Nuestra sociedad vive preocupada, desde hace más de un siglo y casi en exclusiva, por el crecimiento económico y el bienestar, inmersa en un modelo global de desarrollo mediante el que ansía prosperidad, pero que está teniendo un coste excesivo para el medio ambiente. Este planteamiento empieza a ser insostenible y, de no revertirse, tendrá consecuencias impredecibles para nuestra especie y las demás que habitan el planeta.
Hubo un tiempo en que la vida sostenible era una realidad, la única opción, pero la Revolución Industrial nos llevó a alejarnos de la naturaleza, a estar ciegos durante décadas y décadas de contaminación y degradación de los ecosistemas. Hemos abusado de los recursos naturales, particularmente de los combustibles fósiles, y no hemos sabido utilizar las herramientas que la propia naturaleza nos brinda: el sol, el viento, el agua…
Pero las cosas, afortunadamente, están cambiando y, en esa línea, Capital Energy está haciendo un gran esfuerzo para conseguir que el futuro sostenible que hoy anhelamos sea el presente. Creemos que estamos a tiempo de ser sostenibles y volver a formar parte de la naturaleza, de reparar el daño causado. Ese propósito es nuestro ADN.
La generación de energía eléctrica se encuentra envuelta en una nueva revolución industrial, en la que las renovables son las principales protagonistas y el agente del cambio. La producción de electricidad a partir de combustibles fósiles ha supuesto la contaminación sistemática y la degradación de los ecosistemas, debido a la emisión de gases de efecto invernadero, a los vertidos que acaban en los ríos y océanos, al consumo de recursos naturales, a los daños en el paisaje, a la pérdida de biodiversidad y a otro sin fin de impactos, en muchos casos irreversibles.
Capital Energy no solo forma parte, sino que está impulsando, con el respaldo de las Administraciones nacionales y regionales, esta nueva revolución, que representa, sin duda, una esperanza para que, tras décadas de contaminación, le demos una oportunidad al medio ambiente. Se trata de un reto apasionante para los cientos de profesionales que trabajamos en la compañía.
En el Día Mundial del Medio Ambiente, desde Capital Energy podemos decir orgullosos. Asimismo, que formamos parte de la #GeneraciónRestauración. Todos nuestros proyectos incluyen medidas de restauración ambiental y conservación de ecosistemas que minimizan los impactos y salvaguardan el patrimonio. Y es que buscamos la compatibilidad con el medio y la minimización de las posibles afecciones desde la fase de selección de los emplazamientos, eligiendo para el desarrollo de nuestros proyectos las áreas de menor valor ambiental y cultural.
Algunas de las medidas que ya estamos llevando a cabo tienen que ver con la restauración de ecosistemas degradados, especialmente de masas arbóreas y turberas; la reforestación de bosques como sumideros naturales de carbono; la mejora de la conectividad de hábitats; la puesta en valor de los ecosistemas del entorno; la sensibilización y, por supuesto, el apoyo a iniciativas de organizaciones y entidades que comparten con nosotros el amor por la naturaleza.
Aunque, sin duda, la mayor contribución de nuestros proyectos a la restauración de ecosistemas degradados es la propia eliminación de fuentes de emisión de gases de efecto invernadero, en concordancia con los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030 y la Ley 7/2021 de Cambio Climático, que establecen una reducción de las emisiones del conjunto de la economía española de, al menos, un 23% respecto al año 1990 y la neutralidad climática antes del año 2050.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial del Medioambiente, promovido por Ayuda en Acción dentro de su proyecto #1Planet4All, financiado por la Unión Europea.
