Entrevistamos a Juan Antonio Luque, Director de Procesos y ESG de Hábitat Inmobiliaria que nos cuenta cómo la ESG se ha convertido en un eje transversal en la compañía y el reto al que se han enfrentado sobre cómo ofrecer un producto sostenible sin trasladar incrementos de costes a los clientes.
¿Qué iniciativas o proyectos puede compartir del desarrollo e implementación de la estrategia ESG de Hábitat Inmobiliaria? ¿Cómo lo están llevando a cabo?
Disponemos de un Plan estratégico, que comprende el periodo 2022-2030, en el que se recoge las 3 grandes líneas de acción de la estrategia ESG de la compañía y en el que planteamos una serie de objetivos y acciones. A lo largo de los años, lo que hacemos es incorporar nuevas iniciativas y mantener las que ya estábamos llevando a cabo.
Este año, hemos incorporado en las licitaciones con nuestros proveedores clave los criterios de evaluación o comportamiento de los trabajos previos, además de los criterios económicos y técnicos. También, hemos incorporado un apartado de ESG y hemos valorado criterios en las tres áreas: social, gobierno y medioambiental.
En esta línea, AENOR ha lanzado el sello de edificio sostenible por primera vez, y a nosotros nos parce fundamental, que exista este sello promovido por una empresa española con tanta repercusión y reconocimiento interno. Hemos sido la primera promotora inmobiliaria, junto con Pryconsa, en certificar una promoción, en este caso, en fase de diseño con AENOR.
Esperamos que esta iniciativa, sirva para que en el futuro podamos desarrollar más promociones con este certificado tan exigente de edificio sostenible.
Este año, hemos puesto foco en otra variable fundamental que es la parte social. En Habitat, las acciones sociales se dividen en varios apartados: la sociedad o comunidad local, los empleados y el cliente. En este último punto nos dimos cuenta de que lanzábamos iniciativas sin seguir un orden. No disponíamos de un espacio de reflexión, debate y poner foco exclusivo en el cliente pensando en sus necesidades, expectativas, y en lo que espera de nosotros.
Este año, hemos puesto en marcha el Comité del Cliente donde nos centramos exclusivamente en el cliente, y en el que nos planteamos cómo mejorar esa relación y experiencia que tiene con la compañía.
Además, hemos puesto en marcha el “Bosque Hábitat”. Se trata de una iniciativa que desarrollamos en colaboración con Bosquia, y consiste en que por cada vivienda entregada, plantamos un árbol que luego se certifica personalmente para cada cliente. Es una iniciativa enmarcada dentro de las acciones de compensación de CO2. Lo hemos llevado a cabo en el 100% de las viviendas entregadas este año. Se han plantado casi 1.000 árboles, que son las viviendas que hemos entregado en 2022.
En esta línea, hemos lanzado por primera vez un Plan de Movilidad Sostenible para empleados. Con este Plan incentivamos el uso de transportes menos contaminantes en el desplazamiento del empleado desde su vivienda hasta la oficina. Lo hacemos para animar a los empleados a que compartan su vehículo con otros compañeros, los que tienen un vehículo particular se pasen al transporte público o fomentando el teletrabajo.
Este año nos hemos incorporado al Rating de Sostenibilidad por primera vez. Se trata de un rating internacional con mucho reconocimiento. Hemos quedado los terceros a nivel mundial dentro del área de la promoción inmobiliaria residencial.
¿Cómo trasladan desde la dirección las metas y obligaciones adquiridas en estas materias a todos sus grupos de interés?
Uno de los principales grupos de interés son los empleados. A nivel empleado, una de las cosas en las que ponemos el foco este año, es vincular a todo el personal directivo y de gerencia una parte de la retribución variable de los empleados de la compañía a objetivos concretos de ESG. Es una forma de trasladar esas obligaciones a todo el personal.
Contamos con un Comité ESG donde está presente el CEO de la compañía, y en el que se demuestra el compromiso adquirido con todo el ámbito ESG de Hábitat. Empelamos con frecuencia los canales de comunicación internos, especialmente la Intranet, donde se publican muchas noticas y recomendaciones. Lo tenemos muy enfocado a la parte de salud, diversidad, igualdad y compliance. Somos muy activos.
