¿Qué es la Alianza Tecnológica por la Inclusión (ATI) y qué objetivos persigue?
Se trata de una propuesta de Plena inclusión España a las empresas tecnológicas y de base tecnológica en concreto, que defiende establecer el criterio de accesibilidad como un irrenunciable a la hora de diseñar, programar y producir una aplicación online, una web o cualquier dispositivo. Hablamos de un derecho fundamental, el del acceso igualitario a la tecnología, que hoy en día no se respeta en el caso de cientos de miles de personas con discapacidad intelectual o dificultades de comprensión.
Porque, hoy en día, la tecnología es la puerta por la que se accede a derechos tan importantes como: salud, empleo, ocio, vivienda, etc. Esto nos hace pensar en que las empresas deben ser aliadas de las personas con discapacidad en su derecho a acceder como el resto a la tecnología.
Uno de los argumentos de peso que sostienen esta campaña, junto al del caminar hacia la inclusión social plena, es que las empresas tecnológicas están descubriendo un nuevo nicho de mercado porque pueden sumar a sus clientes actuales a un número muy importante de nuevos compradores de sus productos y servicios.
El proyecto, que ha estado avalado por los fondos Next Generation y que ha contado con el apoyo del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, es reciente. Pero pese a su juventud ha logrado un significativo apoyo por algunas de las empresas españolas más pujantes en el sector tecnológico.
¿Qué empresas y organizaciones forman parte de la iniciativa?
En sólo tres meses de 2023 hemos logrado unir a 30 empresas a la Alianza. Y estamos hablando de nombres tan relevantes como: Samsung, Amazon, NTT, Accenture, BBVA y Fundación Telefónica, por poner algunos ejemplos. Pero también se han implicado con la causa entidades académicas como la Universidad Carlos III, el Instituto de Empresa (IE) o la Universidad Politécnica de Madrid.
¿Qué sinergias se generan entre las empresas participantes en la Alianza Tecnológica por la Inclusión (ATI)?
Precisamente, éste es uno de los grandes atractivos que revela el nacimiento de la Alianza Tecnológica por la Inclusión. En este tiempo hemos organizado reuniones presenciales y seminarios online que han permitido compartir experiencias de gran valor para las empresas participantes.
Porque hay quienes tienen experiencias de avance en términos de accesibilidad y esta es, sin duda, una oportunidad de aprendizaje para el resto de las empresas que inician ahora una senda en favor de la transformación de sus productos y servicios a otros más fáciles y manejables para todas las personas. También para aquellas que tienen dificultades de comprensión.
¿Qué otras iniciativas han planeado para combatir la brecha digital en España?
Bajo el paraguas del proyecto Transformación Digital para la Inclusión, que citaba con anterioridad, se han desplegado 14 acciones, en 9 CCAA, que abarcan desde la formación sobre competencias digitales a personas con discapacidad intelectual; cursos dirigidos a agentes públicos y comunitarios que les acercan la importancia del derecho a la accesibilidad cognitiva y les introducen la realidad de la discapacidad intelectual; la actualización de una App que informa a las personas con discapacidad sobre las ofertas de empleo público; o el desarrollo de una herramienta online que ayuda a profesionales y asociaciones a reducir o eliminar las restricciones que se aplican en residencias a personas mayores, con discapacidad intelectual o enfermedad mental.
Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: Empresas Tecnológicas por la Inclusión.
