Entrevistamos a Pablo González Ruiz de la Torre, fundador y CEO de Trivu que nos detalla la primera edición de Sondersland, el festival virtual global de talento organizado por la startup así como su tres valores fundamentales: conectividad bidireccional, autenticidad y sostenibilidad buscando siempre una visión constructiva. El fundador y CEO de Trivu asegura que la startup tiene como propósito hacer del talento joven (de actitud) el motor que mueva y que transforme la sociedad, y pone especial foco en la persona. La crisis sanitaria dará a muchas personas la oportunidad de volver a empezar, y de esta forma se dará cada vez más importancia al talento de los seres humanos dentro de la sociedad. Para ello, Pablo argumenta que aún hay muchas cosas que hacer y trabajar con la sociedad civil, las empresas y los gobiernos para poco a poco conseguir que el talento humano sea la clave no solo del presente y de la reactivación social económica sino también del futuro que todos estamos llamados a construir.
¿Qué valores ha abanderado la primera edición de este festival virtual global de talento organizado por Trivu?
Sondersland es un movimiento que lleva ya cinco años en activo y que este año ha cobrado más fuerza y, sobre todo, más necesidad y relevancia que nunca debido al difícil contexto que estamos atravesando y por cómo la pandemia desencadenada por la COVID-19 ha afectado tan drásticamente la situación económica y social que vive nuestro país, y también la sociedad global en su conjunto. Sondersland nace como un movimiento que lo que busca es conectar, activar y potenciar a personas que realmente quieren hacer que el mundo avance en positivo y de forma constructiva. Un punto de encuentro en el que cada año reunimos a miles de jóvenes de todo el mundo con el objetivo de entender cuáles son las principales tendencias, por un lado, que están marcando el presente y el futuro del mundo en el que vivimos. Pero también, por otro lado, sacar cuáles son también las principales oportunidades que podemos aprovechar en cualquier parte del planeta en el que estemos. De hecho, decimos siempre que seas quién seas y vengas de dónde vengas, Sondersland es tu movimiento, es tu equipo, es tu experiencia. Lo que verdaderamente te puede aportar para desatar todo tu potencial y talento. Esta iniciativa tiene tres valores fundamentales. Todos y cada uno de ellos siempre enmarcados con una actitud optimista, constructiva, y siempre con una capacidad de dejar atrás el derrotismo. El festival virtual gira entorno a tres ejes principales: El primero es toda la parte que tiene que ver con la conectividad. Es decir, queremos que sea un movimiento conectado al mundo, que todo lo que está pasando ahí fuera tenga cabida en el contenido del evento, y en todo lo que hacemos para que genere trascendencia, y que todo lo que pase en el evento llegue al mundo. Es decir, que sea una conectividad bidireccional, del mundo hacia el evento, hacia Sondersland, y desde Sondersland hacia el mundo. En segundo lugar, trabajamos mucho la autenticidad. Creemos que da igual lo que hagas, que da igual donde estés y que da igual quien seas, si realmente quieres cambiar las cosas y quiere ser parte activa de lo que está pasando en esta sociedad, que Sondersland sea un lugar para ti. Trabajamos todo lo que tiene que ver con diversidad e inclusión si hacer ningún tipo de referencia, ni trabajando por colectivos porque al final pensamos que cada persona es un mundo en sí mismo, y que tiene que tener la oportunidad de encontrar en Sondersland ese punto de partida con el que poder aprovechar al máximo toda su trayectoria personal y profesional. Por último, muy importante, la sostenibilidad. La sostenibilidad entendida no solo como algo básico, es decir, más relacionada con la parte del reciclaje, sino como un concepto transversal que afecta a todo lo que estamos haciendo como generación, y el impacto que queremos generar. Tenemos que dejar un mundo mejor en todos los sentidos, respetando el entorno en el que estamos y cuidando de él. Esto lo trabajamos tanto en la propia producción y formato del evento como también, por supuesto, en los contenidos y en los principales mensajes. En definitiva, es un movimiento conectado, auténtico y sostenible que busca generar esa visión constructiva, cero derrotista y, sobre todo, muy proactiva y colaborativa del futuro que ahora tenemos que construir juntos.
Esta es la primera edición, ¿la primera de tantas que vienen? ¿Se seguirá organizando este tipo de festival?
Esta es la primera edición como marca Sondersland. Llevamos cuatro años realizando un evento muy parecido, pero con otro nombre. El año pasado organizamos un evento que contó con el apoyo de las principales administraciones públicas como el Gobierno de España, la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la ciudad, así como de las grandes empresas tanto españolas como internacionales en nuestro país. Este año decidimos dar el salto para hacer un evento más global, más internacional y más potente en todos los sentidos, y de ahí el cambio a Sondersland. Al año que viene se volverá a repetir con más fuerza que nunca a raíz de todo lo que hemos vivido este año, y siempre respetando y garantizando la seguridad y la salud de los participantes. La experiencia interactiva y humana siempre será prioritaria.
