La plataforma Futuro en Común presentó con éxito “El INconFORME”, ante Pablo Bustinduy, Ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030. Un documento que reúne las luchas compartidas y propuestas para el cambio consensuadas entre más de 50 plataformas y organizaciones de la sociedad civil de diferentes sectores en el ecuador de la Agenda 2030.
El INconFORME analiza las actuales crisis en materia ESG, proponiendo medidas urgentes para acelerar el cambio de modelo que no afecte los derechos humanos ni perjudique al medio ambiente. Las demandas consensuadas buscan avanzar hacia una economía del bienestar al servicio de las personas y el planeta, erradicando las desigualdades y favoreciendo una mayor y mejor democracia, con el fin de dejar una mejor huella en el mundo.
Intervenciones a favor de ‘El INconFORME’
La ronda de intervenciones en pro de El INconFORME fue iniciada por Marcos González, Presidente Editor de Corresponsables, quien resaltó la labor de Corresponsables visibilizando acciones de Responsabilidad Social, Objetivos de Desarrollo Sostenible o la Agenda 2030, así como la misión de elaborar un gran reportaje que aborden las temáticas planteadas. “En Corresponsables trabajamos con las empresas. La idea es profundizar en esta temática, empezando por la gestación del informe, seguido de iniciativas planteadas por parte de las organizaciones y la formación de alianzas para cumplir la agenda”.
Además del esfuerzo individual, Marcos González añadió el gran impacto que supondría trabajar de forma colectiva con una visión común: “La dificultad de generar alianzas es evidente porque existen empresas y grandes empresas que contaminan, explotan laboralmente a sus empleados realizan el discurso de la responsabilidad social y de la sostenibilidad. Pero, por otro lado, todas las ONG colaboran en diferentes proyectos con ellas”.
Belén Sánchez, Directora de Programas Internacionales de Fundación Secretariado Gitano, continuó resaltando la labor de Fundación Secretariado Gitano como una de las 50 entidades sociales que conforman de Futuro en Común, que define como “una alianza de más de 50 entidades sociales, plataformas y redes multisectorial, que nació con la convicción de que la Agenda 2030 se convertiría en la hoja de ruta que el mundo necesitaba para avanzar en la superación de los retos establecidos, y que lamentablemente siguen siendo vigentes a día de hoy.
Belén Sánchez añadió el desempeño de esta alianza en la creación de una visión compartida y la importancia de impulsar políticas públicas como palanca de cambio hacia una transición justa y sostenible: “Entendemos que los retos, conflictos y soluciones están interrelacionadas entre sí. Nuestro trabajo se ha centrado en realizar propuesta, hemos participado en el desarrollo de la Agenda 2030 y nos hemos constituido como interlocutor fundamental para el seguimiento de los ODS. Actualmente, nos encontramos a mitad del periodo de ejecución de la Agenda 2030 y mantenemos una preocupación compartida: la situación ha mejorado en algunos indicadores y metas, pero en el resto no se ha hecho nada o ha tornado a peor. De aquí surge la necesidad de impulsar las políticas públicas y las inversiones de manera urgente. Debemos priorizar cuáles deben ser estas palancas y hacerlo de forma urgente si queremos trasladar el sentido de urgencia para que los gobiernos establezcan aquellas políticas públicas que son más estratégicas para llevar a cabo una transición justa y sostenible, eliminar la creciente desigualdad y avanzar en la democratización del país a través de una acción global justa y con el enfoque de derechos humanos en el centro”.
Las empresas juegan un papel esencial en la transición justa y sostenible. Según Belén Sánchez, “pueden ejemplificar el tema medioambiental, que su actividad no genere daño medioambiental, todo lo que tiene que ver con su propia actividad. En el ámbito interno, cómo estas empresas contratan a personas de minorías étnicas o a personas migrantes. Adecuan un poco esa formación de entrada para que determinadas personas que lo tienen difícil para entrar al mercado de trabajo tengan ese tipo de oportunidades en los nuevos sectores. La desigualdad y la pobreza no solo se erradica con políticas públicas sociales, sino que tiene mucho que ver con cómo se generan oportunidades reales de acceso al mercado de trabajo, sobre todo en nuevos empleos emergentes. Tenemos que hacer que estas dos líneas converjan y la empresa es la ejemplificación de esa posible práctica positiva”.
Para finalizar su intervención, Belén mencionó la labor descentralizada de Futuro en Común: “Tenemos que hacer de incidencia con las comunidades autónomas, que es clave. El reto es la politización de la Agenda 2030. Debemos encontrar la manera de cómo llegar a esos responsables políticos que tienen ciertas resistencias respecto a la Agenda 2030 y la solución tiene que pasar por entrar a política a política, porque seguramente cuando entremos en lo concreto no hay tanta oposición como pensamos”.