Periódicamente, hacemos sesiones específicas de ESG donde comunicamos, a toda la plantilla, las iniciativas que tenemos en marcha y recordamos el Plan Estratégico que está en vigor hasta 2030. De esta forma, el equipo conoce lo que la organización está haciendo en todos estos ámbitos.
A nivel externo, hay iniciativas localizadas en el grupo de interés general como la publicación, en nuestra web, de todas las Memorias de Sostenibilidad que hemos elaborado en los últimos años. Son de difusión pública. La Memoria de 2022 la publicaremos en el mes de abril. También lanzamos todas nuestras políticas como la ESG, medioambiental, seguridad y anticorrupción. Disponemos de los medios habituales de comunicación y estamos presentes en ellos a través de la publicación de notas de prensa, etc. Procuramos ser bastante activos en aquellos foros en los que podamos aportar nuestra experiencia ESG.
Dentro de nuestro pack de bienvenida que le entregamos a los clientes, incorporamos un documento con las recomendaciones para hacer un uso eficiente de la vivienda, especialmente en temas de consumos, residuos, de ahorro energético etc. Estas recomendaciones no solo tienen un impacto positivo en el medioambiente, también ayudan a los clientes a nivel de ahorro.
A nivel proveedores, aplicamos dos vías. Una es a través de la homologación. Dentro de estos criterios, les requerimos documentación de distintos ámbitos ESG. Este año hemos organizado un evento presencial dirigido a nuestros proveedores clave y actores del sector, con el objetivo de contarles todas las iniciativas ESG que llevamos a cabo y el Plan Estratégico, y así tengan una idea de hacia dónde nos dirigimos, y hacia dónde se dirige el sector. Los promotores inmobiliarios no podemos funcionar de manera aislada. Necesitamos estimular a nuestros proveedores para que todos se involucren en esta rueda.
¿Qué retos han tenido que afrontar para hacer de Hábitat Inmobiliaria una empresa más responsable y sostenible?
A nivel personal, la tarea es muy sencilla porque forma parte del ADN de la compañía. Es un tema de convicción, más que de obligación. La colaboración de todas las áreas que intervienen en la ESG es algo muy transversal en la compañía.
El reto ha sido cómo ofrecer un producto sostenible sin trasladar incrementos de costes a los clientes. Este año han tenido lugar dos circunstancias agravantes, por un lado, el incremento del coste general de la construcción, que comenzó en el año 2021, y que tiene una repercusión en el precio de la vivienda, y el incremento de los intereses que ha tenido una repercusión importante en los costes de financiación de las empresas.
Hay dos costes ajenos a Hábitat que repercuten en el precio de la vivienda, y ha sido un reto no incrementar el coste adicional, manteniendo un producto que sea sostenible.
Mirando hacia el futuro, ¿cuáles son los próximos desafíos?
Tenemos un desafío con los clientes, y para ello es necesario aplicar mucha labor pedagógica para conseguir dos objetivos: primero, para que valoren el valor añadido que es tener una casa que sea sostenible, y en segundo lugar, para que distingan lo que es sostenible de lo que no lo es.
Otro reto relevante está relacionado en conseguir que la sostenibilidad sea sostenible en el sector inmobiliario. Es necesario desarrollar materiales y productos que sean sostenibles, pero que no supongan un incremento de precio, y eso solo se consigue con mucha innovación.
Esto ha sucedido con el sector del automóvil. El mismo vehículo con un motor de combustión y con un motor eléctrico supone un incremento del 50% en el precio. Es un desafío muy importante para todo el sector de la construcción, y por ello es fundamental conseguir que más productos tengan declaraciones ambientales de producto sostenible. Tenemos que crear más productos y sistemas que podamos incorporar en nuestros edificios y que no supongan un incremento de coste, y sean sostenibles.
El siguiente desafío es adaptarnos a todas las legislaciones europeas, cada vez más exigentes. Hay varias directivas y reglamentos que ya se han lanzado como el de Reporting en Materia de Sostenibilidad o el de Taxonomía Verde, además de varios que están de camino como el de Taxonomía Social o el de Vigencia de Vida en materia de Sostenibilidad.
En Hábitat estamos empezando a trabajar con esta legislación. Por sus características, en general, estos reglamentos no se aplicarían hasta 2025.
Aquí puedes escuchar la entrevista completa a Juan Antonio Luque