Entrevista con Belén Perales, directora de Responsabilidad Corporativa de IBM España, para hablar sobre la evolución de la Responsabilidad Social en nuestro país y en la multinacional estadounidense desde sus inicios hasta la actualidad.
¿Me puedes decir cómo llegaste al mundo de la Responsabilidad Social y qué recuerdas de aquéllos inicios, cómo estaba entonces la RSC en nuestro país y en tu organización?
Yo empecé a trabajar en IBM con 20 años y en el año 2004 es cuando me propusieron hacerme cargo del departamento de Responsabilidad Social, llevo ya aquí 20 años y dicen que la RSE empezó hace 15, con lo cual he vivido todo el desarrollo que ha habido en este país.
Al principio nos centrábamos mucho más más en la acción social, más que en entender la responsabilidad social en todas sus dimensiones. Yo creo que este ha sido el cambio importante, el ir viendo qué es lo que engloba realmente la RSC. Que no tiene que ver solo con inversión en la comunidad, que también, sino que también son las políticas con los empleados, o la relación con los proveedores, con los clientes y con todos los grupo de interés. En definitiva, que la empresa trabaje para que su negocio, su hacer, tenga un impacto positivo en la sociedad.
Ahora hay mucha más formación entorno a la RSC, hace 15 años lo importante era tu sensibilidad o tu interés por los temas sociales, por aportar dentro de la empresa. Yo vengo del mundo de la educación (estudié para ser maestra y luego hice filología inglesa) y después ya me he formado con un experto de RSC. Ese es un cambio importante que ha ido definiendo todo lo que engloba la RSC.
¿Cómo ha evolucionado la estrategia de la IBM a lo largo de estos años respecto a la responsabilidad social y cuáles son vuestras principales líneas de actuación?
Siendo una compañía americana, ya teníamos ventaja debido a que la parte responsabilidad social y de acción social ya estaba metida en la estrategia de la compañía y en la propia compañía. Ya existían políticas de inclusión de personas con discapacidad u ofrecer a mujeres puestos de dirección mucho antes de que se haya establecido por ley. En IBM hay muchas cosas que ya se hacían así aunque no se llamaran Responsabilidad Social. Había un compromiso con la comunidad antes incluso de que se acuñara el término.
Lo que hemos ido aprendiendo es que lo tiene sentido que hagamos es lo que mejor sabemos hacer. IBM es una empresa de tecnología y de servicios, con lo cual esa la tecnología y el talento de las persona que trabajamos en IBM, más de 400.000 en todo el mundo, ponerlo al servicio de la comunidad. El “goodtech”, es decir, la tecnología para hacer el bien es en lo que trabajamos y nos centramos en las áreas de educación, la salud y de ayuda en emergencias, recuperación tras desastres. En España y en Europa en general nos centramos principalmente en la educación.
¿Puedes ponernos algún ejemplo o citar alguna buena práctica de IBM en esta materia?
En España, hace casi dos años iniciamos un programa, “Watson va a clase”. Es un programa que trata de introducir la inteligencia artificial en los centros educativos. Formamos a los profesores para que conozcan que es la inteligencia artificial y ellos a su vez puedan transmitir ese conocimiento a sus alumnos y les abra un mundo de posibilidades que tienen que conocer. Todo esto lo hacemos creando un ecosistema con los centros educativos, profesores y alumnos, con los empleados de IBM que hacen de voluntarios para dar soporte, con universidades
¿Qué papel tiene la comunicación de la Responsabilidad Social en IBM y qué destacarías de la misma?
Tiene un papel clave, porque pone en contacto a todos los agentes implicados y hace posible encontrar espacios comunes para construir proyectos de colaboración. Me parece fundamental la comunicación de programas reales.
¿Cuáles son las principales ventajas y beneficios de apostar por la Responsabilidad Social?
Yo creo que es una plataforma de crecimiento. Es una inversión a medio plazo pero que, una vez está integrada dentro de la gestión de la compañía, es algo que te ayuda a crecer, a mantener mejores relaciones con todos los agentes con los que tienes relación: con tus empleados, con tus clientes, con las entidades sociales, con los gobiernos…Realmente es algo que te da acceso a nuevos mercados, te facilita acuerdos de colaboración, que te permite innovar. Y ese es realmente el cambio importante que está habiendo en la evolución de la RSC, entenderlo como algo que tiene un sentido para la compañía y que abre puertas y facilita relaciones. Al final, ver que el impacto es positivo tiene un sentido y estamos todos más a gusto en el sitio en el que trabajamos y vivimos.
