Una de cada dos furgonetas eléctricas vendidas en 2023 en España fue una Ford E-Transit. Con un 54,9% de cuota de mercado, el vehículo comercial cero emisiones de Ford Pro se alza como el líder indiscutible en este segmento. En Europa, la Ford E-Transit se vendió más que su competidor más cercano por más de cinco a uno.
El paso a la electrificación es un movimiento imparable y con evidentes beneficios no solo en el campo de la sostenibilidad o la reputación empresarial; también desde una perspectiva económica. Ford Pro ha calculado que, para muchas empresas, cambiar de vehículos comerciales diésel a eléctricos resultaría más rentable de lo que pueden pensar. La nueva E-Transit, la furgoneta eléctrica más vendida en España en 2023, podría amortizarse en un periodo de 2,1 años.
Para llevar a cabo este cálculo, Ford Pro ha tenido en cuenta una serie de factores que incluyen el precio de compra del vehículo, los menores costes energéticos y de mantenimiento asociados a los vehículos eléctricos, así como el mayor valor residual asociado a estos últimos. Los vehículos eléctricos también tienen una menor carga fiscal que los de combustión, así como están exentos de las restricciones de acceso que los modelos de combustión viven en algunas ciudades.
Ayudar a empresas de todo tipo
De la mano de Reuters, Ford Pro llevó a cabo un investigación que revelaba que, aunque la mayoría de las empresas estaban considerando la posibilidad de comprar una furgoneta eléctrica en los próximos dos años, una parte significativa (el 46%) seguiría eligiendo un modelo diésel.
“Muchas flotas aún desconfían de la electrificación y buscan un socio de confianza que les ayude a descubrir las ventajas de los vehículos comerciales eléctricos y conectados”, ha dicho Hans Schep, Director General de Ford Pro en Europa. “Nuestro objetivo es ayudar a empresas de todo tipo; por ello, en Ford Pro ponemos a su servicio nuestra imbatible experiencia en el sector para acabar con los mitos, y mostrar a los clientes cómo los vehículos eléctricos podrían ayudar a su balance de resultados, así como reforzar su apuesta por la sostenibilidad”.
El año pasado, la E-Transit supuso más del 50% de las ventas de furgonetas eléctricas de dos toneladas en Europa, ayudando a la marca Ford Pro a conseguir su noveno año consecutivo de liderazgo en el mercado.
Ford Pro utiliza su propio software y su conocimiento inigualable dentro del sector del vehículo comercial eléctrico para calcular y mostrar a los clientes las ventajas económicas de la electrificación.
Umbral de rentabilidad a los 2,1 años
Los operadores que se pasen al vehículo eléctrico en España podrían alcanzar el umbral de rentabilidad a los 2,1 años después de la compra. Cuando vendan su furgoneta, los operadores podrían haber obtenido un ahorro total de más de 12.304 euros en costes de energía y 732 euros en gastos de mantenimiento. Además, sus emisiones de CO2 se reducirían en más de 24 toneladas; alrededor de un 79 por ciento menos que con un modelo diésel equivalente.
Las ayudas a la compra podrían acortar aún más el periodo de amortización. Además de la subvención de 7.000 euros del Plan MOVES para la compra de un vehículo eléctrico sin necesidad de entregar otro para achatarramiento, los operadores también disfrutan de otras ventajas operativas, como la ausencia de restricciones a las zonas de bajas emisiones, mayor tiempo en las zonas de carga y descarga, o una menor presión fiscal.
Por otra parte, muchos empresarios están considerando la adquisición de un vehículo eléctrico debido al significativamente inferior gasto de mantenimiento, el cual se reduce hasta en un 40%. A esto se une el ahorro que supone el coste de la luz con respecto al del combustible.
Muchos operadores consideran el mantener sus vehículos eléctricos durante más tiempo que los vehículos diésel, ampliando el período en propiedad de tres a cinco años, debido al menor gasto en mantenimiento que estos conllevan. En estos dos años de menor gastos en combustible y mantenimiento, las empresas seguirían ahorrando.
Ford Pro y Reuters se asociaron para elaborar el informe Vans In The City. En él se detallan los retos a los que se enfrentan las empresas y las ciudades, así como sus preocupaciones de cara al futuro y las posibles soluciones a estos problemas.
Un hallazgo clave es que, a pesar de que casi dos tercios de los encuestados confían en los menores costes operativos de los vehículos eléctricos, y de que cada vez más ciudades limitarán el uso de los vehículos de combustión, de cara a los dos próximos años, el 46% de las empresas aún no se plantea comprar una furgoneta eléctrica. Sin embargo, los últimos datos de Ford Pro sugieren que seguir empleando vehículos diésel podría costar miles de euros a las empresas, y con ciudades de toda Europa como Atenas, París y Roma anunciando prohibiciones al diésel, los vehículos comerciales eléctricos se vuelven aún más atractivos.