El cambio climático es, cada vez más, una amenaza real para la gestión de los recursos naturales y la biodiversidad que supone un desafío creciente para las organizaciones en el camino hacia la sostenibilidad. En este contexto, el desarrollo sostenible es la mejor oportunidad para que las empresas guíen su crecimiento hacia estrategias respetuosas con el medio ambiente.
Con esta premisa, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) lanzó en 2015 la Agenda 2030, hoja de ruta que incluye 17 objetivos y 169 metas como herramientas de transformación a nivel internacional. En este sentido, son cada vez más las compañías que integran la contribución a los ODS dentro de su estrategia corporativa y operativa diaria.
En Cellnex hemos trabajado desde nuestros inicios en 2015 en integrar dentro de la estrategia general la gestión del medio ambiente y cambio climático, para garantizar que en cada uno de nuestros proyectos y actuaciones consideramos el equilibrio entre la generación de rentabilidad y el desarrollo social y ambiental, promoviendo la generación de valor sostenido a corto, medio y largo plazo.
Somos conscientes, además, que la expansión de nuestra actividad solo es posible a través de un desarrollo sostenible del negocio, gestionando el impacto que nuestra actividad genera no sólo sobre clientes, empleados y proveedores, sino también sobre el medio ambiente y nuestro entorno social y económico.
Uno de los retos que tenemos en Cellnex es mejorar día a día hasta llegar a una actividad empresarial de 0 emisiones. Por ello, la mitigación y adaptación al cambio climático es una de las líneas estratégicas del Plan de Sostenibilidad de la compañía, aprobado siguiendo los principios básicos establecidos en la Política Global de Medio Ambiente y Cambio Climático del Grupo. Esto nos ha permitido desarrollar acciones como un screening completo de las emisiones de Alcance 3 (emisiones indirectas), compensación de todas las emisiones de Alcance 1 (emisiones directas), estudio de Movilidad Global, análisis de los escenarios climáticos de todos los países, e identificación y evaluación de los riesgos y oportunidades del cambio climático, según las recomendaciones del Task Force on Climate-related Financial Disclosures (TCFD).
Uno de los mecanismos más efectivos para la prevención de impactos negativos es la gestión eficiente de los recursos. Por ello, fomentamos un consumo responsable de energía y del agua, y trabajamos por la optimización de los procesos y la promoción de ciclos operativos más limpios. A través del Plan de Transición Energética, hemos realizado acuerdos certificados de suministro de electricidad 100% verde (Países bajos y Reino Unido) y hemos adaptado contratos para la compra de energía verde a largo plazo en España. Además, el establecimiento de objetivos basados en la ciencia, nos permitirá que, en 2025, el 100% del consumo eléctrico del Grupo sea de origen renovable. También estamos trabajando en nuestra estrategia Net-Zero, comprometiéndonos a ser neutro en emisiones en 2050.
Otro aspecto que amenaza con agravar las consecuencias del cambio climático es la pérdida de la biodiversidad. En este sentido, parte de nuestro compromiso medioambiental se basa en La preservación de los espacios naturales por lo que, por ejemplo, hemos implementando una aplicación que permite el análisis y gestión de aquellas infraestructuras ubicadas en áreas protegidas en base a la Red Natura 2000, una red ecológica europea de áreas de conservación de la biodiversidad.
En Cellnex extendemos nuestro compromiso con el medio ambiente a lo largo de toda la cadena de valor, desde nuestros proveedores hasta la gestión de los residuos, permitiéndonos así conocer y gestionar los impactos medioambientales generados.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial del Medioambiente, promovido por Ayuda en Acción dentro de su proyecto #1Planet4All, financiado por la Unión Europea.