IKEA cerró el pasado 31 de agosto su año fiscal 2017, con una facturación de 1.466 millones de euros y con el incremento de su plantilla en España en 518 nuevos puestos respecto al cierre del año previo, alcanzando los 8.676 empleados. Este ha sido su cuarto año consecutivo con creación de puestos de trabajo, reflejo de su compromiso empleador en el país, y del que queda constancia en su Memoria Anual.
IKEA llegó a España en 1996 con sus tiendas de Badalona y Alcorcón y desde entonces se ha ido reinventando y adaptando a las nuevas necesidades y demandas del cliente. Es mercado de referencia para el Grupo a nivel mundial y durante este período ha destinado recursos e inversión con foco en innovación y transformación digital.
El objetivo: ser más cercanos, accesibles e innovadores; lo que definirá también la hoja de ruta para los próximos meses creando la “IKEA del futuro”. El reto: ofrecer una experiencia omnicanal y personalizada. La compañía destaca en los siguientes aspectos:
- Como modelo de innovación en formatos comerciales, especialmente en su acercamiento al centro de las ciudades, cuya máxima expresión en estos momentos es el espacio de Serrano (Madrid), dedicado a dormitorios, y que se complementará en verano con una nueva tienda en Goya, dedicada a salones, según ha anunciado la compañía recientemente.
- En su proceso de transformación digital, que considera clave y supone el paso de un modelo de tiendas tradicionales a un modelo de omnicanalidad donde prevé nuevos puntos de encuentro, conectando todos ellos como un único IKEA. El objetivo final: que el 80% de la población llegue a tener una tienda IKEA a menos de una hora en coche. El lanzamiento de la compra online y la aplicación IKEA Place han sido los dos últimos grandes lanzamientos en esta área.
- En el cambio estratégico respecto a sus servicios de transporte, instalación y montaje, para los que la compañía ha previsto nuevos proveedores con el objetivo de mejorar la experiencia de compra, ser más eficaces y dar respuesta al crecimiento que ha motivado la compra online. Para la elección de nuevos socios se han tenido en cuenta tres variables: calidad, accesibilidad y disponibilidad. El servicio de transporte, instalación y montaje tiene que ser reflejo de la filosofía de diseño democrático de la compañía que contempla como bases calidad, buen diseño, funcionalidad, sostenibilidad y precio competitivo para ser así accesibles para la mayoría.
- En gestión de talento y diversidad, que son reflejo de los valores y cultura IKEA y recogen datos significativos como que el 51,6 % de los puestos de dirección están ocupados por mujeres o que 13 mujeres, entre directoras y subdirectoras, dirigen las 17 tiendas IKEA en las ciudades españolas. Prueba de ello es el Distintivo de Igualdad que concede el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad a empresas excelentes en materia de Igualdad de Oportunidades.
- Otro gran escenario de actuación para IKEA es la sostenibilidad, en el que identifica tres palancas de cambio: inspirar y ayudar a que millones de personas tengan una vida más sostenible en el hogar, conseguir la independencia energética y fomentar el consumo responsable de recursos, y mejorar la vida de las personas y comunidades.
Durante el pasado año fiscal, las tiendas de IKEA en España facturaron 77,2 millones de euros (cerca de un 6% de las ventas totales) por la venta de productos relacionados con una adecuada gestión de la energía, el agua y los residuos en el hogar, generaron 11,5 kWh de energía renovable propia y destinaron cerca de 700.000 euros al impulso de acciones para crear un mejor día a día en su entorno, especialmente en favor de colectivos en riesgo de exclusión social, como el refugiado o la infancia más vulnerable, y otros como el universitario.
España es también un mercado estratégico para el que IKEA tiene importantes planes a futuro, como mercado piloto de nuevas fórmulas para estar cada vez más cerca del cliente y dar respuesta a sus necesidades. Futuro que prevé además el rediseño de su estructura logística en el país para ampliar localizaciones y cumplir con sus objetivos de mejora en cuanto a experiencia, tiempos y precio del servicio.
Incrementa también volumen de negocio hasta los 1.466 millones de euros
IKEA España presenta también resultados completos de explotación para el ejercicio fiscal de 2017, habiendo alcanzado una facturación de 1.466 millones de euros y manteniendo por tanto una tendencia alcista en el negocio. El EBITDA se ha situado en los 130 millones de euros y el beneficio neto en 98 millones.
Todos los mercados de la compañía han experimentado crecimiento de su actividad habiendo recogido las siguientes cifras de facturación: Cataluña, 356 millones de euros; Madrid, 342,6 millones de euros; Andalucía, 257,4 millones de euros; Levante (Murcia y Valencia), 212,4 millones de euros; Noroeste (A Coruña y Asturias), 103,9 millones de euros; Norte (Barakaldo y Pamplona), 98 millones de euros; y Central (Zaragoza y Valladolid), 95,7 millones de euros.
El aumento de visitantes a las tiendas en más de 200.000 personas respecto al año anterior, hasta los 40,6 millones de personas, y a su página web, con 108,7 millones de visitas (+13,5%), representan también el avance de su negocio en España y la buena acogida de su oferta comercial en el país.