En esta ocasión, entrevistamos a Begoña de Benito, Directora de Relaciones Externas y Responsabilidad Social Corporativa de Ecoembes. En ella nos habla de cómo gira la RSC de esta entidad en torno a la gestión responsables y el propósito sostenible. Aspiran a generar el mayor impacto posible en positivo, bajo el enfoque del valor compartido. En ese empeño por perseverar en las buenas prácticas, de Benito destaca los tres catalizadores que propulsarán el cambio en nuestro planeta: la educación, la colaboración y la innovación.
¿Puede hablarnos de la RSE de su organización, de cómo ha evolucionado estos años hasta la actualidad y cuáles son actualmente sus principales áreas estratégicas?
Ecoembes tiene una larga trayectoria en materia de RSC que se materializó en un Plan Director específico en el año 2012. Durante todos estos años ésta ha ido creciendo y evolucionando hacia lo que es hoy: una RSC muy exigente y también muy adaptada a nuestra actividad, a nuestros desafíos y nuestras oportunidades. Una RSC muy pegada también a nuestra estrategia, a la que aporta y nutre.
La RSC de Ecoembes pivota en torno a dos pilares: la gestión responsable y el propósito sostenible y se articula en torno a 7 compromisos. Cada uno de ellos cuenta con su propio plan de acción, con la convicción de que es en ellos donde debemos focalizar nuestros esfuerzos.
Como comentaba, nuestra RSC es estratégica, aportando un claro valor a nuestra organización. Pero a su vez aspiramos a generar un impacto grande y positivo en la sociedad, en el medio ambiente y las personas. Todo ello lo hacemos posible gracias a un enfoque de valor compartido, de colaboración abierta, algo que tenemos muy presente en todo lo que hacemos.
En Ecoembes no entendemos nuestra actividad sino es en el marco de la colaboración porque estamos convencidos de que juntos podemos hacer mucho más.
¿Qué iniciativas o proyectos nos podría compartir de su estrategia de Responsabilidad Social, y cuáles son sus principales beneficios y beneficiarios?
Me gustaría destacar un proyecto especialmente importante para Ecoembes por lo que somos y por lo que hacemos: una organización sin ánimo de lucro, una solución colectiva que hace posible el reciclaje de envases: nuestro Plan de transparencia y escucha activa.
En ese marco, recientemente hemos lanzado un nuevo proyecto del que estamos especialmente orgullosos: un Panel de expertos en transparencia y escucha activa, formado por nueve voces autorizadas, de ámbitos muy diversos, como la sociología, la ética, ecología, la innovación social, el ámbito municipal, el periodismo, la sostenibilidad y la transparencia. Este Panel nos aporta una visión externa con carácter estratégico que nos ayudará, sin duda, a construir un Ecoembes mejor.
Contamos, además, con un plan de escucha activa, rigurosa y sistematizada a cada uno de nuestros grupos de interés, consistente en un pulso periódico que se traduce en planes de acción, para la mejora de la interlocución, del compromiso y la participación de nuestros grupos de interés.
También disponemos de diversos espacios para el diálogo, centrados en la escucha y la transparencia, como el Grupo de Trabajo con Administraciones Públicas, para dialogar y trabajar en la agenda común que tenemos en materia de reciclaje y gestión de residuos de envases.
Activamos diversas iniciativas pro-transparencia, para dar respuesta de forma anticipada, clara, didáctica, completa y adaptada a las demandas de información de nuestros diferentes grupos de interés. Ecoembes responde o nuestro proyecto de open data, ya abierto a administraciones públicas, son algunos ejemplos.
La transparencia ha dejado de ser un ‘más’ para ser un ‘debe’. Es una necesidad, la sociedad lo demanda, los grupos de interés también. Pero en Ecoembes lo vemos claramente como oportunidad, como un generador de credibilidad y de confianza, convencidos de que la transparencia nos hace mejores a las organizaciones y empresas.
¿Qué importancia tiene para su entidad la comunicación de la Responsabilidad Social y cómo lo trabajan?
La comunicación en Ecoembes es absolutamente fundamental, porque nuestra comunicación es, en gran medida, sensibilización ambiental. Cada año desplegamos más de 300 campañas, en colaboración con los ayuntamientos, para trasmitir la importancia del reciclaje en el cuidado del medio ambiente. El mensaje está calando, ya son 37 millones los ciudadanos y ciudadanas que afirman reciclar a diario. Esto no sería posible sin nuestra intensa labor en comunicación.
En Ecoembes tenemos proyectos preciosos que queremos compartir con todos para que puedan ser fuente de inspiración a ciudadanos, organizaciones y empresas. Libera, Naturaliza, Reciclar para cambiar vidas, La Música del Reciclaje, etc. son solo algunos demostrativos que queremos hacer llegar a muchas personas, invitándoles a sumarse, a participar activamente.
Sin la comunicación no sería posible llegar a tantas personas. También queremos hacer llegar nuestros compromisos en materia de gestión responsable, trasparentando compromisos que hemos adquirido de forma voluntaria como nuestro Plan de Igualdad, el código ético o la adhesión a las recomendaciones de buen gobierno corporativo de la CNMV para empresas cotizadas. Esta dimensión de la RSC también es capital.