¿Cuáles son en tu opinión los principales errores que se siguen cometiendo en torno a la RSC y cómo pueden subsanarse?
Uno de los errores que se sigue cometiendo muchas veces es seguir identificando RSC con acción social. Lo hacemos y, de hecho, lo he hecho en esta entrevista en varias ocasiones. La acción social solo es una de las áreas de la RSC y es importante, pero la RSC, que una empresa sea responsable implica mucho más. Implica medioambiente, proveedores, clientes, empleados, todos los temas de diversidad, inclusión, temas de salud, de seguridad en el trabajo, de buen gobierno, de investigación….entonces, yo creo que seguimos hablando de RSC para nombrar iniciativas de acción social.
Aún se oye en determinados foros que las empresas hacen RSC por cosmética, por lavado de imagen, lo que llamamos greenwashing ¿qué opinas de esto? ¿cómo se puede revertir esta situación?
Desconozco lo que hacen otros, lo que sé es que en estos 15 años he ido viendo cómo en IBM apostamos por la RSC porque hemos descubierto que, realmente, aporta valor al negocio y reporta un beneficio a la empresa . Además, la RSC está integrada en compras, en comunicaciones, en el negocio, en medio ambiente….Y aunque yo coordino todas las áreas de RSC realmente me dedico a la parte de acción social y voluntariado.
Nosotros en muchas ocasiones ni contamos lo que hacemos hasta que está totalmente consolidado, por lo que no hay una acción de lavado de imagen. Aunque, obviamente, cuando cuando cuentas lo que haces en RSC influye en tu imagen de marca creo que cada vez se hacen menos cosas por salir en la foto. Nosotros no lo hemos hecho nunca. Al final se nota cuando se anuncia un proyecto y no hay continuidad.
¿Cómo se está fomentando en IBM la comunicación y el diálogo con los grupos de interés y cuáles son las principales buenas prácticas?
A través de proyectos concretos, como el de “Watson va a clase”. Cuando tenemos una idea que es innovadora, que creemos que puede interesar, nos ponemos en contacto con todas las las partes que tienen que ver con ese proyecto. En el caso de de “Watson va a clase”, con los profesores, con los alumnos, con los empleados, con los centros educativos, con las Consejerías de Educación, con las Universidades o con entidades sociales, que también nos apoyan. A través de esos proyectos concretos es como nos comunicamos. Es como se favorece el diálogo en torno a una iniciativa concreta.
¿Cuáles son los desafíos de la RSC en nuestro país?
Intentar trabajar de forma colaborativa. Aunque las prioridades o los objetivos coincidan, cada empresa quiere tener su propio programa. Yo creo sería bonito y tendría mucho más impacto si pudiéramos trabajar conjuntamente. Ese es un reto. El otro es pensar qué hace falta en nuestro país y saber hacia dónde tenemos que trabajar. Yo creo que un reto importante es el de la educación y la formación hacia el empleo. Alinearnos con las necesidades reales de nuestro país es uno de los retos.
¿Cuáles son los retos de IBM en responsabilidad social corporativa?
Uno de los programas en los que hemos empezado a trabajar este año para afrontar esta parte de educación y formación y mejora de las habilidades para el empleo, es una iniciativa llamada “SkillsBuild”. Se trata de una plataforma para la enseñanza online de habilidades digitales.
La tecnología cambia muy deprisa y con estas nuevas tecnologías en ocasiones cambia también la forma de trabajar. Creemos que es importante ofrecer esa formación a colectivos que puedan tener más dificultad para acceder a esta información. Con esta plataforma vamos a trabajar con entidades del tercer sector que están inmersas en esa formación para el empleo y estamos trabajando para 2020 en itinerarios informativos: de temas básicos de tecnologías, desarrollador web o representación de ventas, temas de ciberseguridad, temas de inteligencia artificial…queremos cubrir todos esos itinerarios que son nuevos y que personas con más dificultades para acceder a la formación tengan este recurso. Ese es el objetivo: seguirnos comprometiendo por la educación y la formación a través de la tecnología que es lo nuestro.
Escucha aquí la entrevista con su protagonista: