La Industria 4.0 está comportando una gran cantidad de cambios y avances tecnológicos en la manera de operar de las empresas. Sin embargo, estos avances también han generado nuevos desafíos, especialmente en lo que se refiere a la seguridad de los sistemas y datos.
Nuevas tendencias tecnológicas
Nuevas tendencias tecnológicas como el Internet of Things (IoT), el Big Data, el cloud, la robótica o la inteligencia artificial se están implantando de forma masiva en las empresas porque simplifican y agilizan los procesos y suponen una mejora clara en la eficiencia y en la productividad gracias a la automatización.
Pero la gran transformación tecnológica y la digitalización ha comportado, al mismo tiempo, que surjan nuevos riesgos en materia de ciberseguridad. Los ataques a infraestructuras críticas han ido en aumento, aprovechando la falta de protección de los sistemas.
Las industrias tienen que conocer y ser conscientes al detalle de los riesgos y las pérdidas económicas que conlleva un ciberataque de estas magnitudes, por lo que es importante tomar las medidas adecuadas, muchas de las cuales son de sentido común. Éstas son algunas de las recomendaciones principales, según el BNEW:
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Asegurarse de que todos los dispositivos y sistemas están actualizados con las últimas correcciones de seguridad.
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Implementar un plan de respuesta a incidentes para hacer frente a cualquier amenaza potencial.
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Realizar un análisis de riesgos y evaluar los puntos críticos de la red para identificar las vulnerabilidades.
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Formar a todo el personal sobre las mejores prácticas de ciberseguridad y el uso de dispositivos y sistemas.
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Mantener un registro de todos los dispositivos y sistemas conectados a la red para simplificar la identificación de posibles amenazas.
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Invertir en soluciones de seguridad cibernética para protegerse. Esto incluye, un software de análisis de amenazas, firewalls, backups, etc.
