Con motivo del Día Mundial de la Eficiencia Energética, que se celebró el pasado 5 de marzo, AENOR subraya la contribución de esta norma al impulso de una cultura del ahorro energético así como los beneficios económicos derivados de su certificación.
La aplicación de esta norma ha conseguido generar a las organizaciones un ahorro sistemático de entre el 5% y el 30% del coste energético, según un reciente balance realizado por la Organización Internacional de Normalización (ISO). Además, esta norma ayuda a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Las empresas españolas son las sextas del mundo y terceras de Europa por número de certificados de Gestión de la Energía según UNE-EN ISO 50001, con 390 certificados, dato muy destacado teniendo en cuenta el tamaño del parque empresarial español. Además, 9 de cada 10 organizaciones que utilizan esta norma la recomiendan y el 95% de los usuarios dicen que les ayuda a identificar las actividades que consumen más energía, según ISO.
Desde su aparición, esta norma ha contado con el respaldo de las organizaciones y países como un sólido apoyo para avanzar hacia un futuro de energía sostenible. Por ejemplo, la Conferencia Ministerial de Energía Limpia (CEM) ha puesto en marcha una iniciativa para lograr hasta “50.001” certificados conforme a esta Norma antes de 2020. Además, Alemania ha puesto en marcha un plan de incentivos fiscales para animar a las empresas a certificarse.