José David Fernández es el fundador de UNIO, una compañía de telefonía móvil e Internet de reciente creación (2022). José David señala una frase, de Leonardo Murialdo, con la ha que ha definido a su compañía: “hacer el bien y hacerlo bien”. La responsabilidad social está presente en todas las decisiones que toma la organización. “Lo vemos como un todo para nosotros, no me gusta hablar de la responsabilidad social como algo aparte”, señala José.
A la hora de tomar esas decisiones, José David quiere que estén lo más alineadas posible a los valores de la empresa porque, en caso contrario, se produce una fricción con los clientes. En cuanto a las áreas estratégicas de la compañía, el fundador de UNIO afirma con rotundidad que “no tenemos porque lo hemos incorporado dentro”. Considera que al haber nacido con eso en su ADN es una cosa superflua que no necesita delimitación.
José David destaca 3 proyectos o iniciativas que están desarrollando. La primera consiste en apoyar el crecimiento de las instituciones que colaboran con UNIO a través de las facturas de los clientes. La segunda se trata de dar una mayor y mejor experiencia a los usuarios en el uso de Internet (eliminando fishing, suplantación de identidad, etc). La tercera iniciativa se basa en la creación de productos específicos para colectivos determinados para así customizar ese producto de fibra y móvil.
El concepto de comunicación es importante para José David: “Lo tenemos tan metido dentro que no es comunicar la RSE o la RSC, sino simplemente comunicar lo que hacemos”. La RSE es el modelo de negocio y la forma a operar. UNIO nace con la intención de tener un crecimiento orgánico y natural.
En cuanto a los próximos retos de la organización, el fundador de UNIO afirma que: “tenemos la obligación de crecer y coger esa masa crítica en cuanto a clientes para que todo esto tenga sentido”. José David delimita en cuatro los pasos a seguir de la compañía. El primero es gestionar el crecimiento de manera adecuada. El segundo es mantener la cultura con la que nace la empresa y que condiciona todas las decisiones. El tercero es generar un entorno más seguro para los clientes en Internet. El último reto es ser capaz de conectar con todos los colectivos a través de los productos específicos que desarrollen con ellos.
“Tenemos que lograr que todo el mundo que se incorpore al proyecto comparta y conozca sus valores”, confiesa José David. En tan solo unos días, la compañía ha logrado llegar al centenar de clientes y necesitan ver cómo seguir escalando. “Hay que crear una experiencia en Internet sin miedo para las personas y que cada vez que reciban un WhatsApp o email se sientan orgullosos de que gracias a ellos alguien en otro lugar está pudiendo tener una vida mejor”, señala David.