Este festival ha estado organizado por Trivu, del que eres fundador. ¿Cuál es la misión-visión de Trivu?
Trivu es una organización que fundé hace cinco años, seis va a hacer ahora, con un objetivo muy claro que es de todas las formas posibles poner al talento en el centro de la transformación que el mundo está viviendo. Vivimos en una sociedad que de alguna forma con ese proceso de digitalización que estamos afrontando parece que la tecnología es la clave. Pero lo que realmente marca la diferencia hoy en día, y siempre ha sido así a lo largo de la historia de la humanidad, es poner a las personas en el centro. Además, a personas, como decimos nosotros, jóvenes (no jóvenes de edad). Es decir, en el mundo en el que estamos no solo requiere de gente joven de 20 años, sino de gente joven a cualquier edad. Gente con la actitud, con la pasión, con la pro actividad, con las ganas y, sobre todo, con la ilusión de poder hacer las cosas de forma diferente y de querer trabajar juntos para que ese futuro que tenemos por delante lo aprovechemos y que poco a poco podamos, ahora que se habla tanto de la nueva normalidad, construir una mejor normalidad con todos, para todos y de todos. Nuestro propósito es hacer del talento joven (de actitud) el motor que mueva y que de alguna forma transforme la sociedad en la que estamos.
¿Por quiénes está formado el ecosistema Trivu?
Está formado por gente auténtica, gente de cualquier parte del mundo que hace cosas muy diferentes, de todo tipo de edades, pero unidas bajo una misma actitud y una misma forma de vivir la vida que más allá de lo que hagamos o donde estemos. Es esa forma de ilusión, de trabajo, de responsabilidad individual, pero también colectiva, y sobre todo de compartir lo mucho que somos y lo mucho que podemos llegar a ser si realmente trabajamos juntos. Estamos presentes en decenas de países de todo el mundo y somos miles de personas de todas las edades unidas bajo esa misma actitud y, sobre todo, con esa misma inquietud por querer seguir apostando y trabajando por un futuro mejor. Gente que, además, se ha ido sumando a lo largo de estos cinco años y que cada año seguimos creciendo y uniéndonos a esa inquietud de querer hacer las cosas mejor.
¿Qué acciones desarrolla la compañía para seguir impulsando y apoyando la retención de talento joven?
Nosotros somos un equipo relativamente joven. Desde la fundación tenemos gente desde los veinte y poco a los treinta y poco, gente “muy joven” en este caso, en edad. Obviamente, para nosotros el talento joven es clave porque somos jóvenes, y ojalá sigamos siéndolo siempre a nivel de actitud. Al final, tenemos un compromiso muy fuerte con nuestra generación. Es fundamental luchar y generar oportunidades que nos permitan aprovechar las numerosas oportunidades, que hoy más que nunca, se nos presentan en un contexto como el actual. No solo trabajamos por y para el talento joven a nivel interno, que repito es nuestra propia naturaleza y situación actual, sino sobre todo y lo más importante, ayudando a que todo tipo de empresas y organizaciones puedan conectar más y mejor con ese talento joven. Trabajamos con muchas organizaciones españolas e internacionales, ayudándoles en ese proceso de atracción y no tanto de retención. No me gusta llamarlo retención del talento sino de cómo enamorar, de cómo generar una experiencia que realmente contagie y entusiasme al talento que quieres atraer y, sobre todo, al que quieres que se quede contigo. Llevamos cinco años trabajando en esto con más de 100 empresas en proyectos de atracción y de enamoramiento de talento joven y no tan joven para conseguir que este mundo del talento y de la empresa estén cada vez más y mejor conectados en todos los sentidos.
¿Qué otras buenas prácticas o acciones en materia de responsabilidad social y sostenibilidad puedes compartir de Trivu?
