Forest Stewardship Council (FSC) encargó a IPSOS en 2022 que llevara a cabo uno de los estudios consumo más grandes del mundo en torno a los bosques, encuestando a 26.800 consumidores de 33* países, con una muestra de 800 personas por país, exceptuando Estados Unidos donde la muestra es de 1.200.
Este nuevo estudio revela información relevante sobre las principales preocupaciones de los consumidores en relación a los bosques, en quien confían para solucionar los problemas a los que se enfrentan las masas forestales y cuáles son las decisiones e inclinaciones de compra que realizan de manera individual, para abordarlas y marcar un cambio.
Problemas que más preocupan
Si bien la inestabilidad económica y los conflictos bélicos son las principales preocupaciones de los consumidores, junto a cuestiones relativas a las enfermedades y a la salud, el cambio climático sigue siendo una preocupación de primer orden, por delante del desempleo y la desigualdad.
En el contexto de los problemas forestales que más preocupan a los consumidores, el estudio revela que la pérdida de biodiversidad, el cambio climático y la deforestación son las principales preocupaciones persistentes. En el caso de los consumidores españoles las principales preocupaciones son los incendios forestales, el impacto en el clima por la pérdida de superficie forestal, la deforestación y la pérdida de especies vegetales y animales.
En los países donde existen graves problemas forestales locales, las preocupaciones vinculadas se reflejan en los resultados del estudio. De manera que en España y en Estados Unidos su principal preocupación son los incendios y en Indonesia, las inundaciones, lo que pone de relieve que los impactos del cambio climático se manifiestan cada vez más sobre el terreno.
Los consumidores españoles optan por abordar sus preocupaciones en torno a los bosques a través de sus decisiones de compra. Casi tres cuartas partes de los encuestados, un 71 %, afirman que preferirían elegir productos que no dañen a las plantas y los animales, mientras que casi dos tercios, un 63%, intentan comprar productos envasados con materiales renovables. Y casi en la misma proporción, 62%, prefiere elegir productos que no contribuyan al cambio climática, un porcentaje ligeramente superior a la media del estudio de consumidores a nivel global (59%).
Cifras clave del estudio
– El 71% de los consumidores afirman que prefieren elegir productos que no dañen las plantas y los animales.
– El 64 % espera que la información sobre la sostenibilidad de los productos esté certificada por una organización independiente.
– El 63% afirma que intenta comprar productos envasados con materiales renovables como papel en lugar de plástico.
– El 62% cree que puede ayudar a proteger los bosques comprando productos certificados por una organización independiente.
FSC es la certificación forestal más reconocida a nivel mundial.
En 33 países a nivel mundial, casi la mitad, un 46 % de los consumidores encuestados reconocen el logotipo FSC; más alto que cualquier otro sistema de certificación forestal testado. El reconocimiento es mayor entre los jóvenes de 18 a 24 años. FSC es especialmente reconocido en China, Reino Unido, Alemania, Brasil, Italia y Dinamarca. Entre los consumidores españoles el reconocimiento coincide con la media del estudio situado en un 46%.
De manera similar, más de las tres cuartas partes de los consumidores a nivel global, un 77%, muestran niveles de confianza de moderados a altos en FSC para proteger los bosques, que es considerablemente más alto que en los gobiernos o en las empresas**. Y aunque las dificultades económicas son la principal preocupación mundial, la mitad de los consumidores que reconocen FSC afirman estar dispuestos a pagar más por un producto si cuenta con la certificación FSC.
Las empresas certificadas y los productos que llevan la etiqueta FSC tienen un compromiso compartido para proteger los bosques para las generaciones futuras. FSC proporciona a las organizaciones y consumidores de todo el mundo la seguridad de que los productos forestales que compran y venden provienen de bosques gestionados de manera responsable y que cumplen con estrictos estándares ambientales, sociales y económicos.
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