de vista, es crucial que los CEO de las empresas también se involucren y tomen conciencia de que los consumidores son cada vez más exigentes y de que ofrecer productos que tengan en cuenta el medioambiente y estén elaborados de una manera ética y justa es fundamental para ser competitivos en el mercado.
El Foro Económico Mundial (FEM) declara en uno de sus informes que apostar por los productos responsables puede aumentar hasta un 20 % los ingresos, reducir los costes hasta un 16 % y aumentar el valor de marca entre un 15 y un 30 %.
En TÜV SÜD, ofrecemos múltiples servicios para acompañar a las empresas en la mejora de sus prácticas sostenibles, desde la definición de una política y un sistema de gestión sostenible para las compras hasta el diseño de programas de evaluación y mejora de la sostenibilidad de los proveedores. Además, también contamos con soluciones orientadas a desarrollar auditorías y planes de mejora en los proveedores y al cálculo de la huella de carbono en la cadena de suministro.
En definitiva, estamos convencidos de que las empresas cumplen un papel decisivo a la hora de contribuir a la consecución de los ODS marcados en la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Entre sus compromisos empresariales, está el de escoger proveedores social y medioambientalmente responsables, que cumplan con criterios ESG. Una manera de poner en marcha una estrategia de compras verdes es establecer un sistema de puntuación que ayude a determinar la situación de partida con los proveedores actuales, marcar objetivos y medir resultados. Y, a partir de ahí, tomar decisiones.
De esta manera, nos aseguraremos la implantación de cambios transformadores que cumplan con las nuevas demandas gubernamentales y de la sociedad en lo que respecta al cuidado de nuestro planeta y al impulso de formas de consumo más responsables.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Gestión de compras sostenibles, en colaboración con AERCE.