Cuando yo escucho a los grandes líderes empresariales de este país y todas las diferentes situaciones que muchas veces se ven expuestos a vivir a la hora de trabajar el día a día de sus empleados, me doy cuenta que todo es mejorable y que se pueden hacer muchas cosas. De base, nunca he partido de que esto sea un tema de empleados o de la empresa sino que, al final, todos somos parte de lo mismo. Con lo cual, desde el momento cero y habiendo mejorado mucho en los últimos años, y con todo lo que nos queda aún por mejorar, el tema de diversidad, inclusión, de hacer que la gente se sienta bien que no deja de ser lo que llamamos “políticas sociales” para el trabajador, para nosotros ha sido siempre una prioridad absoluta. Desde luego que cuando más hemos podido ir consiguiendo como empresa, más hemos podido dar. Desde que comenzamos en Trivu, hemos puesto a la persona como foco principal. Para nosotros, un eje clave es la autenticidad, que es, en primer lugar, generar un entorno donde la gente tenga la capacidad de conocerse a sí mismo. Esto es muy importante ya que pasamos mucho tiempo en el trabajo. En segundo lugar, que la gente se sienta orgullosa y no tenga que esconder en ningún momento quiénes son. Y en tercer lugar, que puedan trabajar en una empresa como Trivu para cada día poder mejorar como personas, pero también como profesionales. Creo que eso es lo más importante y lo más enriquecedor: el poder trabajar en un sitio rodeado de gente, de grandes profesionales, pero, sobre todo, de grandes personas que hacen cada día que esto vaya mejor. Esta promoción de la autenticidad va mucho más allá de trabajar la diversidad y la inclusión que se limita a trabajar determinados colectivos porque puedan ser los más o menos representativos de la sociedad. Al final, cada persona es un colectivo en sí mismo, hay tantas diversidades como personas en el mundo y yo creo que es momento de dejar de hablar de colectivos y empezar a hablar de personas, de empezar a generar un entorno donde realmente seas quien seas, como decía antes, y hagas lo que hagas te sientas, primero, orgulloso de quien eres y tengas al mismo tiempo la responsabilidad de poder trabajar siempre “ser la mejor versión de ti mismo”. Creo que ser auténtico es una cuestión de coherencia. Lo que quieres ser y lo que están haciendo y diciendo para ser un poquito más eso que te mueve cada día. Creo que eso para nosotros es prioritario en Trivu tanto en nuestro equipo como hacia fuera en la comunidad con la que trabajamos. Poder generar entornos donde las personas puedan ser quienes realmente son siempre con el compromiso y la responsabilidad individual de mejorar cada día dejando excusas a un lado como “soy así” o “esto es lo que hay” que no llevan a nada más que al retroceso. Creo que para mí esa es la clave: promover entornos donde la gente pueda ser todo lo auténtica que quiera sery desde esa autenticidad aportar más y mejor a la empresa, al negocio, al equipo, etc…
¿Qué relevancia tiene para Trivu la comunicación de esta responsabilidad social?
Nosotros vivimos comunicando. Al final, estamos muy expuestos por todo lo que hacemos y lo que, de alguna forma, somos como plataforma. Tenemos una gran responsabilidad. Creo que es fundamental mantenerte fiel a lo que eres y mantenerte fiel a lo que dices, es un tema de coherencia. Es necesario que entendamos que en un mundo como este la comunicación es vital. No solo basta con hacer las cosas bien, sino que hay que comunicarlas también bien. Y en ese proceso, nosotros, con todo lo que tenemos que mejorar, hay mucho marco para poder hacerlo e intentamos hacer una comunicación cercana, natural y humana, y nos consta que la gente lo valora mucho. La comunicación de tú a tú que transmita cercanía. Una empresa que es gente. Esto lo intentamos hacer de la manera más natural y cercana posible. Estos valores en la comubnicación es una de las cosas que la gente más destaca de nosotros y queremos seguir potenciando en todos los sentidos. Estar ahí donde la gente esté, donde la gente nos necesite y, sobre todo, de una forma lo más natural, cercana, humana e interactiva posible para estar siempre conectados a las necesidades y a la realidad de lo que el talento en este país y en el mundo, en general, necesita.
¿Cuáles son los planes de futuro de aquí a un futuro próximo de Trivu?
Tenemos una prioridad muy importante ahora que es seguir creciendo y evolucionando como ecosistema para seguir aportando más y mejor valor a las personas que forman parte de nuestra red. Es fundamental poner al equipo Trivu como centro neurálgico, como el corazón y el pulmón, que hace que todo funcione y que todo tenga sentido. Tenemos que seguir creciendo de forma escalable, sostenible en todos los sentidos priorizando siempre la calidad de la experiencia que vive tanto mi propio equipo como la gente que forma parte de nuestro ecosistema. Pero, sobre todo, y lo más importante, generando oportunidades reales de valor para que toda la gente que forma Trivu puedan encontrar en nosotros siempre un punto en el que poder seguir trabajando mejor en el mundo y generando, sobre todo, un impacto positivo en todos los sentidos. No es fácil la tarea que tenemos por delante y más aún con la situación que hemos vivido en las últimas semanas y meses en España. Pero, desde luego, yo creo que este es un año, siempre lo he dicho desde que empezó la pandemia, en el que no hay que categorizar como malo o bueno, como periodo ganado o perdido, sino que es un año de aprendizaje, de transición. El año 2020 no es un año en el que todo tenga que acabar sino que muchas personas van a tener la oportunidad de volver a empezar, y creo que para nosotros, gracias a lo que estamos viendo ahora, daremos cada vez más importancia al talento de los seres humanos dentro de la sociedad. Desde luego, tenemos muchas cosas que hacer y trabajar con la sociedad civil, las empresas y los gobiernos para poco a poco conseguir que el talento humano sea la clave no solo del presente y de la reactivación social económica sino también del futuro que ahora todos tenemos que ser capaces de construir.
Aquí puedes escuchar la entrevista completa a Pablo González Ruiz de la Torres, fundador y CEO de Trivu