Analizando el contenido del INconFORME, Arantxa Acha, Directora de UN Etxea, remarca la concienciación de los retos climáticos y su impacto en el bienestar social, así como la demanda de una mayor implicación por parte del sector privado: “El informe es un “cocido” en el que todos los sectores aprendemos y aportamos conjuntamente al ser una mirada transversal. Las crisis a las que nos enfrentamos son crisis interrelacionadas entre ellas. Se trata de un informe enfocado a la incidencia de instituciones públicas, pero el sector privado también tiene un papel fundamental a la hora de acatar los marcos normativos existentes y por existir, además de ser líderes en esas transformaciones y en esos retos y ser un interlocutor más en esa perspectiva de sociedad al completo. Este informe está más enfocado en instituciones públicas, pero el sector privado tiene un papel fundamental”.
Atrantxa Acha también destacó el abanico de herramientas que poseen las empresas en materia de derechos humanos, así como la futura obligatoriedad de la implementación de las mismas: “La debida diligencia es fundamental y hay ejemplos muy interesantes de alianzas entre el sector social o del mundo medioambiental, y la alianza es interesante para hacer ese acompañamiento en la transición de las empresas, que tiene un alto impacto en la gestión de recursos, por ejemplo. Ejercer como una tercera pata que hace un análisis para transformar, con recomendaciones y con acreditaciones, o con reconocimientos expresos cuando eso ocurre, tanto en el sector medioambiental como en el de derechos humanos. Hay herramientas, algunas son ya estandarizadas y otras se trata también de hacer innovación”.
La siguiente voz a favor del INconFORME fue de Enrique Segovia, Director de Conservación de WWF, quien matizó el papel que juegan los propios sectores sobre las empresas: “Si hablamos de una transición justa y ecológica, hay sectores que tienen que cambiar a las empresas porque les afecta directamente. Existen empresas que lo están entendiendo, y otras no, directamente. Hay empresas que tienen que analizar que hay sectores que van a crecer y hay sectores que van a decrecer porque no existen recursos suficientes para todos. Y las empresas tienen un papel muy importante que jugar, tienen que prevenir esas situaciones, tienen que colaborar con sus empleados y con las administraciones en crear programas de transición justa. Estamos a tiempo de poder hacerlo y podemos hacerlo bien o podemos hacerlo mal y en ese sentido, las empresas son claves en este momento. Algunas de las peticiones son peticiones políticas a las administraciones. Otras son peticiones a las administraciones y a las empresas”.
Enrique Segovia aseguró que Futuro en Común trabajará en la difusión, aunque se debe continuar en la incidencia de estas temáticas por parte de las distintas entidades, pero también está el seguir incidiendo en estos temas dentro de los distintos foros, consejos… “Creo que muchas de las cosas que pedimos aquí las podemos llevar a la práctica. Debemos ponerlas en práctica y mostrar que es posible otro cambio, eso es importante. Nosotros tenemos como referencia la Agenda 2030 porque es un marco que permite mirar todas las políticas unas a otras. Muchas de las medidas que hay aquí van a trascender a la Agenda 2030, claramente. Es de largo plazo o se requiere más tiempo para ponerlas en marcha. Es una hoja de ruta que nos va a servir para avanzar mucho en todo este ámbito”.
Continuando con una de las palabras más mencionadas de la jornada, “transición”, Andrés Amayuelas, Secretario de Amycos y Presidente de la Coordinadora de ONGD de Castilla y León, hizo uso de su palabra para concienciar sobre la progresión hacia un mayor uso de energía limpia, aunque también mencionó las dificultades presentes en el sector: “Se trata de un sector muy centralizado y se debe cambiar a un sistema energético libre de emisiones y descentralizado. Hay un peso centralizado, pero tiene que haber un peso absolutamente centralizado. El autoconsumo y las comunidades energéticas son fundamentales. Esa es la democratización de la energía y ahí las empresas tienen que evitar poner trabas a que a la puesta en marcha. Un ejemplo es el sistema agroalimentario, que es absolutamente intensivo en emisiones y en el uso de agua. No hay recursos suficientes para seguir manteniendo una producción excesiva de alimentos a bajo coste soportados por mano de obra barata, inmigrante y fuera de toda legalidad. Todo esto es una práctica frecuente”.
Otro factor a resaltar fue la labor de las empresas en la cadena alimentaria: “Tienen un papel clave y el problema es que lo juegan cuando se les obliga. Si lo tienen que hacer de forma voluntaria, no lo hacen. Solo lo hacen de forma voluntaria cuando tienen un riesgo reputacional. Creo que tiene que haber un cambio importante en las empresas para pasar del volumen, para que de verdad hagan acciones, no porque se tengan que sentir obligadas, sino que las acciones realmente voluntarias sean voluntarias”.
