Corporate Excellence habla con Francesc Martí, Director de gestión de la Fundación DTI, que ofrece las claves para la colaboración entre la empresa y su ONG, así como las dificultades que encuentran al buscar colaboración y su perspectiva de futuro.
Los problemas de la colaboración
Según Martí, las ONG, a la hora de llevar a cabo su actividad, se encuentran con dos necesidades primordiales. La primera es la financiación de las acciones de cooperación. Esto se debe a que muchas regiones en vías de desarrollo no cuentan con los recursos financieros necesarios para el desarrollo del proyecto y su mantenimiento futuro. La segunda es el compromiso real por parte de los gobiernos locales. En DTI, en algunas ocasiones, se han encontrado con un gobierno local inestable en la zona donde pretenden implantar una acción, y esto afecta inevitablemente al sostenimiento a largo plazo de cualquier proyecto.
Para llevar a cabo su trabajo necesitan personas que posean un perfil internacional, con dominio de varias lenguas y, en especial, del inglés. En DTI Donation & Transplantation Institute buscan profesionales del área de la salud y de la cooperación internacional que sean dinámicos y flexibles en cuanto al horario y el tipo de tareas, ya que el ámbito donde se encuentran es muy multidisciplinar. La participación de la empresa privada
Además, desde DTI son conscientes de que en el contexto actual existe una necesidad de contar con profesionales que posean una visión multistakeholder y de largo plazo. El programa The Global CCO promueve este tipo de perfiles tan complejos y su formación. La organización quiso participar en el curso porque les ofrecía una oportunidad única para que grandes expertos en la materia pudiesen asesorarles y plantear una visión desde fuera, desde el exterior de la organización. El proyecto que plantearon a los alumnos se centraba en el asesoramiento en las tareas de comunicación y posicionamiento de marca, ya que sabían que necesitaban ayuda en ese ámbito.
Martí asegura: “La oportunidad que hemos tenido de participar en The Global CCO ha sido excelente. La relación, tanto con los profesionales como con los organizadores del programa, nos ha ofrecido una nueva perspectiva sobre una problemática interna que teníamos: la dualidad de nuestra marca. Esta experiencia nos ha aportado un nuevo enfoque para tomar una decisión al respecto y solucionarlo”.
Perspectivas de futuro
Actualmente, en DTI están muy interesados en mantener el contacto con los profesionales que participaron en su proyecto, aquellos que trabajaron y asesoraron sobre la marca DTI Donation & Transplantation Institute. En palabras de Martí: “Queremos continuar con la relación que iniciamos gracias al programa The Global CCO para que puedan seguir colaborando con nosotros tras su buen hacer con la comunicación y el posicionamiento de la organización”.
A través de esta relación simbiótica, ambos sectores, el empresarial y el tercer sector, salen ganando. La figura del CCO, gracias al impulso del programa The Global CCO, se convierte en un nexo entre distintas áreas y en el eje vertebrador para mejorar la comunicación de cualquier tipo de organización.