Asociación Educar para el Desarrollo Humano ubicada en Argentina apoya el proyecto de neuroeducación de la institución Educativa Rosedal que lleva por nombre “De cerebro a cerebro”.
Desde el mes de Septiembre del año 2017 esta prestigiosa entidad internacional que trabaja con colegios y universidades de cientos de países, está capacitando a 10 colaboradores de Rosedal mediante un curso de formación virtual donde cinco directivos, la psicóloga y cuatro docentes se forman en temas trascendentes orientándolos a aprovechar los saberes de la neurociencia para potenciar el aprendizaje de los estudiantes.
El pasado sábado 24 de febrero, el equipo capacitado desarrolló la primera jornada de réplica con los 48 docentes, abordando el primer acercamiento institucional a temas como generalidades del sistema nervioso, neuroplasticidad, neuromitos, etapas del aprendizaje, Potenciación y Depresión a largo plazo (PLP, DLP) – Etapa atencional, estrategias para convertir la información en conocimiento, atención y memoria; y clases cerebralmente amigables; jornada que recibió muchos elogios por parte del equipo docente, quienes demostraron mucho interés y aprendieron en medio del dinamismo y la experiencia.
El objetivo del proyecto es desarrollar estrategias orientadas a la potencialización de los jóvenes mediante la aplicación de un plan estratégico basado en la neuroeducación, y así, lograr ambientes emocionalmente favorables, dinámicos y amenos para el efectivo desarrollo del aprendizaje en los estudiantes de la Institución Educativa Rosedal.
En una famosa frase, el profesor Howard G. Hendricks expresó que “la educación que deja huellas es la que se hace de corazón a corazón. A nosotros nos gusta pensar en este proyecto, que además de esto, la educación que impacta es aquella que se hace ‘De cerebro a cerebro’. Pues cuando el docente ingresa al aula hay una comunicación que va más allá de la que se puede percibir a simple vista: sucede una danza de vibraciones, una puesta en escena de señales y códigos que se envían y perciben desde este órgano. Por tal razón, sabemos que la neurociencia nos ofrece un rico campo para explorar y hacer del colegio el mejor lugar para que nuestros docentes enseñen y nuestros estudiantes aprendan mejor y más felices”.
