Ignacio Elola, consejero delegado del Grupo Lactalis Iberia, ha hablado con Corresponsables sobre la publicación del Informe de Responsabilidad Social 2021 de la compañía, en el que la empresa láctea líder en el sector afianza su apuesta por un modelo de negocio más responsable y sostenible con el medio ambiente.
¿Cuál es la visión del Grupo Lactalis de la Responsabilidad Social y la Sostenibilidad?
El Grupo Lactalis entiende la Responsabilidad Social Corporativa como un modelo de producción, de gestión de negocio y una cultura empresarial que está orientada a incrementar la contribución que generamos como compañía, y a disminuir los impactos negativos que cualquier actividad económica o industrial puede tener en el entorno. Intentamos que esta cultura quede imbuida no solo en las áreas de producción, sino también en todo lo que tiene que ver con el buen gobierno.
La sostenibilidad en la compañía se fundamenta en tres ejes importantes que hemos fijado para los próximos años. El primero de ellos es el bienestar animal, y todo lo que tiene que ver con la producción y el medio rural. Otro aspecto fundamental es la disminución de la huella de carbono, del CO2. Finalmente, el tercer pilar es trabajar en envases, ecodiseños y embalajes mucho más sostenibles, reciclados y reciclables, que permitan dos cosas: asegurar la calidad de nuestros productos y reducir el impacto de estos materiales en el medio ambiente.
Uno de los pilares de sus políticas es la protección de la tierra y de sus recursos, ¿cómo se materializa este compromiso?
Con un aspecto prioritario: la proximidad. Cuatro de nuestras ocho fábricas están en entornos rurales, en poblaciones de menos de 25.000 habitantes, y eso marca mucho la estrategia que seguimos. Porque para nosotros es fundamental que la materia prima con la que trabajamos, que es la leche, sea fresca y tenga un recorrido escaso desde el momento que se produce hasta que se envasa. Por lo tanto, lo primero son los recorridos o ciclos cortos que permitan una disminución de la huella de carbono.
Pero, sobre todo, lo más importante es garantizar que esa materia prima que trabajamos sea de una calidad extraordinaria. Para ello, hemos hecho muchísimas cosas, como por ejemplo, fuimos pioneros en el lanzamiento y desarrollo de leche ecológica. Hemos ido mucho más allá y, hoy en día, somos la compañía que tiene más ganaderos certificados en bienestar animal. Prácticamente el 80% de nuestros ganaderos, unos 1.500, están certificados con el “Animal Welfair”, algo muy importante para nosotros.
Recogemos casi mil millones de litros de leche al año y somos el principal recogedor de una materia prima tan importante como es la chufa. El 50% de la chufa que se maneja en nuestro país la recogemos nosotros. Cuando trabajamos con materias primas tan sensibles, la proximidad es un elemento muy importante que permite estar muy cerca del productor, para ayudarle a desarrollar, a mejorar y, por lo tanto, a asegurar su futuro. Consiguiendo también disminuir la huella de carbono asociada a cualquier tipo de actividad como esta.
Como actores clave del sector lácteo, ¿qué desafíos cree que son los principales en el ámbito del bienestar animal y de la ganadería en su conjunto?
Fundamentalmente, creo que tenemos que certificar las granjas en bienestar animal y asegurar su viabilidad y los proyectos de futuro. Pensamos que uno de los grandes desafíos que tiene la actividad ganadera, no solo en España, sino también el resto de Europa, es la sostenibilidad y continuidad de las explotaciones. Para ello, hay que ofrecer un futuro y una visión de que esa actividad que es tan dura y difícil -y no siempre muy agradecida- tiene la posibilidad de continuar desarrollándose. La certificación en bienestar animal y nuestro proyecto de compañía (llevamos instalados en España más de 40 años) son aspectos que permiten a los ganaderos, y al entorno, tener una visión de futuro.
Gran parte de su inversión en investigación y desarrollo se destina su apuesta por el ODS 3 de Salud, ¿qué objetivos se han alcanzado?
El objetivo del que me siento más orgulloso es la reducción de los accidentes laborales. El hecho de que en los últimos años hayamos sido capaces de reducir en un 14% los accidentes laborales que sufrimos en las plantas es un hito significativo. Sobre todo, porque teníamos una base de partida muy positiva, pero hemos seguido trabajando en ese punto.
En relación a las personas consumidoras y a su salud, también destacaría que el 80% de los productos de Grupo Lactalis son alimentos de consumo diario, y elaborados de una forma muy sencilla, con muy pocos ingredientes: leche, yogures, quesos, mantequillas o nata. También es algo de lo que uno puede sentirse orgulloso.
