Grupo Lactalis, empresa líder del sector lácteo tanto a nivel mundial como nacional, está firmemente comprometida con la lucha contra el cambio climático, la protección del medioambiente y la transición hacia una economía circular. Una parte sustancial de ese compromiso tiene como eje el Objetivo de Desarrollo Sostenible 6, que hace referencia al agua limpia y al saneamiento. El objetivo de Grupo Lactalis en relación a su huella hídrica es optimizar la utilización de este recurso, imprescindible para el proceso de elaboración de alimentos lácteos.
La estrategia de la compañía para la reducción del uso de agua pasa por poner en marcha una batería de medidas que van desde la prevención en el consumo a su reducción.
Para minimizar los usos de agua en el origen se están aplicando tecnologías más eficientes, cambiando los procesos de trabajo, implementando sistemas en circuito cerrado y reutilizando los caudales de procesos aptos para diferentes usos. Se han instalado contadores para el seguimiento de consumos en distintas partes de los procesos de elaboración de alimentos lácteos, identificando preventivamente pérdidas potenciales de agua y actuando de inmediato para evitarlas.
En segundo término, también se ha mejorado la eficiencia de los procesos en los que se emplea agua y se ha introducido maquinaria más moderna que reduce el volumen utilizado. Un ejemplo de esta reducción de la huella hídrica e incremento de la eficiencia en el uso de este recurso lo constituye la fábrica de Lactalis Puleva de Villalba (Lugo), que presume de las mejores ratios de la industria láctea nacional, con menos de un litro de agua por cada litro de leche elaborado.
También merece la pena destacar el esfuerzo hecho por la planta de Lactalis Puleva de Granada, que elabora leches clásicas, funcionales y enriquecidas, leches infantiles y batidos, y que en un período de diez años ha logrado reducir en un 60% su consumo de agua. En ese mismo plazo, la planta de Lactalis Nestlé de Marchamalo (Guadalajara), que elabora yogures y postres lácteos, ha conseguido reducir su consumo de agua en un 38%.
Como tercera medida, la gestión y depuración del agua utilizada también ocupa un lugar importante en las inversiones realizadas en los últimos años en las ocho plantas de Grupo Lactalis en España, que cuentan con estaciones depuradoras que realizan un trabajo imprescindible antes de verter el agua usada a la red pública de saneamiento.
También es importante la labor realizada para implicar, formar y sensibilizar al personal y a los equipos de las distintas secciones y talleres de producción de las plantas, para que participen en la búsqueda de soluciones eficientes para disminuir el uso de agua.
Pero estos avances no deben detenerse: la gestión del agua supone ya actualmente un reto, que se prevé cada vez mayor en el contexto del cambio climático, y que sitúa la reducción de la huella de carbono en un papel destacado en el marco de las políticas de responsabilidad social corporativa de Grupo Lactalis.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial del Agua (22 de marzo).