Hablamos con Montse Moliner en el relanzamiento de Human Age Institute, la Fundación de Manpower Group España, que pone en marcha la Primera Estrategia Nacional que prioriza el criterio S-Social en la acción corporativa con el objetivo de ayudar al menos a 100.000 personas antes de 2030 a acceder a empleo sostenible, diverso e inclusivo.
¿Qué impacto genera Human Age Institute en la sociedad y en las organizaciones? La mayor iniciativa de Talento y Empleabilidad del país, puesta en marcha en 2014 por ManpowerGroup
La tecnología está haciendo que la recuperación y los cambios estén abriendo brechas mucho más grandes. Así pues, el concepto de sostenibilidad con acento en la “s” va en este sentido: las empresas de cualquier tamaño han de poner su foco en la cúspide para hacer que su organización sea sostenible. Esto supone generar empleo de calidad, tener en cuenta a las personas, cuidar a los equipos, hacer más inversiones, transparencia, buena gestión y sobre todo, cuidar el medio ambiente.
Es por ello que en la parte de personas, creemos que es fundamental dar una serie de orientaciones, unas guías y un acompañamiento, y que todo ellos se convierta en un foco claro para los presidentes y los CEOs. Desde Human Age Institute lo estamos llevando a cabo y queremos hacerlo con los mejores.
¿Cuántas entidades la forman?
Hay más de mil empresas que se han ido sumando a esta iniciativa de una forma continuada. Este hecho significa que son muchas las organizaciones que están contribuyendo a generar oportunidades para jóvenes, personas con discapacidad y seniors.
En Human Age Institute hemos impactado directamente a más de 21.000 jóvenes, colaborando con todas las universidades de España, abriendo hubs en las universidades, organizando e impartiendo sesiones y talleres permanentemente, trabajando en la parte de tecnología con programas específicos de discapacidad, etc.
¿De qué forma Human Age Institute apuesta por el desarrollo de buenas prácticas socialmente responsables?
Tenemos unas políticas de sostenibilidad a nivel de grupo donde realmente estamos muy comprometidos en reducir nuestro impacto en la naturaleza y en ser neutros en cuanto a la huella de carbono.
Así pues, nuestro compromiso con la sostenibilidad está marcado por unas directivas claras y, sobre todo, con el concepto de llevarlo a la acción. Creemos que lo podemos hacer bien, hacerlo mejor, aprender de otros, y sobre todo, ayudar a las empresas que están unos pasos más atrás.
¿Qué aporta el equipo de expertos en la hoja de ruta de la entidad? ¿Cuáles son su principales líneas de actuación?
Desde que lanzamos Human Age Institute pensamos que no podemos ni debemos hacerlo solos. Nuestra iniciativa tiene que unir a los mejores y ser un punto de encuentro, y esta fue nuestra filosofía desde el principio. Por lo tanto, buscamos la implicación o la colaboración de personas que ya estaban, que son, y que siguen siendo los mejores como Silvia Leal o Juan Carlos Cubeiro.
También buscamos a otros expertos muy puntales en estas áreas de sostenibilidad con acento en la “s” como puede ser Mercè Brey, experta en Diversidad o Elsa Punset.
¿Cuáles son los principales retos y desafíos de futuro de la fundación?
El principal reto es el tiempo. Las cosas cambian muy rápido. Hacer cambios a estos niveles, y que impacten en las personas, no son rápidos pero son urgentes. Estos cambios están produciendo brechas muy profundas, y no queremos que nadie se quede atrás. Es por ello, que la rapidez con la que podemos generar el cambio no sabemos si será tan rápida como la necesidad que hay de hacerlo.
Uno de los retos es poder llegar a la mayoría de las empresas, medianas y pequeñas, que, por lo que sea, no están pudiendo trabajar en ello, y no tiendan a la desaparición. Otro gran reto es la amplificación, poder generar este impacto social que, al final, es el futuro de todos.
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