Hemos trabajado muy fuerte en la disminución del azúcar añadido en nuestros alimentos. Hemos ido más allá de los compromisos que se adquirieron hace unos años con las autoridades, y hemos sido capaces de eliminar azúcar añadido en el 57% de las referencias. Como dato, nuestros productos lácteos no pasan del 5% de la cantidad de azúcar diaria recomendada. Es decir, son sanos y son buenos.
Además, estamos avanzando en el cumplimiento de esos compromisos adquiridos. Para ello, continuamos trabajando en I+D, en productos sanos y saludables, pero también, lógicamente, en productos seguros. Esas tres eses marcarían los ejes que nos marcamos como compañía.
Dentro de su compromiso con las personas, ¿cuáles son las líneas clave de la estrategia de Recursos Humanos para los dos próximos años?
Considero que cualquier estrategia de recursos humanos está basada, en primer lugar, en un liderazgo claro, extendido en la organización y basado en nuestros valores: compromiso, ambición y sencillez. Ese liderazgo tiene que imbuir a toda la compañía y ha de extenderse, no solo a nivel de comité de dirección y management, sino a todos los niveles. Creo que hay dos aspectos importantes, que son la retención y atracción de talento.
Para retener talento lo primero es asegurar y reducir los accidentes laborales; este es un aspecto muy importante para nosotros. Lo segundo es la formación continua, dedicamos un 1% de nuestra masa salarial a formación. Más de 45.000 horas de formación anuales nos permiten hacer que nuestros colaboradores estén siempre al día en aspectos tecnológicos, o de investigación y desarrollo. También es muy importante la promoción interna. Es muy motivador para alguien que trabaja en una compañía ver que cuando se abre una posición o una vacante, esta se cubre con personas de esa misma empresa. Si ese trabajo que hacemos en liderazgo, valores o formación luego no se materializa en una promoción interna, el modelo es difícilmente creíble.
Por último, para lograr una atracción de talento, hay que trabajar para ser una compañía atractiva y que sea capaz de ofrecer un proyecto. Lactalis es una compañía que el año que viene cumple 90 años a nivel mundial, y 40 años en España. Es una compañía familiar que ofrece un proyecto muy interesante para la gente que quiera tener una carrera en un mundo como es el del gran consumo, la alimentación, o los lácteos, un mundo apasionante y que ofrece proyectos de futuro para la gente.
¿Qué buenas prácticas tienen en marcha en sus políticas de acción social?
Intentamos abarcar una gran cantidad de aspectos. Uno de ellos es la donación de alimentos. Nuestro compromiso contra el desperdicio alimentario es ya una larga tradición, e intentamos evitar cualquier tipo de desperdicio. Trabajamos con los Bancos de Alimentos y con distintas asociaciones para donar alimentos y permitir que esos excedentes que se producen (y que intentamos reducir, pero desafortunadamente no siempre es fácil de hacer) tengan un buen fin. Es algo de lo que estamos tremendamente orgullosos.
El segundo es que la propia actividad económica de una compañía como la nuestra está instalada, fundamentalmente, en poblaciones pequeñas, lo cual nos permite fijar empleo y lidiar con el problema de la llamada España vaciada. Esto es algo que forma parte de la acción social que tenemos como compañía.
Otro aspecto que podría mencionar es todo lo que tiene que ver con diversidad. Tenemos más de 40 nacionalidades distintas en nuestras fábricas, de distintas generaciones. Creo que ese es un elemento que también nos hace diferentes y del cual nos sentimos muy orgullosos.
En lo que se refiere a la contribución a la comunidad, también me gustaría añadir las prácticas de voluntariado, que no nacen como una iniciativa de la propia compañía sino de los empleados. Algo que me llena de orgullo, porque es muy importante escuchar a los empleados y sentir que la gente con la que trabajas tiene unas inquietudes que van más allá de la relación laboral. Y que nos unen en proyectos y actividades que son muy importantes, y que crean unas relaciones fuera del ámbito de trabajo. Algo que acaba consolidando ese modelo de relación que nos gusta en Lactalis.
¿Cómo desarrollan la comunicación con sus grupos de interés?
Lógicamente, tenemos que abarcar una gran multiplicidad de interlocutores. Empezaré por el más importante que son nuestros colaboradores, el personal. Hemos trabajado muchísimo en los últimos años en la comunicación interna. Es evaluada de forma periódica para estar siempre ofreciendo lo mejor, a través de los mejores medios y con la información que realmente les preocupa; a través de documentos internos, de encuestas, y de puntos de encuentro en los que comunicamos la situación.