La otra realidad de los testimonios
Además de la variedad de ponentes en las portavocías, la presentación de INconFORMe contó con la voz de testimonios de personas que han presenciado y/o padecido situaciones de desigualdad, tanto en el ámbito laboral como en sus derechos humanos.
Selene de la Fuente, Técnico de Igualdad de Trato y Lucha contra la Discriminación, mostró un artículo que señalaba el caso de una mujer gitana que pudo romper los estereotipos sociales y convertirse en abogada: “En el artículo muestro una doble visión. Con ello, hemos querido mostrar y hacer visible la discriminación que sufre la comunidad gitana. Que es una discriminación que en la mayoría de los casos es ignorada. No se es consciente de los prejuicios y la situación real que hay y también demostrar cómo esa discriminación afecta a todos los aspectos vitales como el acceso a la vivienda, educación, sanidad, acceso a bienes y servicios, empleo… La comunidad gitana se encuentra en una situación de vulnerabilidad y con unos obstáculos previos que otras personas no pertenecientes a minorías o colectivos vulnerables no sufren y que, actualmente, dentro de las herramientas jurídicas y de defensa que existen en nuestro ordenamiento jurídico, no son suficientes. Actualmente, existen normas como la Ley Integral para la Igualdad de Trato, pero no es eficaz”.
Carolina García, trabajadora del hogar y cuidados, destacó la adversa situación y la vulneración de derechos humanos que padecen las personas migrantes, especialmente las mujeres: “Pertenezco a un colectivo de trabajadoras del hogar que en su mayoría somos migrantes y hemos querido también visibilizar la lucha que estamos haciendo nosotras con respecto a solicitar derechos mínimos que no tenemos garantizados en el trabajo, aunque también tan invisibilizado que prácticamente no se considera como un trabajo. Sin reconocimiento de derechos mínimos y sin la posibilidad de regularizar nuestra situación con la actual Ley de Extranjería, trabajamos en esa ‘invisibilidad’ y nos encontramos expuestas al acoso, al maltrato, explotación, al racismo, etc. En la mayoría de ocasiones, estas labores las realizamos las mujeres. Desde ahí viene ese “no reconocimiento” de ese trabajo porque parece que como que nosotras lo pudiéramos hacer por el hecho de ser mujeres. Creo que es importante que se den derechos al trabajo de los cuidados porque muchas mujeres están sosteniendo de alguna manera a sus familias. No podemos continuar en este rumbo porque tenemos derechos y somos personas”.
Otra de las voces destacadas corrió a cargo de Antonio Cabrera, Médico de Atención Primaria en Madrid, que comenzó destacando la labor de Medicus Mundi: “Es una organización que ha trabajado a nivel de cooperación internacional en actividades sanitarias. Dentro de esta crisis en la que vivimos, pues también se ha generado una crisis sanitaria que ya se venía gestando desde hace años, a partir de la disminución de los presupuestos, de recortes presupuestarios a partir de la crisis del 2008. Esa situación se tensó a partir de la crisis del COVID. En España, el acceso al sistema sanitario se ha convertido en uno de los principales problemas a nivel social para las personas. La población está sufriendo problemas porque muchos profesionales han dejado mucho de la profesión tras el COVID y por la compleja situación sufrida en aquel entonces. La Organización Mundial de la Salud ya ha marcado las líneas, que sobre todo para que un sistema funcione, para que el sistema nacional de salud funcione, tiene que estar basado en la atención primaria. Se calcula que, al menos un 25% del presupuesto tiene que estar dedicado a la atención primaria para poder dar acceso de forma integral a la población”.
Antonio Cabrera aclaró la controvertida situación que actualmente atraviesa el sector sanitario y la influencia de las diversas políticas y el presupuesto destinado al sector: “No son solo médicos, hay fisioterapeutas, enfermeras, matronas… y que en esas consultas se atiende de manera global a todos, muchas veces, estos temas de los que estamos hablando ahora, que no es el punto de vista solo sanitario. Nos encontramos con problemas sociales, problemas de acosos laborales, que muchas veces se traducen en malestares físicos. Esos malestares sanitarios que muchas veces se traducen en las consultas. La manera que se ha demostrado a través de los ODS y la Proximidad de Salud es que la atención primaria fuera el pilar principal, porque además se ha demostrado que tener el mismo profesional durante 15 años ha demostrado que disminuye hasta un 25% la mortalidad. El problema es de políticas, de presupuestos y que existe conflictividad laboral. Dentro de políticas como la transición ecológica, igualdad o derechos laborales, la salud está implicada ahí y es todo dentro de lo mismo. Desde movimientos como Médicos Mundi, se aboga por la cobertura sanitaria universal, que las personas que llegan a trabajar tengan derecho a una asistencia sanitaria sin restricciones de manera equitativa”.
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