Esta investigación aparece en un momento en que nuestro país está por detrás de la mayoría de los países de la Unión Europea en cuanto a recursos geriátricos, a pesar de que, según los datos del último padrón municipal, un 16,8% de la población española es mayor de 65 años (siendo un 1,9% mayor de 85 años)– con un incremento de 1.281.262 personas en los últimos 10 años.
La rueda de prensa que tendrá lugar mañana a las 11.00 h. en el Casino de Madrid, sala Neptuno (calle Alcalá, 15), donde participarán los doctores Isidoro Ruipérez, presidente de la SEGG; José Antonio Serra, jefe del Servicio de Geriatría del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, ambos coordinadores del estudio, y Ramón Portillo, director de la Unidad del Sistema Nervioso Central de Novartis en España.
Esta investigación tiene el objetivo de disminuir la variabilidad y unificar criterios existentes entre unas comunidades autónomas, y otras diferencias respecto al manejo clínico de los pacientes y en cuanto a la utilización de los procedimientos diagnósticos y terapéuticos más adecuados. El desacuerdo en cuanto a las medidas a adoptar es palpable incluso entre unos centros de salud y otros.
Nos encontramos ante una situación de demanda creciente de servicios asistenciales y sociales para la población geriátrica. Además, el paciente geriátrico es un paciente complejo; la edad, su frecuente condición de dependencia y el hecho de que, en muchos de los casos, presenten estados pluripatológicos crónicos hacen que el garantizar una óptima asistencia geriátrica suponga todo un reto para los servicios sanitarios y sociales.
El desarrollo de estos estándares se ha basado en una revisión de la bibliografía nacional e internacional como punto de partida para identificar y seleccionar los indicadores que posteriormente puntuaron un panel de expertos mediante el método Delphi.