En los últimos tiempos se ha puesto de relieve la estrecha correlación entre la implantación de un modelo de economía circular y la sostenibilidad. Y es que, en un mundo con recursos limitados, el uso eficiente de los mismos, así como la recuperación de todos aquellos que sea reutilizables, es imprescindible si no queremos comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer las necesidades más básicas.
La realidad nos revela día a día que hemos de ser creativos para avanzar en este modelo y encontrar nuevas fórmulas con las que contribuir a minimizar el impacto ambiental reduciendo la dependencia de esos recursos naturales finitos. Y es que, al reciclar y reutilizar, disminuimos la cantidad de residuos generados y, por consiguiente, la necesidad de extraer nuevos recursos para producir bienes y servicios. Además, y es algo que hemos de destacar aún más en estos momentos de crisis, la economía circular puede fomentar la creación de empleo y el desarrollo económico sostenible.
Dicho esto, y hablando concretamente de nuestro sector telco, los datos que nos proporcionan entidades como Ametic y Accenture nos indican que en España habría ahora más de 50 millones de terminales móviles; y, en ese afán por estar a la última de todo, un tercio de los usuarios de smartphones admite que tienen la intención de renovarlo en menos de un año.
Es cierto que el acceso a la tecnología y a las herramientas digitales es imprescindible si no queremos quedarnos atrás. Pero no lo es menos que, para ello, podemos hacer uso de dispositivos reciclados, puestos a nuevo, y que tienen aún una vida útil prolongada.
Por ilustrar este fenómeno de estrenar y estrenar baste decir que, actualmente, la media de duración de un móvil en España es de un año y ocho meses según un estudio realizado por Kantar, siendo uno de los países con menor ciclo de vida de un producto, a pesar de que la media mundial no supera los dos años. Por eso, se busca alargar la vida de uso de los dispositivos, que se calcula podría ser de cinco años aproximadamente.
En Orange creemos esto es insostenible y que un pilar fundamental para la circularización de la industria de las telecomunicaciones es el aprovechamiento de los productos y materiales más allá de su primer uso. Con este fin, dentro de nuestro programa #OrangeGoesGreen, trabajamos en iniciativas 360º que prolongan la vida de los dispositivos a través de la reparación, la recuperación, el reacondicionamiento y el reciclado.
Solo en 2022, y a través de las distintas campañas de sensibilización y concienciación que hemos realizado entre nuestros clientes, hemos recogido más de 112.000 móviles, lo que implica una tasa de recuperación, con respecto a los móviles que ponemos en el mercado, del 6,93%.
Una vez recogidos, procedemos, junto a socios especializados, a reacondicionarlos o repararlos, para poder entregarlos como móviles de sustitución, para distribuirlos a familias con recursos limitados… O simplemente para aquellos usuarios que, concienciados con estos temas, se unen a la creciente tendencia de los smartphones de segunda mano.
Con esto pretendemos alargar la vida de los dispositivos para reducir la contaminación que produce la fabricación de unos nuevos que correrán el mismo destino en pocos años
Y esto lo llevamos más allá de los smartphones, por supuesto. También hemos recogido un millón de dispositivos fijos, de los cuales más 790.000 se han puesto a punto y entregado a nuevos clientes, alcanzando una tasa de reutilización del 75%. El resto de los dispositivos, mientras tanto, son tratados adecuadamente por nuestros socios externos homologados en gestión de residuos para evitar desechos contaminantes.
Eco-diseño
Otro aspecto reseñable en el mundo de la economía circular es la incorporación del ecodiseño a los productos telco, utilizando, tanto para estos dispositivos como para su empaquetado, todo tipo de materiales sostenibles y reciclado, para reducir impacto y ahorrar.
En el caso de Orange, un ejemplo paradigmático de esto es nuestro router Livebox 6, para el cual utilizamos plástico reciclado en la carcasa; hemos retirado plásticos y elementos metálicos en el contenido del pack; se embala con cartón 100% reciclado y certificado FSC y solo utilizamos tintas 100% vegetales para su impresión. Es más, el propio aparato minimiza su consumo eléctrico y el de otros dispositivos que se conectan a él gracias al estándar Wi-Fi 6.
En definitiva, una muestra de cómo se pueden conjugar modelos de negocio circular como el suministro circular, la recuperación de recursos, la aplicación de materiales sostenibles y el ahorro energético.
En todo caso, esta debe ser una labor de todos, involucrando también a nuestros propios clientes y al resto de la industria. Por esta razón, nos hemos unido a otras operadoras de telefonía móvil de Europa para actualizar y poner en marcha un nuevo sistema de etiquetado, Eco Rating, para el sector telco, que permitirá a los consumidores identificar y comparar los teléfonos móviles más respetuosos con el medioambiente a la hora de realizar sus compras. Al mismo tiempo, con ello animamos a los fabricantes a reducir el impacto ecológico de sus dispositivos, tomando en cuenta que en la decisión de compra de los clientes cada vez tiene más peso esta elección “verde”.
Infraestructuras sostenibles
Siendo como somos un operador de red, decididamente comprometido con la inversión en infraestructuras para extender los beneficios tecnológicos para todas las personas, es importante poner también de relieve la importancia de aplicar la sostenibilidad a estos despliegues.
Y es que el sistema de red de una operadora requiere de infraestructuras grandes y complejas, que con el tiempo pueden quedar obsoletas. Tomando esto en cuenta, y pensando en reducir al mínimo el impacto posible sobre el medioambiente, también en este apartado estamos aplicando la reutilización de material y equipamiento siempre que sea posible, buscando alternativas para darles un nuevo uso o desmontando las instalaciones para el reciclado de sus materiales.
Desde Orange lideramos, de hecho, un proyecto internacional de reutilización de materiales desmontados, apostando por su uso en nuevos despliegues o en tareas de mantenimiento de la red.
De esta forma, les damos una segunda vida mediante su venta a terceros o a otros países del nuestro Grupo a través de una iniciativa que hemos bautizado como “OSCAR” (Orange Sustainable and Circular Ambition for Recirculation). Y de la misma forma que hacemos con los dispositivos, en el caso de que el material no sea reutilizable, nos aseguramos con proveedores certificados de la gestión y reciclaje de los residuos, cumpliendo con la legislación vigente y asegurando su correcto tratamiento.
En definitiva, iniciativas que con las cuales generamos un círculo virtuoso, que aplicamos a toda nuestra actividad, y con la que queremos contribuir a implantar un modelo sostenible y de futuro para todos.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial del Reciclaje.