Tres jornadas, más de 40 actividades, más de 50 ponentes y artistas, más de 1.800 asistentes. Esas son las cifras que ha arrojado La Gran Kedada Rural 2024, pero lo de menos son los números. La tercera edición presencial de este encuentro (la cuarta si se tiene en cuenta el evento online de 2021) ha logrado cumplir su auténtico objetivo: consolidarse como espacio de encuentro, aprendizaje y conexiones para emprendedores, organizaciones e instituciones que trabajan en y por el mundo rural.
“Nuestro propósito no es que crezca más, sino mantener un ambiente familiar y propicio en torno a un programa muy cuidado para que las personas que vienen se sientan en casa, se relacionen, hagan contactos, aprendan, se inspiren y experimenten eso que ya todo el mundo conoce como el Espíritu Kuartango: una manera de entender y vivir la ruralidad de forma positiva, aparcando estereotipos negativos, visibilizando las muchísimas oportunidades de nuestros territorios, con optimismo, sostenibilidad, innovación y esperanza. Y justo eso es lo que nos ha transmitido la gente, así que estamos felices, con una resaca emocional enorme”, destaca Ivan del Caz, director de Rural Citizen, proyecto bajo cuyo paraguas se desarrolla La Gran Kedada Rural.
Canarias, Andalucía, Galicia, Asturias, Extremadura, Burgos, Aragón, Valencia, Madrid… En estos tres días han pasado por Kuartango personas de todos los rincones de la geografía española, “e incluso hemos recibido la visita de una pareja de Brasil y una persona de Londres que han venido expresamente a conocer lo que aquí se monta”. Un microcosmos en el que se mezclan agricultores, ganaderos, nómadas digitales, pequeños emprendedores con proyectos rompedores en áreas tan diversas como el arte, el turismo o la comunicación, especialistas en sostenibilidad e innovación social, asociaciones de desarrollo local, representantes de fundaciones y grandes compañías, así como personas procedentes de la ciudad con curiosidad por descubrir una Nueva Ruralidad.
La Gran Kedada Rural se ha consolidado, en definitiva, como una cita de referencia para el ecosistema rural estatal, pero también para quienes desde el mundo urbano quieren construir nuevas relaciones con los pueblos. Por eso, ya hay fecha para el año que viene: será el 26, 27 y 28 de septiembre de 2025.
En esta edición ha estado el secretario general para el Reto Demográfico del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Paco Boya, así como representantes del Pacto Rural Europeo, de Redeia o Repsol, lo que ayuda a poner Kuartango, Álava y Euskadi en el mapa. Además, ha sido escenario del Evento Final del Desafío Ashoka Changemakers, programa referente a nivel mundial en emprendimiento social impulsado por Ashoka e Ikea dentro de su Plan Allen.
“Esto pone de manifiesto la repercusión creciente de La Gran Kedada Rural y cómo se van consiguiendo los objetivos. En las primeras ediciones venía más gente por los conciertos del sábado. Este año, en cambio, casi todo el mundo aterrizó el viernes, que es la jornada más importante para nosotros, y se ha quedado los tres días”, resalta Ivan del Caz.
El director de Rural Citizen se refiere a la Jornada Talento, que fue este viernes 27, y acogió mesas redondas en torno a temas candentes como la energía o la industria, talleres de emprendimiento con impacto positivo y presentaciones de iniciativas rurales disruptivas, además del ya consabido espacio de conversación con Jordi Évole, que no se ha perdido ninguna cita desde la edición 2022. “Esta jornada es clave tanto por los asuntos que se abordan como por los espacios de relación que se generan como por el perfil de los ponentes. Por eso, nos satisface enormemente que el grueso de las personas asistentes a La Gran Kedada Rural estuviera ya por aquí desde el primer día, desde primera hora, y se quedara hasta el final llenando de alegría cada rincón”, subraya.
La emoción ha arrasado todos los espacios de La Gran Kedada Rural. “Gracias” es la palabra que más se ha repetido, tanto por parte de ponentes y artistas, como de público, a lo largo de tres jornadas en las que también ha habido muestras artísticas tan singulares como la intervención realizada ex profeso por Juan Miguel Cortés, la decoración interior de Nacho Arantegui, la exposición y espacio fotográfico de Nomad Studio, el acústico de Depedro, el recital poético de El Naan, los conciertos de Demode Quartet y The Allnighters, el karaoke con Los Niños Jesus, un rincón literario organizado por Uzanza Editorial, teatro, talleres tecnológicos con BIC Araba y Wikimedia, actividades en contacto con la Naturaleza como una observación guiada del cielo nocturno con las astrofísicas de Allande Stars, baños de bosque, paseo botánico, feria de artesanía…
“Todos los años procuramos ofrecer un programa de calidad y sorprender, pero al final lo que hace grande la Kedada Rural es la entrega y el cariño de la gente, todas esas conversaciones, risas y abrazos, momentos de maravillosa complicidad entre actividad y actividad”, insiste Ivan del Caz, quien también destaca el impacto positivo que La Gran Kedada Rural tiene para el tejido económico del Valle de Kuartango y la comarca de Añana.
Además, La Gran Kedada Rural sigue dando la oportunidad de visibilizar su sede: Kuartango Lab, antiguo balneario reconvertido en centro de innovación, emprendimiento y experimentación, donde ya hay asentadas 12 empresas y sigue dotándose de contenidos. “Se trata de un ambicioso proceso de rehabilitación e innovación que ha sido reconocido a nivel europeo”, matiza Ivan del Caz.
La Gran Kedada Rural 2024 ha sido patrocinada por el Gobierno Vasco, la Diputación de Álava, el Ayuntamiento de Kuartango, Fundación Vital Fundazioa y Redeia. Pero también ha recibido muchos apoyos locales y nacionales. Las organizaciones colaboradoras han sido Ashoka, Wikimedia España, la Red PAC, Last Tour, Gasteiz On, la Asociación de Desarrollo Rural Añana, Grupo ESA y DNP Photo Imaging. Asimismo ha contado con los media partners Diario de Noticias de Álava, Pueblos y Corresponsables, y el respaldo de todas las organizaciones colaboradoras de Rural Citizen; esto es, la iniciativa creada por la cooperativa BIKO para la activación del mundo rural e ideóloga de este singular evento.
“Ahora bien, no podemos terminar sin dar las gracias a los voluntarios y voluntarias que día a día, desde primera hora hasta la última, nos ofrecen su apoyo desinteresado para que La Gran Kedada Rural funcione. El compromiso de todas estas personas del Valle es clave para poder seguir adelante”, concluye la organización.
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