Fairtrade Ibérica conmemora los 15 años de inicio de su actividad en nuestro país. ¿Cómo ha evolucionado a lo largo de este tiempo la situación del Comercio Justo en España?
Sin ninguna duda, la evolución ha sido muy positiva. Solo hace falta ver los datos publicados recientemente en el Informe Anual de Comercio Justo para ver que las ventas de Comercio justo en España han evolucionado de manera muy notable en los últimos años.
A esto ha ayudado de manera clara, la apuesta de algunas de las empresas de gran distribución por incorporar a los lineales productos de Comercio Justo, haciéndolos cada vez más accesibles y asequibles a los consumidores.
En este sentido, es importante destacar que, de los 138.5 M€ de productos de Comercio Justo que se venden en nuestro mercado, 130.5 M€ están certificados con sello Fairtrade.
En relación con el resto de Europa, ¿en qué punto está España en cuanto al consumo de productos responsables se refiere y cuáles son sus principales retos y amenazas?
En nuestro país se ha producido en los últimos años un incremento considerable del gasto anual per cápita de los consumidores españoles, pero este consumo está todavía muy lejos del consumo medio en Europa, que está sobre los 20 € per cápita. Por tanto, todavía queda un buen trecho para alcanzar esa cifra.
Este es nuestro principal reto: hacer que los productos certificados con sello Fairtrade se integren de una forma todavía más decidida en nuestros hábitos de consumo.
Esto pasa, sin ninguna duda, por una apuesta más potente por parte de la gran distribución en nuestro país. Se ha avanzado mucho en esta línea, pero todavía tenemos que mejorar mucho más.
Respecto a las amenazas quizá podríamos llamar la atención sobre la posibilidad de que lleguen otras iniciativas que, ante la demanda de nuestro mercado, suavicen las exigencias de lo que significa llevar a cabo un Comercio Justo.
¿De qué manera el Comercio Justo ayuda al impulso de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)?
Desde luego el Comercio Justo y los productos certificados con sello Fairtrade están totalmente alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
De manera específica, a nivel internacional, estamos trabajando de forma muy relevante en ayudar a alcanzar el Objetivo 1 (acabar con la pobreza), 2 (hambre cero), 5 (igualdad de género), 8 (trabajo decente y crecimiento económico), 12 (producción y consumos responsables), 13 (acción por el clima), 16 (paz, justicia e instituciones solidarias) y 17 (alianzas).
Fairtrade es un facilitador para que los ciudadanos y las empresas aporten de manera decidida en alcanzar los objetivos definidos en la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
¿Qué nuevas iniciativas están trabajando para fortalecer e impulsar todavía más el consumo sostenible y responsable?
Desde Fairtrade Internacional se ha desarrollado una estrategia de desarrollo del sello que permite certificar no solo un producto en su conjunto, sino también algunos ingredientes concretos. En España hemos puesto en marcha estos sellos para el cacao y el azúcar.
Esto significa que una empresa que esté produciendo, por ejemplo, galletas, puede usar el ingrediente del azúcar certificada por Fairtrade.
De este modo, estamos facilitando que muchas más empresas puedan incorporar algún ingrediente certificado con el sello Fairtrade en su producto final.
¿Qué papel juega la comunicación en su estrategia para consolidar a Fairtrade como sello de Comercio Justo para la sostenibilidad?
La comunicación es clave para impulsar y consolidar la propuesta de Fairtrade. En los dos últimos años hemos intensificado de manera muy relevante nuestra comunicación, tanto de cara al consumidor final como hacia las empresas de distribución que pueden incorporar nuestros productos en los lineales.
Es muy necesario trabajar este ámbito de la comunicación para explicar de forma clara y concreta que hay detrás del sello Fairtrade y a día de hoy está dando resultados muy positivos.