¿Qué os llevó a constituiros en Plataforma en 2012 y qué balance hacéis de estos 10 primeros años de trabajo en España?
Hace ahora 10 años, las principales entidades sociales de nuestro país decidimos que era el momento de coordinar de una manera más eficaz y eficiente nuestro trabajo. Para ello, nos unimos con un objetivo principal: defender, a través de una voz unitaria, los derechos e intereses sociales de la ciudadanía, especialmente de las personas en situación de pobreza o riesgo de exclusión.
Con una perspectiva transversal y diversa se han ido incorporando más entidades y, en la actualidad, junto a las once mesas y plataformas territoriales, la Plataforma del Tercer Sector está formada por veinte organizaciones que representamos a más de 28.000 entidades sociales.
Sin duda, crear la Plataforma del Tercer Sector fue un auténtico reto, pero el balance de estos diez años nos demuestra que ha merecido la pena. Han sido diez años en los que hemos trabajado para garantizar los derechos de la ciudadanía, para ofrecer soluciones y oportunidades y construir tejido social, para mejorar la vida de millones de personas. Diez años en los que hemos alcanzado muchos objetivos e hitos clave para el Tercer Sector. Desde la creación de la Comisión de Diálogo Civil, pasando por la aprobación de la Ley del Tercer Sector y la Ley de Voluntariado, hasta la puesta en marcha de la Casilla Empresa Solidaria del Impuesto de Sociedades, a la que se dedica este especial.
Hace unas semanas habéis desarrollado una importante campaña centrada en “la Casilla Empresa Solidaria”. ¿Qué balance hacéis de la misma?
Desde su nacimiento hace cuatro años, la Casilla Empresa Solidaria ha ido ganando reconocimiento entre el tejido empresarial de nuestro país y nos ha permitido ver que las empresas españolas están dispuestas a colaborar y trabajar junto a las entidades del Tercer Sector. Aunque todavía no contamos con datos oficiales de recaudación, creemos que la campaña de este año nos va a permitir mejorar los datos de años anteriores, pero además nos ha facilitado acercarnos más a las empresas.
La Casilla Empresa Solidaria se está situando como un ejemplo de inversión de impacto que permite a las empresas contribuir de un modo eficiente y eficaz al desarrollo sostenible de la sociedad. Además, cada vez más empresas quieren comunicar a sus públicos objetivos que forman parte de esta iniciativa y ponerla en valor.
¿Cuáles son los principales retos y desafíos a los que se enfrentan las organizaciones empresariales que quieran crear valor social con su actividad en los próximos años según vuestro parecer?
En un contexto complejo y cambiante, en el que vemos como crecen la pobreza y la desigualdad, creemos que las empresas tienen un papel fundamental para avanzar hacia esa sociedad que queremos, más justa, inclusiva e igualitaria. Cada vez más, las empresas son conscientes de que tienen una gran capacidad transformadora y que su propósito tiene que ir más allá de la rentabilidad económica.
Vemos cada día más empresas que apuestan por tener impacto positivo en la sociedad y en el planeta y creo que ese es el camino a seguir. Las empresas han de entender que tener impacto significa apostar por un nuevo modelo de relación entre las empresas y la sociedad, significa ir más allá del compromiso y entender que no vamos a acometer los desafíos sociales si no nos involucramos en la acción de manera conjunta.
Y, además, tanto el entorno legislativo como la ciudadanía en general esperan más que el mundo empresarial se involucre en los problemas comunes. Creo que el principal reto es tomar conciencia de los límites del sistema actual y de la necesidad de transformar sus fundamentos, estableciendo un equilibrio entre el impacto financiero y el social.
¿Qué importancia le dais a la comunicación y puesta en valor ante vuestros públicos de interés de vuestra labor?
Para el Tercer Sector, la comunicación, la transparencia y la rendición de cuentas son valores fundamentales que guían el trabajo de miles de entidades sociales. Es cierto que necesitamos comunicar más y mejor porque es preciso que la ciudadanía, el sector empresarial y otros agentes clave entiendan bien qué es el Tercer Sector, qué hacemos, cuál es nuestro propósito y cómo trabajamos para alcanzarlo.
Pero también es cierto que la comunicación de estas cuestiones es un elemento con mayor importancia para las entidades que además, resulta indispensable para el establecimiento de alianzas y la generación de confianza entre nuestros públicos de interés, empresas, donantes, personas socias, personas voluntarias… Porque cuanto mejor comuniquemos, mayor será el impacto de nuestro trabajo.
Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: La Casilla Solidaria de las Empresas