Hoy en día, la tecnología ofrece la capacidad de llegar a todos los colaboradores cuales quiera que sean y donde quiera que estén, pero, al final, también la proximidad es muy importante. Intentamos estar muy cerca de los equipos y trabajar con las personas para que entiendan cuál es el proyecto de la compañía.
En segundo lugar, los consumidores. Estos son la razón de ser y a quienes nos debemos. A través del servicio de acción cliente o de servicios al consumidor, y a través de la propia comunicación y publicidad que hacemos, intentamos explicar cuál es nuestro proyecto, nuestro modelo de negocio y qué ofrecemos como compañía de alimentación.
Nos dirigimos a nuestros clientes, a quienes nos debemos también, con reuniones periódicas y distintos foros en los que participamos y en los que somos muy activos.
Luego, los medios de comunicación, de quiénes intentamos estar muy próximos con encuentros y notas de prensa, que nos permiten explicar quiénes somos. Y que se comprenda muy bien que en nuestra compañía, más allá de transformar una materia prima como la leche y de ser capaces de envasar y elaborar todos esos fantásticos alientos que tenemos, existen otros proyectos e inquietudes, otra visión que se extiende más allá y que permite hacer de Lactalis una compañía líder. No solo desde el punto de vista de productor, sino en la forma de hacer las cosas, que está basada en el compromiso comentado anteriormente.
También existe una agenda institucional, que en los últimos años está siendo muy intensa, debido a la cantidad de normativas y reglamentos que llegan en multitud de aspectos que nos atañen. Y debo reconocer que tenemos una interlocución muy fluida y, afortunadamente, contamos con interlocutores que nos ofrecen una gran seguridad.
Lactalis impulsa el buen gobierno como generador de valor. ¿Qué mecanismos han puesto en marcha para su fomento y garantía?
Para nosotros es fundamental, trabajamos en el buen gobierno desde hace muchos años. En 2020 nos certificamos con la ISO 19601, que tiene que ver con sistemas de gestión de cumplimiento penal. Y nos hemos dotado de todos los elementos necesarios, desde la Comisión de Cumplimiento Normativo, hasta todos los canales de denuncia que nos permiten asegurar que nada de lo que hacemos está fuera de la ley. Todos los que colaboran con nosotros, tanto clientes como proveedores, tienen los elementos suficientes para sentirse cómodos trabajando con nosotros, sabiendo que no estamos violando ningún tipo de ley y que cumplimos todas las normativas establecidas.
Este el tercer informe de Responsabilidad Social consecutivo que presentan, ¿qué retos de futuro han identificado?
El principal reto que tenemos es continuar con este proyecto de compañía familiar. El año que viene cumplimos 90 años y ya estamos pensando en el centenario, porque una compañía como la nuestra tiene siempre una visión de futuro.
En España cumplimos 40 años, con lo cual, lo más ambicioso es continuar ganando cuota de mercado para ser todavía más relevantes, para que nuestros productos y marcas estén presentes, para que los consumidores puedan incluir esos tres lácteos al día en una dieta equilibrada, y para que nuestros valores como compañía se reafirmen en la sociedad.
Queremos trabajar en la mejora continua de los procesos, ayudar a nuestro entorno, a nuestros colaboradores y ganaderos a tener modelos sostenibles, desde el punto de vista medioambiental y económico. Y continuar trabajando en la prevención, en la búsqueda de nuevas oportunidades, en esa agenda de gestión responsable, a través de nuestros valores de compromiso, ambición y sencillez.
Hemos fijado tres objetivos muy importantes. Uno es la descarbonización: eliminar la huella de carbono. Este año hemos disminuido de una forma muy significativa el CO2. Nuestros productos han reducido, respecto al año anterior, un 50% las toneladas de CO2 por producto terminado. Son casi 100.000 toneladas menos de CO2 en el último año.
El segundo objetivo es trabajar en el bienestar animal, y que el 100% nuestros ganaderos estén certificados en bienestar animal. Hoy somos la compañía con más ganaderos certificados, pero queremos llegar a cubrirlos a todos.
Por último, trabajar en el fomento de un packaging sostenible y que permita proteger de una forma adecuada, y ofrecer a nuestros consumidores productos seguros.
En esas líneas estamos trabajando, y esos son los principales elementos que tenemos como parte de nuestra estrategia, y a los que nos vamos a dedicar en los próximos años.
Escucha aquí la entrevista completa con el protagonista:
Accede a más información responsable en nuestra biblioteca digital de publicaciones Corresponsables.