La Fundación B Lab Spain, impulsora del movimiento B Corp en España, ha coordinado el Manifiesto para impulsar un nuevo modelo económico y empresarial inclusivo y sostenible en España. ¿Qué os ha llevado a dar este paso?
La convicción de que es necesario acelerar la transformación y transición hacia un nuevo paradigma empresarial que dé respuesta a los grandes desafíos económicos, sociales y ambientales del presente. Por ello, solicitamos el reconocimiento de las empresas con propósito a través de la creación de una figura jurídica, las “Sociedades de Beneficio e Interés Común” (SBIC), que promueva y reconozca legalmente a aquellas compañías que voluntariamente persiguen obtener, en el ejercicio de su actividad empresarial, un beneficio social y ambiental, además de un beneficio económico.
Queríamos que este debate tuviera una repercusión más allá de los círculos habituales y llegará a un público más amplio que entendiera la relevancia de esta iniciativa y la respaldara para ampliar su alcance. Por este motivo, es destacable y remarcable que el manifiesto haya sido firmado por 50 personalidades que representan una gran diversidad y transversalidad.
¿Cuál es la razón de ser del manifiesto y por qué es importante y relevante para España?
La Agenda 2030 sin duda es un avance, pero su logro va a depender, en buena medida, de la participación empresarial. Por este motivo, planteamos un nuevo modelo empresarial, que combine de forma genuina la generación de un triple impacto -social, económico y ambiental-. En concreto, estas ‘organizaciones con propósito’ incorporan a sus estatutos un requerimiento legal que les obliga a cumplir con los estándares más elevados a nivel ambiental, social, de transparencia y buen gobierno. Además, deben incorporar a la definición de su objeto social la generación de un impacto positivo como parte inherente de su actividad empresarial. En definitiva, se trata de facilitar que el sector empresarial sea un aliado clave para el logro de un desarrollo inclusivo, equitativo y regenerativo para todas las personas y el planeta. Y España, que es uno de los países en los que son más evidentes los desequilibrios sociales y también uno de los países en Europa que puede sufrir mayores riesgos climáticos, no debería quedarse atrás porque supondría una pérdida de oportunidades y unos riesgos elevados, teniendo en cuenta las regulaciones y directivas que se aprobarán en este terreno.
Ya son casi 300 las organizaciones y 30.000 personas adheridas a la iniciativa. ¿Qué valoración hacéis de la respuesta obtenida hasta la fecha?
Debemos confesar que ha superado nuestras expectativas, pero eso no quiere decir, en absoluto, que nos demos por satisfechos. Vamos a seguir trabajando para sumar apoyos, especialmente entre organizaciones afines y actores clave que permitan ampliar el debate y sensibilizar a la población sobre la necesidad de reconocer a las empresas con propósito. El gran desafío que tenemos por delante es lograr generar suficiente interés y consenso para acelerar su tramitación parlamentaria.
¿Cuáles son los principales retos y desafíos a los que se enfrentan las organizaciones que quieran crear valor social con su actividad en los próximos años?
Pienso que hay dos retos: uno interno y otro externo. El interno está relacionado con la transformación de la visión de empresa tradicional, orientada principalmente a la creación de resultados económicos, a una visión empresarial orientada a la creación de valor compartido. Este es un proceso de cambio cultural importante para una organización. Requiere de un liderazgo comprometido y capaz de trasladar esa visión al conjunto de la compañía y es necesario tiempo, herramientas de gestión, cambios culturales, cambios en el sistema de gobernanza, etc. El segundo desafío, externo, responde a cómo trasladar y comunicar de forma auténtica ese propósito al consumidor y grupos de interés para lograr un mayor reconocimiento. Se realiza mucha comunicación sobre sostenibilidad e impacto, pero no siempre es coherente con la actuación empresarial y eso ha generado un cierto escepticismo e incredulidad.
¿Qué importancia le dais a la comunicación y puesta en valor ante vuestros públicos de interés de vuestra labor?
Intentamos ser lo más activos posibles dentro de nuestras posibilidades. Sabemos que tenemos algo único: una comunidad cada vez más amplia de personas y empresas que amplifican la labor conjunta que realizamos. Para nosotros esto es lo más importante, que nuestra labor sea compartida por la comunidad B Corp y que cada empresa muestre con orgullo y emoción su identidad como B Corp.
Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: Un nuevo modelo económico y empresarial inclusivo y sostenible