En Ecoembes abordamos como indispensable la comunicación interna, porque nuestros empleados son nuestro principal valor y nuestra cultura corporativa esencial para hacer posible alcanzar nuestra misión y propósito como organización. Desarrollamos diferentes acciones para que las personas que conforman el equipo sean los mejores embajadores de nuestra RSC.
Fomentamos valores para que no solo sean embajadores de la RSC, sino activistas, participando activamente en iniciativas y proyectos de RSC, como Libera, para luchar contra la basuraleza y ser un gran altavoz que grita no a la basura en la naturaleza.
Ecoembes es considerada por la ciudadanía como la primera organización en educación y la segunda en medio ambiente. Un aval que nos da energía para seguir construyendo y avanzando en nuestro propósito ambiental y social.
¿Cuál considera que es la situación actual de la RSE en nuestro país y sus principales barreras y desafíos de futuro?
Pienso que hemos progresado mucho en los últimos años. La crisis por la que ha pasado nuestra economía creo que ha sido una gran oportunidad para repensar los ‘por qué’ y los para qué’ de la RSC. Hoy la RSC tiene más foco, aporta más valor a las organizaciones, está más próxima a la estrategia empresarial y, por otro lado, vemos nuevas iniciativas innovadoras, valientes, generadoras de una gran contribución social.
Me atrevería a decir que la RSC ‘se ha hecho mayor’ y ya es mucho más que acción social o filantropía, para convertirse en un atributo indispensable de cualquier estrategia empresarial que quiera tener éxito. Porque la sociedad así lo demanda y exige. Hoy, el ciudadano-consumidor toma en consideración otros valores a la hora de elegir productos y servicios, y en este contexto la RSC se ha convertido en un elemento clave. Lo estamos viendo claramente desde Ecoembes en el ámbito del reciclaje. Actualmente son ya 37 millones de personas que afirman separar de forma separada los residuos que genera. La sociedad está demandando organizaciones y empresas que tengan un propósito social, contribuyan a construir una mejor sociedad y un medio ambiente más saludable.
Además, hemos logrado, por fin, un amplio consenso en torno a la Agenda 2030. Es el momento de actuar, de ‘remar’ todos juntos en todos y cada uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Los retos son tan grandes y urgentes que necesitamos colaborar mucho más, desde alianzas, venciendo reticencias y desconfianzas, sumando voluntades.
¿Y cuáles son los próximos retos y desafíos de su organización en esta materia y cómo los piensan llevar a cabo?
Ecoembes es una organización con una misión 100% ambiental. Tenemos una gran oportunidad y también una obligación moral de avanzar, de ser parte de la solución y motor del cambio en la transición hacia una economía circular, que a su vez conecte y contribuya de forma positiva a lograr la transformación social y ambiental que marca la Agenda 2030.
Estamos plenamente convenidos que de la economía circular es una gran palanca para conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Avanzar en reciclaje, pero también y sobre todo en ecodiseño de envases, en el impulso de una menor generación de envases y de envases que tengan un menor impacto ambiental, de una producción y un consumo más responsables, que es lo que el planeta necesita, porque no hay planeta B.
Nuestro gran reto en Ecoembes es anticiparnos, dar respuesta a las demandas de nuestra sociedad, de nuestro planeta. A nuestro modo de ver hay 3 catalizadores de este cambio: Educación: es capital, porque solo desde la educación y la sensibilización ambiental podremos alcanzar el gran cambio de comportamiento necesario para avanzar hacia una economía circular. Naturaliza es nuestra apuesta por la educación ambiental para introducir el medio ambiente de forma transversal en el curriculum escolar obligatorio. Acaba de culminar la implantación de los pilotos en colegios de Madrid y La Rioja, con un balance muy positivo a día de hoy.
Colaboración: porque somos un ejemplo de ecología colaborativa y contamos con un amplio ecosistema relacional -ciudadanos, organizaciones ambientales, sindicatos, instituciones académicas, administraciones públicas y empresas- desde el que construir y aportar desde un enfoque de colaboración y corresponsabilidad. “Libera, naturaleza sin basura” es un ejemplo de colaboración: un movimiento ciudadano liderado por la organización ecologista SEO Birdlife que ya ha conseguido movilizar a más de 20.000 voluntarios y 600 organizaciones participantes en tan sólo 2 años de vida.
Innovación: es una palanca absolutamente necesaria para acelerar la creación del envase del futuro, para trabajar sobre el concepto de smartwaste, de la ciencia ciudadana, del emprendimiento. Desde nuestro TheCircularLab, el primer centro de innovación sobre economía circular de Europa, y desde un enfoque de innovación abierta se están desarrollando interesantísimas iniciativas de innovación disruptiva, que sin duda se transformarán en el reciclaje y los envases del futuro.
Estamos viviendo un momento apasionante. De grandes desafíos ambientales, pero también con una ciudadanía más consciente, más concienciada. Es el momento de la acción, de apostar por la economía circular, de ser parte del cambio, parte de la solución. Así es como lo estamos viviendo en Ecoembes: con sentido de la responsabilidad, con esfuerzo y con ilusión.