Uno de los desafíos con los que nos enfrentamos las empresas hoy en día es contribuir de manera positiva a corto y largo plazo en la sociedad. El empeño por desarrollar impactos que generen valor al entorno donde habitamos ha cobrado un gran protagonismo en la actividad de las compañías. Cada vez somos más las empresas que incorporamos valores como la responsabilidad y la sostenibilidad a nuestra identidad corporativa con la voluntad de que estos valores se apliquen de forma transversal en todos los negocios en los que estamos involucrados. Y es que, en un contexto de emergencia climática y social como el actual, el compromiso social y medioambiental son activos intangibles fundamentales para construir la reputación de una empresa.
En Damm hace años que hemos incorporado estos valores y velamos por su cumplimiento en todas las áreas de nuestro negocio. La sostenibilidad, entendida en su sentido más amplio, es clave para nuestra empresa y, en su virtud, impulsamos diferentes iniciativas para hacer a todos nuestros colaboradores y colaboradoras partícipes de tal pacto con la sociedad. Somos conscientes de que formamos parte del entorno en el que nos desarrollamos y, por ello, nos comprometemos a llevar a cabo acciones que lo mejoren.
Desde hace varios años llevamos a cabo un plan de voluntariado corporativo que impulsa la participación de nuestro equipo de personas en acciones sociales, medioambientales, culturales y deportivas. Nuestro plan #LIVE TO BE PART OF THE CHANGE nació en el marco de la apuesta de Damm por la sostenibilidad y se une a nuestro compromiso con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos en el Pacto Mundial de las Naciones Unidas, al cual Damm se adhirió en 2019.
A través de nuestro plan de voluntariado corporativo, que desde el año 2020 forma parte de la red internacional Voluntare, todas aquellas personas que forman parte de Damm pueden participar en acciones que promueven la reforestación de la flora local, la limpieza de playas y montes, así como en actividades deportivas con el fin de recaudar fondos para causas benéficas.
Una de las últimas acciones que hemos impulsado bajo el paraguas de #LIVE TO BE PART OF THE CHANGE es la participación en la novena edición de la Magic Line, una marcha solidaria organizada por San Juan de Dios. Más de 1.600 personas recorrieron las rutas que propusimos en diferentes ciudades del país. Bajo el lema “somos lo que compartimos” nuestros equipos caminaron más de 2.200 km, por los cuales la Fundación Damm se comprometió a donar 1 euro por cada quilómetro recorrido. Los colaboradores y colaboradoras de Damm que participaron consiguieron recaudar más de seis mil euros. El 100% de los fondos obtenidos se destinaron a proyectos solidarios y a ayudas para los refugiados ucranianos.
Esta actividad, como muchas otras que llevamos a cabo, es una oportunidad para reforzar el compromiso social que tenemos como empresa. Aprovechamos estas ocasiones para aportar nuestro granito de arena y seguir trabajando para ayudar a construir una sociedad mejor. Revertir muchos de los problemas sociales y medioambientales está en nuestras manos y desde Damm estamos convencidos de que, con la implicación de todos, el cambio es posible.
Para más tribunas visite nuestra biblioteca Corresponsables.