Conscientes de la importante relación que tiene esta especie con uno de los productos más vendidos por la compañía, la almendra, Borges International Group les rinde homenaje a través de un vídeo donde destacan la relación simbiótica que hay entre el almendro y las abejas.
La floración del almendro es muy importante para las abejas porque es una de las primeras floraciones después del invierno y es el primer alimento tras un período de hibernación.
Además, las abejas por su parte, ayudan a la polinización de las flores, necesario para que pueda desarrollarse la almendra y posteriormente ser cosechada. De este modo, se convierte en una relación simbiótica la cual es beneficiosa tanto para el almendro como para la abeja.
En las fincas de almendros que tiene Borges se instalan de forma estratégica 4,5 colmenas por hectárea. Cada una puede tener una población de entre 30.000 y 40.000 abejas, y a los pocos días de terminar la polinización, la población puede llegar a las 60.000 abejas.
A través del siguiente vídeo, enmarcado dentro de la campaña de Comprometidos Por Naturaleza, Borges ofrece datos y detalles sobre el proceso de polinización en sus plantaciones de almendros:
Borges ha cuantificado en 180 millones el número total de abejas que podrá llegar a tener cuando las plantaciones del Grupo estén en plena producción. Con estas cifras, destacan también la importante labor de este cultivo para la preservación de la especie.