En un mundo en el que la sostenibilidad se ha convertido en una prioridad global, la inteligencia artificial (IA) emerge como una herramienta esencial para hacer frente a los desafíos ambientales. La IA verde, que se refiere a tecnologías de IA diseñadas para promover la sostenibilidad sin aumentar la complejidad computacional ni el consumo energético, está revolucionando diversos sectores.
ANOVO, empresa líder en circularidad de productos electrónicos, nos proporciona las claves sobre las bondades de la IA verde que no podemos pasar por alto:
- Reducción del consumo energético: Gracias a la IA, podemos optimizar la eficiencia energética de sistemas y dispositivos mediante algoritmos avanzados, reduciendo así las emisiones de carbono.
- Optimización de la gestión de recursos: La IA permite una gestión más eficaz de recursos como el agua y la energía, analizando datos en tiempo real y anticipando demandas futuras. Esto reduce el desperdicio y promueve
un uso sostenible de los recursos. - Monitorización y análisis de datos ambientales: Con la ayuda de sensores y dispositivos conectados, la IA puede monitorear y analizar grandes volúmenes de datos ambientales. Esto proporciona información valiosa sobre la calidad del aire, el consumo de agua y la generación de residuos, facilitando la implementación de estrategias para abordar problemas ambientales.
- Eficiencia en la toma de decisiones: La IA mejora la toma de decisiones al analizar grandes conjuntos de datos y extraer patrones relevantes, crucial en escenarios complejos donde múltiples variables influyen en las
decisiones.
El papel de ANOVO y la IA para un futuro sostenible
Con un enfoque en la eficiencia y la sostenibilidad, ANOVO lleva años con proyectos basados en IA y gestión de datos. En este sentido, la compañía cuenta con un modelo de machine learning que permite ser más ágiles en las operaciones, reducir considerablemente los errores ayudando en el diagnóstico de los equipos y a optimizar recursos reduciendo las necesidades de stock y de transporte por la reducción al mínimo de errores en el diagnóstico.
Este algoritmo no sólo contribuye a alargar la vida útil de los productos, sino que también reduce significativamente el desperdicio electrónico. “El machine learning nos ayuda con el diagnóstico y esto hace que se alargue la vida de los equipos, que se ahorre tiempo, que los clientes estén más satisfechos puesto que aumenta la calidad del servicio, reduciendo también el traslado de equipos” comenta José Pardo, Responsable de ESG de ANOVO.
“Además, estamos focalizados en la mejora de los procesos productivos, la optimización en las reparaciones de productos, reduciendo el consumo de energía y materiales. La IA nos ayuda a realizar diagnósticos en la reparación de los equipos de forma más eficiente, lo que al final afecta positivamente a la huella de carbono”, concluye José Pardo.
Asimismo, dentro de los planes de ESG de la compañía, destacan los próximos objetivos:
- Gestión de Carbono: Gracias a algoritmos de IA que ayuden al cálculo y monitoreo de la huella de carbono de la empresa, identificando áreas de mejora y calculando las emisiones ahorradas por alargar el ciclo de vida de los productos.
- Reducción de residuos: Uso de IA en el diseño de procesos que minimicen los residuos y maximicen la reutilización y el reciclaje.
- Concienciación: Implementación de sistemas de IA que proporcionen información y recomendaciones para fomentar comportamientos sostenibles entre los trabajadores.
José García, CEO de ANOVO, comenta: “Es fundamental que los Gobiernos lleven a cabo iniciativas como el Plan Nacional de Algoritmos Verdes que fomenten la digitalización para impulsar la transición ecológica. La alianza entre IA y el desarrollo sostenible es necesaria para asegurar un futuro en el que el progreso tecnológico vaya de la mano con la protección del medioambiente”.
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