Más allá de su conocido papel en la desinfección de piscinas y potabilización del agua, el cloro desempeña múltiples funciones en nuestra vida cotidiana. Por ejemplo, ¿sabías que también contribuye a reducir el peso de los vehículos? A continuación, exploraremos qué es el cloro, sus usos principales y algunas de sus curiosidades más impactantes.
El cloro, perteneciente al grupo de los halógenos (grupo 17) en la tabla periódica, se representa con el símbolo Cl y posee el número atómico 17. Su alta reactividad con diferentes compuestos y elementos químicos dificulta su presencia en la naturaleza en estado puro, ya que tiende a transformarse en sales y ácidos.
En su forma elemental, el cloro es un gas de color amarillo verdoso con olor desagradable. Al entrar en contacto con el agua, forma ácido hipocloroso (HClO).
Usos
La tendencia del cloro a combinarse con otros elementos y compuestos le otorga una amplia gama de aplicaciones en nuestra vida diaria. A continuación, veremos algunos ejemplos que ilustran cómo el uso del cloro contribuye a mejorar la calidad de vida de las personas.
El cloro como desinfectante
Antes de que se empezara a tratar el agua con cloro, esta podía transmitir numerosas enfermedades, como el cólera, la fiebre tifoidea y la hepatitis, cobrándose la vida de miles de personas. El cloro, más concretamente el hipoclorito sódico, destruye todo tipo de microbios garantizado su potabilidad, así como reduciendo su sabor y olor.
En Europa occidental, el 98% del agua ha sido desinfectada con cloro, según datos de la Organización Mundial de la Salud: “La desinfección con cloro es la mejor garantía del agua microbiológicamente potable”.
Otro de los usos del cloro se encuentra en los productos de limpieza. De hecho, quizás no lo sepas, pero el cloro es uno de los componentes principales de la lejía, cuya fórmula es NaClO, es decir, hipoclorito sódico.
Cloro en automóviles
En el sector del transporte, el cloro desempeña un papel crucial en la fabricación del nylon, un material plástico presente en numerosos accesorios de vehículos, como los cinturones de seguridad, airbags y salpicaderos. Esto contribuye a reducir el peso de los vehículos, disminuyendo así su consumo energético.
Otros usos del cloro
El cloro es un elemento químico esencial en la fabricación de gran cantidad de productos. Desde chalecos antibalas hasta aislantes de espuma de plástico para los sistemas de calefacción. Además, el cloro se utiliza en la producción de una amplia variedad de medicamentos y dispositivos médicos.
Curiosidades
Un elemento con tantos usos guarda más de una curiosidad fascinante. Hemos escogido las tres curiosidades del cloro principales:
Significado de cloro
Aunque los compuestos del cloro se han utilizado durante siglos, no fue hasta 1774 que Carl Wilhelm Scheele logró obtener cloro puro mediante la reacción de dióxido de magnesio con ácido clorhídrico.
Curiosamente, Scheele pensaba que era un elemento ya identificado, y no fue hasta 1811 que Sir Humphry Davy lo identificó como un nuevo elemento químico. Davy le dio a este nuevo elemento el nombre de “cloro”, procedente de la palabra griega chloros, que significa amarillo verdoso.
Cloro en las piscinas
En las piscinas, el uso de cloro es esencial para prevenir la proliferación de algas, hongos y eliminar organismos patógenos, garantizando unas condiciones higiénicas óptimas. A pesar de ser un producto bastante cotidiano, para manipularlo se deben seguir precauciones de seguridad, como usar guantes, evitar la mezcla con otras sustancias y almacenarlo en áreas ventiladas.
Tener controlada la cantidad de cloro en las piscinas es fundamental. De hecho, en el caso de las piscinas públicas la cantidad de cloro está regulada según la comunidad autónoma, variando entre 0,6 y 1 ppm. Su medición se realiza mediante kits tradicionales o medidores digitales.
El cloro y el color del pelo
Un mito común en verano es que el cloro de la piscina puede hacer verde el cabello rubio. Sin embargo, el culpable de este cambio de color es el sulfato de cobre, una sal también utilizada para el mantenimiento de las piscinas, que a menudo es de color azul. Cuando este sulfato de cobre azul entra en contacto con los pigmentos amarillentos del cabello rubio, genera el tono verdoso.
Precauciones
A pesar de ser un elemento ampliamente utilizado en nuestra vida cotidiana, el cloro, si no se maneja adecuadamente, puede provocar irritaciones en la piel, los ojos y el sistema respiratorio.
Es posible que te preguntes por qué el cloro, siendo irritante en contacto directo con la piel, se utiliza para tratar el agua que consumimos. Como siempre, la respuesta se encuentra en la fórmula y es que, para desinfectar el agua, la cantidad de cloro añadida es mínima. De hecho, según la Environmental Protection Agency (EPA) una concentración de hasta 4 partes por millón garantiza la seguridad del agua potable sin llegar a ser un riesgo para la salud.
Por otro lado, aunque el cloro en sí mismo no es inflamable, grandes cantidades pueden facilitar la combustión de otras sustancias, llevando a incendios o explosiones. En el caso de productos de limpieza con cloro, cuando se manipulan correctamente, entre un 95% y un 98% del cloro se termina descomponiendo, lo que significa que no facilita la combustión.
Ahora que ya conoces qué es el cloro y su importancia para una amplia variedad de aplicaciones, es esencial seguir las medidas de seguridad establecidas para su manejo y almacenamiento.
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