La empresa de paquetería GLS avanza un paso más en su propósito de conseguir un futuro más verde para las próximas generaciones. Con este motivo, la compañía lanzó en julio Climate Protect, un ambicioso plan global que abarca una serie de iniciativas dirigidas a la reducción y compensación de las emisiones derivadas de su actividad, cuya meta es alcanzar la neutralidad climática entre 2045.
El compromiso del GLS con la protección del clima y la sostenibilidad en la entrega de paquetes se remonta a 2008, año en el que nació la iniciativa ambiental ThinkGreen, con el objetivo de coordinar y fomentar las diferentes actividades de carácter sostenible de la compañía. Ahora, con el nuevo programa Climate Protect, la compañía da respuesta a una nueva fase de desarrollo del sector y a la necesidad de profundizar en el compromiso medioambiental del Grupo.
El programa desarrolla principalmente las siguientes medidas con la ambición de logar la neutralidad climática en 2045 a partir de la compensación y reducción de emisiones:
- 100% uso de energía verde en todas sus instalaciones
- Cambio de la flota a vehículos libres de emisiones
- Edificios de nueva construcción sostenibles bajo norma BREEAM
- Cálculo de la huella de carbono desde la producción del fuel hasta el consumo (Well-to-Wheel)
Un eje prioritario del programa, y que se ha iniciado recientemente, es la compensación de las emisiones producidas por la actividad de la compañía a través de la inversión en proyectos de reforestación o el desarrollo de fuentes sostenibles de energía en diversos países del mundo como Perú, Brasil o India. Estos proyectos están acreditados por su partner global Climate Partner, una multinacional especializada en el cálculo y reducción de emisiones de CO2 que ofrece servicio a más de 4.000 compañías de 35 países y desarrolla más de 100 proyectos de compensación.
Además, la protección del medio ambiente se recoge también en el Código de Conducta de la compañía y su sistema de gestión medioambiental está certificado conforme a la norma ISO 14001, que acredita que el Grupo GLS ha establecido procesos destinados a reducir los efectos medioambientales de sus actividades empresariales, tanto en sus compras como en las actividades operativas.
Su filial española, GLS Spain, ya ha realizado avances siguiendo la nueva estrategia ambiental del Grupo. Por ejemplo, identificando y evaluando los principales riesgos ambientales, abriendo el primer Parcel Shop sostenible en Madrid y siguiendo los parámetros establecidos por la normativa BREEAM en gran parte de las instalaciones que actualmente están en construcción.
“Somos conscientes del gran impacto que nuestra actividad genera en el medio ambiente. Por ello, con el programa Climate Protect, promovemos iniciativas que impliquen a toda nuestra cadena de valor y garanticen un futuro sostenible y la protección de nuestro entorno natural”, afirma Roberto Martínez, Chief Financial Officer de GLS Spain.