La Fundación Freno al Ictus ha otorgado la certificación “Espacio Cerebroprotegido” a ICEX España Exportación e Inversiones por la formación entre sus colaboradores, en la identificación, estabilización y actuación en caso de que cualquier persona sufra un ictus en sus instalaciones o en la práctica de su trabajo.
Un paso más para mejorar la salud de las personas
María Peña, consejera delegada de ICEX, ha recibido el sello de reconocimiento, destacando que “constituye un paso más dentro de las actuaciones de la empresa encaminadas a preservar y mejorar la salud de las personas que trabajan en ICEX, labor que ha sido reconocida también en este mismo año con el certificado de ICEX como Empresa Saludable”.
ICEX España Exportación e Inversiones pasa a formar parte del tejido empresarial responsable de nuestro país (público y privado) en recibir esta acreditación. El proyecto ha consistido en la formación de 140 personas que forman parte de su fuerza laboral, con el objetivo de reducir el tiempo de actuación para salvar vidas y evitar secuelas, así como saber estabilizar al afectado, y poder activar cuanto antes el protocolo Código Ictus a través del servicio de emergencia 112.
En este sentido, el presidente de la Fundación Freno al Ictus, Julio Agredano ha destacado que “contar con una entidad pública como el ICEX España nos ayudará enormemente en nuestro objetivo de multiplicar información sobre el ictus en la sociedad, gracias al ICEX España se podrán evitar muertes y discapacidad en nuestro país. Esperemos que otras entidades públicas sigan el ejemplo del ICEX España y entre todos podamos cambiar la situación.”
Según datos de la Sociedad Española de Neurología, más del 50% de los afectados por un ictus quedan con secuelas discapacitantes o fallecen, y el 35% de los casos se producen en edad laboral, provocando una mortalidad 5 veces superior a la del cáncer de mama.
El ictus es una alteración de la circulación cerebral que compromete la llegada de sangre al cerebro provocando el consiguiente daño neuronal. Los datos son reveladores: se estima que una de cada seis personas tendrá un ictus a lo largo de su vida, es actualmente la primera causa de discapacidad adquirida en el adulto y representa la segunda causa de mortalidad, siendo la primera en el caso de las mujeres, de manera que cada año afecte a unas 120.000 personas en España, provocando la muerte o una discapacidad grave en un porcentaje elevado de los casos.
Por esta razón es esencial la rapidez en la actuación y una formación adecuada. Solo así los empleados podrán identificar las señales de alerta de esta enfermedad, señales que suelen pasar desapercibidas en muchos casos por el desconocimiento entre la población.
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